Supercorp/Meltie

Supercorp 2

Mandarinas

Lena se había enterado de la identidad por medio de su hermano antes de morir, antes de ser asesinado por la misma Lena y así llevando una carga completa encima que la torturaba.

En la noche Kara le había invitado a una cita de juegos con todos sus amigos pero la CEO estaba tan molesta que solo ignoró la invitación, ignoró los mensajes de la kriptonana toda la tarde e incluso las llamadas. No quería atenderla y mandarla al demonio por tal traición.
¿Qué le costaba decirle la verdad? ¿Acaso dudaba de ella por ser una Luthor? ¿Acaso jamás confió en ella? ¿Toda la amistad que compartieron era una simple mentira? ¿Todas esas veces que su mejor amiga la defendió solo era una actuación? ¿Acaso... Acaso su relación era una farsa? Si era así entonces Kara no podría sentir aprecio por ella... de ningún tipo.

Se quedó en su oficina hasta las media noche mientras se bajaba la botella de vino blanco que compró para esa noche, pues ya se había tomado todo el whisky que estaba en su mini bar.
Miraba la vista que le otorgaba su oficina con una expresión seria, neutra, sin nada.
Aunque no pudo ver que su ex mejor amiga aparecería allí sin avisar, le había llamado la atención pero Lena estaba tan ebria y sumida en sus pensamientos que no la había escuchado, o quizá no quería escucharla.

Kara:- Lena -Intentó llamar la atención de la de cabellera negra mientras llegaba a su lado.

Vio como en la mano pálida se balanceaba una copa casi vacía de vino mientras la mujer ebria tenia la mirada perdida en su ventanal.

Lena:- Es increíble ¿No crees? -Susurro sin mirar a la rubia que la miró confusa- Como un antifaz te puede engañar tan fácilmente. Siempre viendo películas donde el hombre no reconocía a la protagonista por el antifaz me parecía ridículo. Pero mira -Se señaló a si misma con una sonrisa vaga y amarga-, a mi me engañaron unas gafas, patético.

La empresaria se reía con amargura mientras que la rubia se mordió el labio, era cuestión de tiempo que Lena lo sepa por si misma, se maldecía por no haberle dicho antes. Pero solo desvió la mirada e inhalo profundo para decir lo siguiente. Más mentiras.

Kara:- Lena, estás ebria, cualquier cosa que- -La heroína fue interrumpida.

Lena:- No mientas, Kara ¿No te cansas de mentir? O al menos ¿No te da vergüenza mentirme en la cara? -Espetó para mirar con desdén a la rubia pero más que odio su mirada expresaba dolor.

Kara:- Lena, no sé de que estás hablando. Deberías dejar que te ayude.

Se acercó a su amiga pero esta de inmediato le rompió la botella de vino en la cabeza.
Tranquilamente Lena habría pensado esta muy bien antes de atacarla o seguir sus instintos pero estaba tan cansada y dolida pues su mejor amiga le estaba mintiendo, otra vez y en la cara. No lo soporto y lo hizo. Después de todo la rubia tenía dos ventajas, lo pudo haber esquivado o no hubiera hecho daño ya que es la mujer de acero. Solo kriptonita era lo que la pondría de rodillas y Lena deseaba tener tanto el arma como las ganas de matarla. Para su mala suerte sus sentimientos le impedirían hacerle algún daño a la portadora de esos ojos azules que la traían perdida.

Kara solo se mantuvo en su lugar mirado el suelo, viendo esas pocas gotas de vino caer desde su cuerpo al suelo. Sabía que Lena estaba furiosa, sabía que ya no podría negarlo, sabía que debía hacer lo imposible para recuperar a su amiga.

Kara:- Len... yo- -Volvió a ser interrumpida.

Lena:- Cállate, Kara... solo cállate. -Ordenó con los ojos cerrados mientras sollozaba, aunque intentaba no hacerlo no podía detenerse ya.