Después de nuestro encuentro en el cuartel no dirigimos al mismo punto al que habíamos ido ayer, a la Casa Blanca. Cuando entramos todo seguía lleno de polvo, con algunos restos de sangre por peleas pasadas con otros grupos y seguía ese olor peculiar e indescriptible. Dado que todo seguía en su lugar tal y como lo habíamos dejado, quería decir que nadie había entrado. Comenzamos a rebuscar en cada cajón y rincón del edificio. Tomamos todo lo que tenía información que podría servirnos de ayuda.
Yo me puse a rebuscar en la sala principal donde el presidente realizaba sus labores y encontré algo encima del escritorio, el cual no estaba el día de ayer. Era un portafolio lleno de papeles pero la situación era muy extraño, un portafolio que tenía aspecto de tener documentos secretos no estaría a simple vista, entonces examine la sala detenidamente y vi que algo se había movido rápidamente entonces agarre el arma que tenía en mi chaleco. Me acerqué sigilosamente al lugar donde había visto el movimiento y una chica de unos veintitrés años, de contextura delgada, más baja que yo y con aspecto desagradable como si hubiese salido del alcantarillado o perseguida por alguien y dado mas de 20 vueltas sobre lodo.
– UN MOMENTO, no me dispares – dijo la chica
No baje el arma la mantuve en alto.
– Creo que estás aquí por la misma razón que yo, saber quién, qué y por qué causó el ataque – dijo
– Primero dime quién eres y de dónde vienes – le exigí
– Me llamo Mae y soy de Missouri –dijo
– Entiendo. Pero ¿por qué desde tan lejos?– pregunte inquisitivamente
– Pues fue muy extraño en realidad, a la mañana siguiente del ataque revise la casa y encontré una nota de mi papá diciendo que venga a la Casa Blanca y que aquí encontraría las respuestas. Entonces en ese momento cogí todo lo necesario y vine aquí como pude – me respondió
Me puse pensativo al respecto, como es posible que un señor sepa donde pueda esta la solución. Sera posible que el haya sabido acerca del ataque, qué mierda es esta? Hice una nota mental para interrogarla después.
– Tendremos que hablar con mis aliados para ver que hacer contigo– le dije
Pero antes de irnos fui a por el portafolio y trate de abrirlo pero no podía, le pegue un disparo pero aún así no se abrió.
– Yo creo que eso me pertenece – dijo Mae
– No lo creo, que tu padre te haya dicho que vengas acá no te hace dueña de los objetos que están aquí y tu no tenias conocimiento de lo que ibas a encontrar o si?–dije con firmeza
Ella me miró dudosa – q– q– que no sepa no quiere decir que no sea mío, yo ya estaba aquí antes de que ustedes llegaran y cuando entraste note por tu expresión que ese portafolio no lo viste ahí – me dijo y me lanzó una mirada desafiante – así que básicamente me pertenece.
Con un movimiento rápido tome el portafolio – No se en que tiempos crees que estamos pero las cosas ya no se resuelven pasivamente, acabo de tomar el portafolio y ahora es mío, así que si lo quieres tienes que pelear por el – dije desafiante
– BIEN, quédatelo – me dijo
En el momento en que terminó de dar su respuesta se escucho un disparo en la planta baja donde estaban los demás. Bajé corriendo y cuando llegue abajo vi a todos con caras de terror.
– CARAJO QUINCY, ya deja de ser tan miedoso – dijo Nick
– ERA UNA MALDITA RATA – dijo Quincy
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Roug
Science FictionTodo cambió desde aquella noche. Muchas personas murieron por ese ataque. Solo 1% sobrevivió, soy parte de ese porcentaje.