Capitulo 3

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-¿Estos eran tus favoritos en Hogwarts? -Pregunto Astoria sacando una rana de chocolate de la gran bolsa de dulces y pasándoselo al rubio.

-Si, ademas de las grageas -Dijo Malfoy aceptando la rana.

-Yo las odio, Parkinson me hizo la vida imposible con esas malditos dulces -Respondió Astoria recordando a Pansy.

-Lo se, ¿Por que crees que dejo de hacerlo? Ella podría haberte molestado con eso hasta día de hoy sin cansarse - Dijo Draco buscando otro dulce en la bolsa que agarraba Astoria.

- ¿Fuiste tu? -Dijo la chica curiosa, Malfoy no le dijo nada solo sonrió un segundo, lo suficiente como para que Astoria lo entendiera- Gracias, Malfoy.

- Bueno, ¿Cual es el plan de hoy Greengrass? -Pregunto Draco esquivando el comentario.

-Ir  a Hogwarts -le respondió ella, Draco no se había dado cuenta que estaban muy cerca del castillo. 

Draco la miro un segundo y luego se rió burlonamente. Al ver que la muchacha no se reía se puso serio y contesto fríamente.

-No pienso volver a entrar jamas a ese colegio.

-No vamos a entrar, ven. 

Mientras mas se iban acercando al colegio, Astoria noto como Draco se ponía mas tenso, tenia los puños cerrados y discretamente buscaba su varita.

Draco paro de seguirla en mitad de camino.

- Hasta aquí llego -Dijo Malfoy, seco.

-Entonces, aquí nos quedaremos -Dijo Tory sonriente mientras sacaba una manta de su cartera y la tumbaba en el prolijo césped, ella se sentó en la manta mientras Draco la miraba fijo - ¿Me harías el favor de sentarte a mi lado, Malfoy? No trates de leer mi mente.

Después de un par de insistencias por parte de Greengrass, el chico cedió a regañadientes. Ambos se quedaron contemplando el castillo y comiendo dulces. Y por alguna razón, Draco no quería irse.

Si, aun seguía sintiendo rechazo hacia Hogwarts por la culpa que sentía cada vez que recordaba todo lo que le había hecho a ese colegio. Sin embargo, esta situación de contemplar desde lejos comiendo dulces se le hacia muy agradable, aunque pensaba que para su padre esta situación seria la cosa mas absurda, lo ignoro por completo y busco un dulce en la bolsa.

No se había dado cuenta que Astoria también buscaba un dulce, sus manos chocaron suavemente y los obligo a mirarse. Draco aparto la mano y la vista rápidamente. Astoria también aparto la mirada, pero sonriendo.

-Esta es la mejor parte -Dijo la chica apuntando el atardecer.

-Lo mejor son las estrellas Greengrass -Respondió Draco acostándose con los brazos flexionados detrás de su cabeza y cerrando los ojos.

-Dudoso, Malfoy. La única forma de probarlo es quedándonos para verlas, ¿No crees? -Dijo Astoria jugando con un dulce entre sus manos.

Draco abrió uno de sus ojos, el terreno no parecía peligroso, nadie los molestaría ni sabría que estuvieron aquí.

-Quedémonos. -Draco cerro los ojos otra vez, su intención no era dormirse, pero estaba tan relajado que así fue.

Al cabo de una hora, el cielo estaba estrellado y el despertó por unos ruidos, le costo abrir los ojos, había dormido bien y sin pesadillas, debía contárselo a Tory. Pero cuando se levanto y abrió sus ojos no la vio. Astoria no estaba a su lado en la manta, solo la bolsa de dulces. 

Draco, preocupado, se levanto rápido y agarro su varita. Grito el nombre de la chica reiteradas veces. Al no recibir respuestas, maldijo todo lo que se le vino a la cabeza y pateo la bolsa de dulces. 

- ¡Por fin te despiertas, Draco! ¿Por que gritas?-Grito Astoria feliz caminando a lo lejos detrás de el. Draco se dio vuelta al instante y le apunto con su varita- ¡Temía que no llegaras a ver conmigo las estrellas! ¡Baja la varita!

-¡Astoria Greengrass, dime por Merlín ¿Donde demonios estabas?! -Le grito Draco furioso guardando su varita y acercándose a ella. Al acercarse distinguió que la joven tenia un gato entre sus brazos.

- Escuche ruidos y fui a ver que ocurría y encontré este hermoso gatito -Dijo Astoria feliz mirando al animalito. Draco llevo una mano a su cabeza.

-¡Maldición! ¿Por que no me despertaste? ¡Te podría haber pasado cualquier cosa! -Draco seguía enojado y al terminar de decir esas palabras se dio vuelta hasta la manta. Astoria corrió hacia el.

-Draco, eran menos de 30 metros, puedo cuidarme sola y cuidarte a ti. -Dijo Astoria tocándole el hombro, el rubio se sorprendió por el tacto y se dio vuelta- Me quede a tu lado para que cuando despiertes por alguna pesadilla no te sientas solo o perdido... Pero el gatito grito y quise ver que ocurría, ver si algo nos amenazaba también a nosotros. Ahí si te hubiese despertado.

A Draco el enojo se le había esfumado por completo, esa chica realmente quería ayudarlo, era realmente muy buena. Eso lo asusto un poco, pero también hizo que se interesara mas en ella y a la vez se lleno de dudas. ¿Por que era tan buena con el? ¿Era lastima lo que sentía Greengrass? ¿Lastima hacia un Malfoy? ¿Acaso quiere dinero? ¿Sera una broma de Potter? ¿Sera su imaginación? ¿Y si realmente Astoria era una amenaza? Pero.. ¿Y si realmente quería ayudarlo?

-Y por lo visto no tuviste ninguna pesadilla -Comento Astoria mientras acariciaba al pequeño gatito, sacándolo de sus dudas.

-No. pero hubiese sido una pesadilla si te pasaba algo -Dijo Draco dándole la espalda. Astoria sonrió, Malfoy se preocupaba por ella. Pero Draco agrego el comentario que arruinaba el lindo momento- Daphne me torturaría hasta la muerte...

-Bueno, deja de reprocharme y mira conmigo las estrellas -Dijo Astoria sentándose en la manta con el gatito en sus brazos. Malfoy se quedo un tiempo parado, pensando, y luego cedió.

Astoria miraba maravillada al cielo, o eso noto Draco. Se había quedado unos minutos mirándola, sus dudas seguían comiéndole la consciencia y necesitaba leerle la mente para saber que escondía esa dulce sonrisa que le regalaba cada vez que lo veía. 

Pero no encontró nada, otra vez. Aun así, quería seguir intentando.

La noche se hacia cada vez mas oscura y el frió se hacia presente, Astoria olvido su túnica y ahora estaba empezando a temblar. Malfoy noto aquello, se acerco a ella y la cubrió con el resto de su túnica. Los dos estaban tan cerca y Tory no pudo evitar posar su cabeza en el hombro del chico, imitando estar dormida.

Draco puso un gesto de asco hacia ella queriendo alejarla de el, pero la vio y realmente no estaba incomodo, en esos instantes también aprecio la belleza de la joven. Pero desvió la mirada, estaban en la completa oscuridad a vista de cualquier peligro. Debían irse.

-Astoria... -Dijo Draco moviendo levemente su hombro, pero no había respuesta-...despierta....demonios... por favor- acaricio su pelo,como hacia su madre con el cuando era un niño, y la despertó.

- ¿Que pasa, Draco? - Contesto Tory sin moverse de su hombro, abriendo solo los ojos.

-Debemos irnos, ahora.

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Heeeeey, que tal? Espero que les vaya gustando... se que puede ser muy denso, pero trato de hacer todo lo mas parecido a la realidad y a la personalidad de Draco. Asi que esto va a tomar tiempo, porque asi pienso que fue, pero todo esfuerzo vale la pena. Y este bello amor siento que representa eso.

Byee, suertee.






Drastoria: El recuerdo del amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora