Capitulo 12

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Al día siguiente me dolía la cabeza y no estaba en mi casa, me había despertado en un lugar extraño. Era una habitación muy grande, estaba en una cama de matrimonio con las colchas blancas, había una tele muy grande y un armario que ocupaba casi toda la pared, las paredes estaban pintadas de azul y era muy acogedora. De repente se abre la puerta y veo a Abraham entrando con una bandeja con el desayuno.

AM: Buenos días preciosa- me besa la mejilla

Yo: Buenos días- le sonreí 

AM: Ayer te quedaste dormida en mi hombro y no te iba a despertar y a tus padres tampoco asique decidí traerte a mi casa.

Yo: Muchas gracias pero no hacía falta, me podrías haber despertado.

AM: Con lo mona que estabas dormida

Yo: ¿Me estás diciendo mono disimuladamente? - Me hacía la cabreada

AM: Em..no....y-yo...

Yo: Te e entendido jajaja estaba bromeando- Me pega con un cojín- Con que esas tenemos..

Empezamos a pelear con los cojines, realmente me lo estaba pasando muy bien... De repente Abraham me da muy fuerte y caigo a la cama rendida y el se tumba a mi lado.

AM: a sido divertido jeje

Yo: Ya ves, la próxima vez te doy una paliza, pero ahora estoy agotada jeje

AM: Dúchate si quieres..

Yo: Gracias pero no tengo ropa y no quiero molestar...

AM: Tranquila que yo te presto ropa, para estar aquí no hace falta que vallas con vestido 

Yo: Bueno vale, muchas gracias- le sonrío

AM: Te espero abajo coge lo que quieras del armario 

Yo: Muchas gracias

Cuando se va abro la puerta del armario y decido ponerme una camiseta negra y blanca que me llega por las rodillas, me meto a la ducha y al salir me la pongo. Guau que grande que es..

Bajo y me encuentro a Abraham en el sofá viendo la tele.

Yo: Ya estoy..

AM: Guau que bien te quedan mis camisetas, vas a tener que venir más veces ejje

Yo: Anda tonto, a ti te quedan mejor jeje

De repente se abre la puerta y entran sus padres y su hermano, yo me empiezo a sonrojar cuando me ven así.

Susana: Buenos días, hijo veo que hay una invitada

AM: Si mamá.

Nos presentamos y todos me dan dos besos.

Susana: Bueno Katia ya te quedas a comer ¿no?

Yo: No señora, no quiero molestar, me visto y me voy.

AM: No, tu no molestas, así que te quedas a comer y si hace falta también a cenar

Todos nos empezamos a reír y comenzamos a comer. La comida transcurrió tranquila y cuando terminamos nos fuimos a la habitación de Abraham de nuevo...

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