Save Me (Demi Lovato) [PAUSADA]

Capítulo 9:

No llores idiota, no llores, pienso, hasta que noto que una fugaz lagrima cae por mi mejilla.

-Lind, vamos, no llores, eres mejor que eso, ellos no lo valen. –Dice Demi mientras me abraza contra su pecho, como si fuera una niña pequeña; yo me limito a llorar sin decir una palabra.

En la foto se ve a Mike y a Brianna tiernamente abrazado y besándose.

-Bueno, bueno. –Me aparta de ella y se para. -¡No puedo permitir que estés mal por ese inútil!

-Demi, ¿Qué otra cosa puedo hacer?

-Agh. –Se golpea la frente con la palma de su mano. -¡No estaré toda la vida aquí! ¡Tenemos que recorrer todo lo que podamos! –Dice mientras me ayuda a pararme. –Vamos, ve, ve. –Me empuja hacia el baño dándome en empujones en el trasero. –Date una ducha o algo, te prestaré algo de mi ropa.

-Mh, Demi, yo no….

-¿Tú no qué? –Me cierra la puerta- ¡Cuando estés lista comemos y luego nos vamos!                                                  

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Y así pasó el mejor día de mi vida, luego de ducharme, me cambié, comimos y salimos a caminar, recorrimos los lugares más bonitos que conozco. ¿Mike y Brianna? Aunque aún duelan, debo concentrarme en lo bueno, soy amiga de mi ídolo, de quien siempre admiré. ¿Por qué concentrarme en lo malo si hay tantas cosas buenas?

-Eh, marmota, ¡Arriba! –Grita Demi mientras me da empujones con su rodilla.

-¿Qué quieres? – Me froto los ojos mientras bostezo y me estiro. -¿Qué hora es?

-Te dormiste en mi sillón ni bien llegamos, son las diez de la noche.

-¡¿Cómo no me despertaste?! ¡Demi, es tardísimo!

-¿Tienes que irte? –Hace puchero con la boca y se me acerca. - ¿No te quieres quedar?

-Sí.-Respondo, a mí familia no le importa donde yo esté.

-Pensé que sería más difícil. –Hace una mueca y luego continua- ¿Comemos algo?

-Mh, lo siento, no tengo hambre.

-Está bien, yo sí, comeré aquí en el sofá contigo.

Luego de que Demi comió, decidimos ver una serie, la cual, es muy interesante.

-Uhm, me dormí, lo siento. –Dice Demz, quien en mitad del primer capítulo quedó dormida sobre mi hombro.

-Me la debías. ¿Quieres ir a tu cama?

-Eso creo. –Se levanta y me tiende la mano. ¿Vamos?

-Demi, dormiré aquí, no quiero incomodarte.

-¡Te dolerá el cuello en la mañana! ¡Duermes conmigo!

-Demz, no.

-¡No se habla más, duermes en mi cama! –Me toma de la mano y me arrastra hacia su habitación.

-Creo que este te irá. –Dice lanzándome un pijama color rosa. –Sí quieres ve a cambiarte en el baño, aunque si no te molesta. –Comienza a sacarse la remera, hasta quedar en sostén y luego rápidamente se pone otra remera encima, yo la miro embobada.- ¿Interesante vista? –Ríe y yo siento mis mejillas arder.

-Eh, perdón, me voy a cambiar. -¡¿Cómo puede ser que me quedé viéndola fijamente mientras se cambiaba?!

Una vez que termino de ponerme la ropa para dormir, vuelvo a la habitación. Demi ya se encuentra en la cama, leyendo un libro.

-Ho-hola, me quedó bien. –Digo señalando mi ropa.

-¡Te queda perfecto! –Exclama y luego cierra el libro y lo pone en la mesa de noche. -¡Ven, ven! –Palmea la cama invitándome a acostarme, cosa que hago lentamente y con timidez. –Lo siento, pero tengo muchísimo sueño.-Bosteza mientras apaga la luz y se recuesta contra mí apoyando su cabeza contra mi pecho.

-También yo, hasta mañana Demz- Beso su frente.

-Hasta mañana, Lind. Espero que no te moleste que duerma así, necesito abrazar a algo.

Me encanta.

-Claro que no me molesta. –Se acurruca más contra mí.

-¿Lind?

-¿Qué pasa?

-Me alegró mucho conocerte, te-te quiero.

-A mí también Demi, te quiero mucho más.