Mi jefe, ¿Mi marido? (EN EDICIÓN)

CAPÍTULO 3

Una vez que estamos en el restaurante/cafetería, Iván me corre la silla para que me siente, todo un caballero y luego se sienta él.

- Buenas tardes, ¿En qué puedo ayudarlos? -Dice el mesero mirándome e ignorando completamente a mi acompañante, y como conozco tan bien al hombre que está sentado al frente mío, sé que va a decir algo...

- ¿SI, nos podrías traer un café doble y unos cañoncitos de dulce de leche, a mi NOVIA y a mí? - dicho eso el camarero se va un poco desorientado (no sé por qué), no sin antes asentir levemente.

- ¿Qué fue eso que acabo de escuchar? - digo con el ceño fruncido, pero de manera divertida hasta que suelto una leve carcajada.

-NADA... Simplemente no me gustó en la forma en que te miró, nada más... Pero bueno, ¡cuéntame nena! ¿Qué onda, como te trata el arrugado de tu jefe? - En el momento en el que dice eso, no podemos evitar soltar una gran carcajada la cual provocó que la gente que estaba sentada en la parte de atrás, se diera vuelta y se nos quedara viendo de forma extraña y otras con diversión.

- Jajaja, no es "viejo y arrugado" ...para nada - digo tratando de imitar su voz, cosa que ni cerca estuvo de eso- Por suerte... está bastante bueno- digo pensando en él, pero de inmediato elimino eso pensamientos que me llevan hacia mi jefe.

- Entonces no es un viejo arrugado como pensamos que sería- dice riendo- Cuenta todo ya nena!.

- Pero, no sé qué quieres que te cuenta, no ha pasado nada fuera de lugar.

-¡¿COMO QUE TODAVÍA NO?!, teniendo a semejante hombre como jefe... nena si yo estuviera en tu lugar ya estaríamos casados, por así decirlo- Ambos empezamos a reír provocando que algunas personas volteen a mirarnos... Otra vez.

-OH POR DIOS!, cállate y deja de decir tonterías ¿Quieres?- volteo los ojos.

- Como quieras ¡ABURRIDA! - Dice haciendo una mueca infantil que me parece demasiado graciosa.

Estaba a punto de hablar, pero en ese momento viene el camarero con nuestro pedido, deja los cafés y cañoncitos de dulce de leche en la mesa y luego regresa por donde había venido.

La charla fue de lo más divertida, no nos quedábamos sin tema de conversación, nos logramos poner al día, y la verdad que pasaron MUCHAS...DEMASIADAS cosas en solamente 3 meses

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La verdad que me ha gustado esta "cita" con Ivan, la he pasado excelente y espero volver a repetirlo.

Luego de que Ivan me dejara en mi casa-departamento me fui hasta el baño para darme un baño relajante, me tenso (no sé por qué) en tan solo de pensar que mi jefe me haya invitado a cenar... Seguramente que será para hablar de trabajo, eso espero...
Cuando me doy cuenta la tina ya está llena, me despojo de mi ropa y me meto en la tina, me fijo en mi celular y son las 18:00 pm, ¡genial! Todavía tengo bastante tiempo para que sean las 20:00 que es a la hora que me pasa a buscar Michael. Luego de aproximadamente  treinta minutos salgo de esa relajante ducha y voy hasta mi pieza, que por suerte tengo que cruzar la puerta-ya que el baño se encuentra al lado de mi habitación-  voy hasta el ropero y saco ropa interior, me la coloco y luego cojo el vestido que está arriba de mi cama. Era negro con un escote, cinco dedos arriba de las rodillas, tenía un cinturón dorado. Me pongo mis zapatos de taco aguja beige.

Luego de ya estar completamente vestida me voy y me maquillo, nada exagerado, labial con brillo, rubor y rímel. Con mi pelo decido dejarlo suelto, ya que solamente con secarlo me lo deja liso.

Cuando veo el reloj me doy cuenta que quedan pocos minutos para que Michael pase por mí, los nervios, a medida que los minutos pasan mis nervios van aumentando, nunca me he sentido tan nerviosa, en eso un golpe en la puerta principal me saca de mis pensamiento, voy hasta ella y por un agujero logro ver que es él y abro la puerta.

-Hola Nicole, wow te vez hermosa- dice mirándome de arriba abajo y entregándome unas rosas rojas realmente bonitas y saludándome con un tierno beso en la mejilla

-Hola Michael, tu tampoco te vez mal, y gracias por las rosas, no hacía falta- digo sonrojada- ven, pasa, voy a dejar esto en la cocina

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-Buenas noches señor Black, por aquí

Una vez que estamos en la mesa Michael, como todo un caballero me corre la silla para que me siente y luego se sienta el, el mesero nos deja una carta para que pidamos que vamos a comer y que cuando ya lo tengamos planeado que lo llamemos... Una vez que el mesero nos trae la comida comenzamos a hablar de temas tribales...me la he pasado genial

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Ahora nos encontramos caminando por un parque hablando, hasta que llega un tema bastante peculiar...

-Nicole, este 3 semanas trabajando contigo me han fascinado y como te conté ayer tuve una charla con mi padre...y... me ha pedido...bah más que pedido me ha obligado, por así decirlo, a casarme

-No crees que ya tienes edad para tomar tus propias decisiones?

-Si...pero si no lo hago me va a sacar mi cargo de poder, a pesar de que soy el mayor

-okey... y con quien sería eso? ¿o hay que encontrarla?

-No, Nicole, me parece que no entiendes...esta chica ya está elegida... y ...es... eres tu Nicole

-Espera-digo atónita por lo que acaba de decir- como que yo?... apenas nos conocemos y no, debe haber un error

-Mira Nicole, esto es así... por lo que me he dado cuenta estas últimas 3 semanas pasaron cosas "psicológicas" si es que se puede decir así... y la verdad que a mí no me gustaría no intentarlo con tal de quedarme con mi puesto ...eres una mujer atractiva, de buen carácter y eso... también sé que tienes una amiga, y que ella tiene un hijo, que por lo tanto no puede perder el trabajo, y que vos la ayudas a pagarle los medicamentos al hijo. Mi punto es que, si tu no aceptas este trato tu amiga y tú pueden perder el trabajo, por lo tanto, hay cuatro personas en riesgo, vos, tu amiga y su hijo y yo...está en ti aceptar

-con casi lágrimas en los ojos respondo- ¿Cómo te atreves a decirme aquello? ¡Eres capaz de hacer esto! ¡¿Solamente por tu puesto?!...ahora veo por qué tanta amabilidad... al fin y al cabo eres como cualquier hombre...pero- mi voz ya era entre cortada- Está bien... solo lo hago por mi pequeño Jack y mi amiga... el lunes en el trabajo hablamos bien del tema. ahora llévame a casa- dicho esto fuimos hasta el auto en silencio, cosa que agradezco.

En el auto, como estábamos antes, en completo silencio, no dirigimos hasta mi apartamento, con solamente un ruido, el motor

No puedo creer todo esto...no puedo creer de la clase de persona de la que me ha empezado a enamorar...soy una completa imbécil... intento borrar esos pensamientos ya que me doy cuenta de que hemos llegado a mi apartamento, sin esperar a que abra la puerta me adelanto y lo hago yo. Ni un "chau" ni un saludo me dirijo hasta la puesta del apartamento, sin mirar atrás ni nada abro la puerta de este y adentrarme rápidamente ya que no me quiero arrepentir.

Una vez en mi apartamento, voy hasta el baño para darme una relajante ducha, es lo único que necesito ahora. Me despojo de mi ropa y me meto en la tina con el cabello recogido en una cola de caballo. He estado alrededor de una hora en la tina, decido salir ya que si sigo metida aquí adentro me voy a arrugar como una pasa. Me coloco una toalla alrededor de mi cuerpo y voy a la habitación, me seco, me coloco mi ropa interior y mi piyama, que consiste en una remara larga de Jake el perro, me desenredo el pelo y me saco el maquillaje. Luego voy hasta mi cama y me acuesto, no pongo alarma, ya que mañana es domingo y no trabajo.

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HOLA MIS QUERIDAS Y SENSUALES LECTORAS!

Bueno, lo he pensado, y si, decidí volver a seguir con "Mi jefe,¿Mi Marido?".

Se que algunas me querrán matar...pero AQUÍ ESTOY NO ME MATEN!...

Nos vemos en el capitulo que viene.

Las adoro mis sensuales lectoras!