SÁLVAME EPÍLOGO

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El lugar comenzaba a parecer cada vez más conocido para mi, cada rincón cada superficie había explorado este lugar por la mañana cuando llegue hasta aquí por mi cuenta. El césped cubría  la húmeda tierra los pocos árboles de un tamaño considerablemente alto. No sabía que hacer solo permanecía sentado allí viendo como algunas de personas que ya conocía comenzaban a irse ya.

El cielo estaba oscuro y el frío caía sobre los chicos, mis padres y yo... Los que quedábamos

Leí nuevamente las palabras que se encontraban en la lápida frente a mi.

Jericho Smith Wells. 2003 - 2020 

Luego venía una frase acerca de lo fuerte y valiente que había sido todos estos años de su visa, suspiré entrecortad-amente, cubriendo mi rostro con ambas manos y esperando que nadie me viera llorar otra vez. Sentí los pequeños pasos de mis pequeñas hermanas y mi hermana mayor cerca de mí antes que volteara sentí 6 brazos abrasándome  las piernas y los hombros las pegue más a mí reconfortando-nos a si mismos las necesitaba a todas.

Nadie había dicho nada en todo el día acerca de mi aspecto, no había dormido ni comido y con suerte esta mañana me había bañado solo por ella.

EL padre de Gustaf y de Jericho había viajado desde Perú para poder asistir al funeral de su hija lo bueno era que ya sabía acerca del trabajo de Gustaf  por lo que no sacó el tema. Nos presentó a mí como el novio de su hija y él sólo me abrazó y pude sentir el dolor de su nueva pérdida.

También había venido Galand el hombre que la golpeaba a diario iba vestido pero esposado y con un policía a cada costado de él no dijo nada y se mantuvo allí en una de las ultimas sillas hasta que la ceremonia termino y se lo llevaron en una patrulla.

Los chicos me habían intentado animar en estos días pero nada funcionaba trataba de poner mi mejor esfuerzo  pero estaba muy mal demasiado mal mi madre me dijo que me llevarían con ayuda para poder superarlo, pero yo sabia que no podría hacerlo.

Cambien se hallaba su supuesto padre también estaba con cadenas en las manos el si tenia mas policías el solo se acerco a la tumba donde se encontraba Jericho dijo algo y se fue en el patrullero ya que iba a tener cadena perpetua por violencia familiar  y violencia física.

- Ban... - se quejó Elaine bajo mi fuerte agarre, la solté de a poco.

- Lo siento...- murmuré por lo bajo.

- Mamá me dijo que ya nos íbamos.

Miré a mi madre había llorado desde el principio hasta el final. Yo sabía que le tenía mucho cariño a Jericho pero jamás pensé que sería mucho.

- Iré luego, diles que llegaré más tarde a casa- besé su mejilla mientras la ayudaba a levantarse. Ella me sonrió pero yo no pude sonreírle de vuelta no tenía ya fuerzas para hacerlo. 

Mis padres se acercaron a mí y mi madre se agachó a mi lado, quedando frente a la tumba de Jericho.

- Hijo...- comenzó. Me tomó las manos- No te dejes caer con esto. Ella no quería que algo te sucediera- murmuró.

- Ella ya no está aquí para decirlo - le repliqué.

- Pero estará siempre en tu corazón Ban siempre - besó mi mejilla antes de levantarse e irse con mis hermanas y mi padre a casa.

No quite mi vista de su nombre su hermoso nombre.

Unas pequeñas gotas de agua comenzaban a caer por el lugar manchando las lápidas de cada persona que estaba enterrado aquí mojaba mi cabello de a poco haciendo que quedara plano sobre mi piel. Ella no debía irse de ese modo me culpaba cada minuto a mí mismo por no haber estado allí para ella para protegerla y cuidarla. Si hubiera llegado más rápido quizás no estariamos aqui ahora alcé la vista al cielo, sintiendo cada vez la lluvia comenzaba a caer más rápido sobre mi rostro.

- Perdóname, Jericho jamás debiste meterte conmigo. No estarías allí... Pero yo soy egoísta, y te quería sólo para mó- inhalé profundamente, dejando que mis lágrimas se confundieran con la lluvia- Cuando ví las cosas que te hacían me prometí a mí mismo que te cuidaría y que nada te sucedería Jericho te amo por favor perdóname

-No es tu culpa, Ban

Mire a mi lado para ver a Gustaf allí de pie, mirándome con lástima

- No sabías lo que sucedería nadie lo sabía 

- Pero yo la llevé a ese Gustaf por mí termino asi 

- Sabes que nuestro trabajo implica la vida de nuestros seres queridos 

Suspiré escondiendo mi cabeza entre las piernas y brazos llevados al pecho.

- Ya nos vamos tenemos que ordenar algunas cosas- murmuró

- Bien...

Ya habían pasado alrededor de una hora y yo seguía allí sin moverme empapado hasta más no poder los truenos resonaban por todo el lugar vacío y los relámpagos iluminaban todo. Estaba apoyado sobre la lápida de Jericho mirando a la nada misma, aún recordando su risa nerviosa y su mirada sus labios sobre los míos sus temblorosas caricias, me torturaba no podía estar sin ella.

- ¿Puedes creer que en dos semanas me enamoré pérdida y locamente de tí? - reí suavemente, encogiendome en mi lugar- Me gustaría que estuvieras aquí aunque yo te siento en mi mente oh, Jericho te extraño- lloriquee 

Deje que mis lágrimas se confundieran con las gotas de la lluvia nadie estaba allí para darme apoyo ahora mismo, nadie cuando más lo necesitaba  

Salvame (ADAPTACIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora