Black And White | Niall Horan One Shot |

4.

En los últimos días Niall y yo nos habíamos vuelto muy unidos. Todavía no entendía bien que tipo de relación teníamos, pero me gustaba, era cálido y es lo que siempre he conocido. Me encontraba en la casa de Niall, la cuál antes solía ser nuestra casa. Estábamos en el sofá simplemente hablando y escuchando Fine Line de fondo, Watermelon Sugar se escuchaba en estos momentos.

— ¿Sabías que James me ha invitado para una semana de Niall? Estaré toda la semana con él — dijo y se veía realmente emocionado.

— Eso es increíble, ya puedo imaginar las cosas que saldrán al aire.

— No tienes una idea — dijo y yo reí. Él toma mi mano y empieza a dejar pequeñas caricias en esta. — Me gustaría que fueras al final de la semana, ya sabes, será mi último día allá y estaré tocando y eso.

— Claro que iré — dije acercandome para depositar un beso en su mejilla. Él sonrió de lado.

Cherry se escuchaba en estos momentos mientras Niall y yo seguíamos hablando de lo primero que nos llegara a la mente. Eran alrededor de las 1:00 PM y solo teníamos en el estómago el pequeño desayuno que preparé en la mañana. Solo unas tortillas de huevo, con unas cuantas salchichas, café, jugo, un poco de puré de papas y unos croissants que Niall tenía en la cocina. Nada muy elaborado. Maura vendría de visita con Greg y Theo, y nos explicó que quería vernos a los dos, sin importar como estuvieran las cosas entre nosotros. Así que simplemente estábamos pasando el rato, mientras llegaba la hora de ir a buscarlos al aeropuerto.

En ese momento el teléfono de Niall empieza a sonar y él lo saca de su bolsillo para llevarlo a su oreja y hablar.

— Liam ¿Qué pasa? — hizo una pausa para escucharlo. — Si, claro, allá estaremos. — lo miré.

— ¿Liam? — pregunté un poco extraña.

— Sí, me dice que está en Los Angeles y que quiere vernos.

— ¿A mí también? — me sentí un poco emocionada, tenía años sin ver a Liam.

— Claro que a ti también, sabes que Liam te adora — sonreí.

— Bueno y ¿A dónde vamos o qué?.

— A su casa, me acaba de enviar la locación — Asentí.

— Perfecto, iré a mi departamento a cambiarme — ya que había dormido aquí y mi ropa no era la más presentable. Tomé mi teléfono para pedir un uber, pero Niall lo tomó en sus manos y lo bloqueó.

— Puedes tomar una ducha y cambiarte aquí, creo que todavía hay ropa tuya en el armario — y tenía razón, cuando recogí todas mis cosas, luego de la ruptura, traje muy pocas maletas y algunas de mis prendas se tuvieron que quedar aquí y nunca vine por ellas. ¿Por qué no había pensado en eso?.

— Eso es muy inteligente, Niall. Iré a bañarme — dije con el propósito de levantarme del sofá, pero él tomó mi mano haciendo que caiga de nuevo sentada.

Me dió un beso que no duró más de cinco segundos, pero que duró lo suficiente para hacer que me sonrojara.

— Ya te puedes ir — me dedicó una linda sonrisa y yo negué con la cabeza riendo.

Me levanté del sofá y me dirigí al baño, pude ver como Niall todavía conservaba algunos de los cosméticos que compre para él, también el secador rosado que había comprado hace años para mí. Entré a la ducha y lave mi cabello, ya que tenía cinco días que no lo hacía, así que ya pueden imaginarse como estaba. Luego de salir, tomé el secador y eche un poco de aire por mi cabeza.

Al salir del baño, caminé a lo que anteriormente era mi closet y me sorprendí, en realidad dejé demasiada ropa en esta casa. Ya entiendo por qué nunca encuentro lo que quiero ponerme, si todo está aquí. Finalmente decidí ponerme una falda beige, con un top color claro. Tomé mi abrigo porque el pronóstico de hoy podía prometer un poco de viento y, si era así, quería estar preparada.