Bad Alpha || YOONMIN

✦【 Capítulo 22 】✦

Presente.

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Jennie alzó la navaja teniendo aún su mano tensa en el mango de esta. Sus ojos se encontraban llenos de ira y celos mientras su labio interior temblaba por lo mismo.

--- Je-Jennie, s-sé que no quieres hacerlo... ---Murmuró Ji Min, temblando cual gelatina.

--- Si no lo hago, Yoon Gi volverá a ti... Y él no puede... No, no puede... Él es mío por contrato.

El rostro de Ji Min se frunció en curiosidad y desconcierto, no entendía nada. ¿Contrato?, ¿Qué contrato?

Un grito ahogado de dolor salió de sus labios, mientras que por arte de reflejo se apoyaba en el mueble que estaba a unos pocos centímetros lejos de él.

Miró hacia abajo, viendo así a la navaja que se encontraba enterrada profundamente en su estómago. Su vista comenzó a fallar y de momento a otro se sentía mareado debido al dolor y por la pérdida de sangre.

--- Lo siento, Park, pero si no te mato ahora, YoonGi en cualquier momento rompería el contrato que tiene con mi padre y, sinceramente, no quiero perderlo, al menos no por ahora.

Ji Min dio un gemido a dolorido mientras caía al suelo, sintiendo su cuerpo entumecido. Juraba que no podía sentir nada.

Nada...

--- ¿Co-Contrato? ---Murmuró a duras penas, para luego comenzar a toser con fuerza, escupiendo en el proceso algo de sangre.

--- Yoonnie no se debe enterar, así que este será nuestro secretito hasta la tumba, ya que, por como veo no te llevará más de 20 minutos pasar al otro mundo... Mmmh, veamos ---Dijo mientras sonreía de manera ladeada y se agachaba, quedando al lado del otro Omega---. Yoon Gi no se debe enterar de que el contrato que tiene con mi padre es falso y de que los cachorros no son suyos ---La manera divertida que contenía la voz de Jennie lo hacia sentir ganas de vomitar. Vio como ella apoyaba "sin querer" su mano derecha en la punta de la navaja haciendo que esta hiciera fricción hacia abajo. Dio otra mueca de dolor---. Con él a mi lado, mi padre nos compraría una linda casita de dos pisos con una vista espectacular frente al mar y, ¿Adivina qué? Una vida del cual no se encuentre Park Ji Min ella porque jode todo con tan solo su maldita existencia. Me arruinas todos los planes que quiero hacer con Yoonnie, Park. Pero ahora ya no molestarás más, tenlo por seguro... Me encargaré de ello.

Ji Min le gruñó sin fuerza alguna. Escuchó una tercera voz lejana entrar a la habitación, pero ya era tarde; Ji Min había caído en la inconsciencia.

Aún no quiero irme de este mundo, Yoonnie... Ayudame, por favor... Te lo suplico.