CHICA AGRIDULCE (KTH) 2

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Ambos dormían, era temprano por lo que era obvio que seguían dormidos, me había levantado hace unos minutos pues mi teléfono comenzó a sonar pero fue demasiado tarde por lo que no pude contestar.

Sonó por segunda ves por lo que rápidamente tome el teléfono, mire el nombre y a los segundos me quede helada.

Desconocido...

Los nervios invadieron todo mi ser por lo cual rápidamente me puse unos tenis y salí a el balcón para contestar.

- ¿Ho...Hola?. -Lo único que se oía era una respiración,- ¿Quien habla?.

-...-sin repuesta.-

- ¿Hola?, ¿Hay alguien?, Colgare si no responde. -Cuando iba a colgar una voz de oyó.-

- El... -La voz estaba distorsionada por lo cual era imposible reconocerla.-

- Disculpa ¿Quien eres y porque estás llamando tan temprano?.

- Protégelo, no dejes que él lo toque.

- ¿De que hablas?, dime tu nombre.

- Solo no dejes que lo toque, no tengo mucho tiempo así que has todo lo que te diga.

- ¿A quien no tengo que dejar que toque?. -Estaba confundida.-

- Tae-o...

Mi mirada estaba en un punto fijo, mi ojos se pusieron cristalinos, era una sensación tan horrible, quería moverme pero no podía pues el miedo me lo impedía.

¿Te...Teo?

Me arrebataron el teléfono sacándome de mi pequeño transe, Taehyung ahora se encontraba hablando.

- ¿Quien eres y porque estás llamando?. -Su voz ronca y rasposa de recién levantado sonaba imponente y era claro que estaba enojado.-

Lo miraba con atención, su semblante serio y con el ceño ligeramente fruncido, su cabello color negro estaba despeinado y con algunas ondas que caían por su frente cubriendo parte de sus gruesas cejas, las venas de sus manos y brazos se marcaban por la presión que ejercía en el teléfono, sus pies descalzos pisaban el frío suelo del balcón mientras que caminaba de un lado para otro mientras que su pecho marcado y espalda se encontraba desnudó a la vista de cualquiera, algunas pequeñas cicatrices esparcidas por todo su torso mientras que se podían apreciar unos cuantos pequeños bellos que crecían por su barbilla, zona del bigote y mandíbula. Demasiado sexi a mi parecer, como si fuera sacado de una película.

Mientras hacia todo eso él analizaba y miraba a todos lados de la casa.

- Solo quiere hablar contigo. -Me acercó el teléfono para que lo tomara y hablara a lo que negué.- Lo pondré en alta voz y contestarás y hablaras.

Hizo lo que dijo y acercó el micrófono a mi boca.

- ¿Hola?

- ...

- ¿Que quieres?, ¿Que tiene que ver mi hijo en esto?, ¿Como sabes su nombre?.

- Como ya dije, tengo muy poco tiempo y tienes que hacer todo lo que estoy apunto de decirte.

- B-Bien.