Hey! Chico, ¿Jugamos?

Cap 21

- Escucha Erik, sabes muy bien que me gustas, no sé porque estás actuando de esta manera y si es solo para molestar me, no hace falta, entendería perfectamente que no me correspondieras así que no tienes que hacer esto —dijo está vez en un tono algo firme pero con una miraba que anhelaba lo contrario

—Suspiré - Te dije que ganaste Scay, no me molestaría en haber buscando quién eras si no me interesaras, no mentiré, al principio me pareciste algo rara con eso de tus juegos y luego con eso de que sanarías mi corazón, pero me pareció curioso así que decidí aceptar, no pensé que el juego trataría de que me enamorarás pero luego con un poco de ayuda lo entendí y me di cuenta que efectivamente me llegaste a gustar; escucha bien porque sabes cómo soy y no lo volveré a repetir en un largo tiempo, me gustas y me enamoré de ti a través de tus palabras y lo que es más curioso es que fue por medio de una pantalla —finalice y voltee a ver la.

—Tenía una expresión indescifrable para mí, estaba esperando su respuesta la cual duro unos minutos-

- no me estás mintiendo? —pregunta en un tono bajo

- que no, azulita —respondo cansado mirando al suelo- estaba algo avergonzado por haber dicho todo eso, era la primera vez que me declaraba, por lo general eran las chicas quienes se me solían declarar y yo solo aceptaba o me negaba sin sentir nada.

—Sentí sus brazos envolverse en mi torso y su calidez me envolvió, correspondí su abrazo y sonreí leve- ¿cuando me había vuelto tan cursi? No lo sé, pero si se que fué por esta chica que tenía entre mis brazos.

-no pensé que mi juego realmente funcionaria contigo, o sea, te ves como el típico chico arrogante e inexpresivo y aveces dude si debía o no seguir con esa tontería —dijo con su rostro enterrado en mi pecho

- oye, aunque mi apariencia sea así yo también tengo sentimientos, sabes?, Y si eso fue una tontería, fue la mejor tontería en la que me pude involucrar — me sinceré

- Erik?

-um?

- por qué siempre llevas está chaqueta de cuero? — preguntó y se notaba su curiosidad a leguas ya que era la segunda vez que lo preguntaba

—Suspiré y me separé de ella para sentarme, ella me siguió y se sentó a mi lado mirándome atenta.

-veras... Jamás hablé de eso con nadie, solo quise hacer borrón y cuenta nueva, con el nuevo yo —dije sin mirarla, cosa que creo que se volvió algo típico

-si... Si no quieres contarme lo respetaré, no te preocupes —dijo tomando mi mano la cual se encontraba en mi rodilla y la apretó un poco

- quiero contarte, no sé porqué, pero quiero hacer lo — la miré y ella asintió con la cabeza para que prosiguiera - solo... Quiero que no pienses mal de mi, vale? Se que lo que hice antes no es del todo bueno y mis acciones no fueron justificadas pero lo último que quiero es que me veas como todos en aquella vida que antes tenía

- jamás te juzgaría, mis sentimientos no me lo permiten —sonrió y eso me tranquilizó

- cuendo era niño... Mis padres no eran los mejores, mi padre me golpeaba y mi madre nunca hacía nada para detenerlo porque luego mi padre la golpearía a ella si lo intentaba, el único que me defendía era mi hermano mayor, en esos tiempos tenía entre 9 y 10 años y mi hermano tenía entre 13 y 14. Mi padre no ganaba mucho en su trabajo y mi madre no trabajaba, mi hermano era el único que salía de casa y volvía con cantidades considerables de dinero, no sabía cómo él podía ganar tanto dinero con apenas su edad, un día que mi hermano salió de la casa mi padre se volvió loco, es la hora y aún no sé porqué, nos empezó a golpear a mamá y a mí y en ese momento mi hermano volvía de estar fuera y vió el arrebato de mi padre, desde allí todo se volvió más mierda, mi hermano para defender nos tomó un cuchillo de la cocina y se lo enterró a un costado del abdomen, creo que le perforo el pulmón porque cayó muerto casi de inmediato, mi madre lo miró con horror y yo la verdad sólo me sentí aliviado de que él ya no nos golpeara.

—hice una pausa para tragar en seco, recordar todo eso me ponía la piel de gallina-

-mi hermano tomó mi mano y salimos de la casa dejando a mamá dentro, recuerdo que corrimos hasta más no poder y llegamos a un lugar poco transitable por las personas, mi hermano habló con unos tipos y estos nos guiaron a la que parecía ser una casa, habían algunos tipos que parecían bastante temibles, yo solo estaba pegado a mi hermano sin decir nada, dejaron que nos quedaramos en un cuarto, nuestra vida o más bien la mía cambio drasticamente al llegar allí, mi hermano solía meterse en carreras clandestinas, allí entendí como era que ganaba tanto dinero, nuestra vida transcurrió así, mi hermano en esas carreras mientras yo vendía alguna cosa que me dieran esos tipos, cuando tuve la edad suficiente mi hermano me enseñó a conducir y pues también empecé a correr en esas carreras clandestinas, te preguntarás que pasó con nuestro padre y nuestra madre, solo sé que mi madre se culpó a ella misma de haber matado a nuestro padre por defensa propia, no la encerraron el la cárcel pero si le dieron una orden de vigilancia por si pasaba algo anormal, mi hermano le solia llevar dinero para subsistir pero no me dejaba verla, cuando tenía 18 y mi hermano 22 estábamos compitiendo en una de esas carreras, en eso era lo que se había vuelto nuestra vida, pero la de mi hermano acabo justo en esa, chocó con uno de los autos y el suyo al ir a tanta velocidad se desvió y dió vueltas destrozandose por completo, yo al ver esto detuve el auto en el que iba y baje rápido corriendo a donde había quedado el suyo, logré sacarlo antes de que el auto quedará en llamas pero ya era tarde, mi hermano... había muerto...—

la voltee a ver y tenía los ojos cristalizados, quité mi mirada de la suya y miré el suelo

—esta chaqueta es suya, siempre la utilizaba en las carreras, y yo la tome, se que me hace recordar como era antes mi vida, pero no puedo deshacerme de ella, es lo único que me queda de él, así puedo sentir que está conmigo aunque no sea así, luego de lo que sucedió y de su entierro en el cual solo fueron los tipos con los cuales andábamos en la casa y en las carreras, quise volver con mi madre, fuí a la que antes era mi casa y descubrí que mi madre ya no estaba, solo había una familia la cual no conocía, pregunté a ellos por ella y solo me dijeron que lo único que sabían de la anterior propietaria era que había muerto ya hacía casi un mes, les di las gracias y me fui de allí de inmediato, ya no tenía a nadie, estaba completamente solo, podía quedarme con aquellos tipos que se habían vuelto casi mi familia pero no quería, ya no sería lo mismo, ya no estaba mi hermano, así que tome todo el dinero que había ahorrado y el que mi hermano había guardado y me fui de allí, compré un boleto de avión a cualquier país y aquí llegué a parar, aún tenía algo de dinero así que alquile un departamento y busqué trabajo, fue bastante difícil, ya que como sabrás en ningún momento mencioné que fuí al colegio o a la universidad, pero conseguí uno y pude pagar el departamento y también un curso en el cual me daban para estudiar todos los años del colegio y poder graduarme y entrar a la universidad y así lo hice y aquí pasamos a la actualidad, luego de que me gradué de la universidad dejé el trabajo en el que estaba para buscar trabajo en lo que me había especializado, y pues eso es todo.

—La voltee a ver nuevamente y descubrí que se había puesto a llorar en silencio lo cual me dejó un poco desconcertado-

- por qué lloras?? —dije algo bajo limpiando sus lágrimas con el dorso de mi mano casi de inmediato