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¿El punto P?

Después de una semana con muchas preguntas, llegó a la conclusión de querer comprobar "El punto P" .

¿Cómo lo haría? Fácil, un vibrador.

Sabía dónde comprarlo, ya que estuvo buscando en muchas tiendas Sex Shop un buen vibrador. Él era tan curioso que estaba cegado, y solo quería descubrir eso.

Tenía que comprar un buen vibrador, ya que no podía lastimarse, no en su primera vez.

Ahora era sábado, ya había pedido el juguete sexual, lo esperaba con ansias, como si se tratara de un juguete, aunque bueno, era un juguete. Veía la tele desesperado, estaba sentado con sus brasitos cruzados. Parpadiaba continuamente, y mordía su labio.

"Diong Diong"

Era el momento, por fin había llegado, corrió con mucha felicidad hacia la puerta.

Al abrirla estaba un joven azabache con una leve sonrisa cargando un paquete pequeño, con letras al frente que decían "Sex Shop, inigualable" .

— ¿Para JungKook? —sonríe.

— Oh sí, soy yo. ¿Y tú eres?...

Ríe. — Soy Cha Eun Wo. Un gusto. Su pedido —le entrega la caja.

— Muchas gracias. Bonito día —sonríe.

_ Igualmente. Y aquí está la tarjeta por si gusta hacer otro pedido, gracias por consultar con nosotros —le entrega la tarjeta.

— ¿Ahí viene tu número?

— ¿Disculpe?

— Oh, ammm, jaja, que diga, gracias —hace reverencia apenado.

— Y sí, al final viene —le guiña un ojo.

JungKook cerró la puerta lo más rápido que posible, recargo su cabeza en ella y empezó a moverla.

— ¡Gay panic! ¿Qué hiciste Jeon?

*******

Estaba sentado en su cama, mirando fijamente al frente, con sus piernas abiertas y la caja entre ellas.

— Vamos Kook, tu puedes.

Se alentaba a sí mismo para hacerlo, suspiraba y hacia berrinche por haber gastado en eso. Pero ha está aquí, y no podía devolverlo el mismo día que fue entregado.

Lo abrió con un cúter, lento para no cortarse.

Dentro del paquete había un paquete más pequeño, con un decorado de colores pasteles candentes. Al abrirlo había un vibrador color morado pastel.

— ¿Qué mierda  es esto? —lo tomó con su mano derecha y observó extrañado.

Aventó a algún lugar del cuarto la caja. Y seguía mirando el juguete. Se percató que al caer la caja se había olvídado de algo.

Un lubricante.

— Bien, supongo que con el lubricante no dolerá.

Quitó su pantalón con cuidado, estaba buscando videos para exitarce. Se le vino a la mente una grave voz que le decía "Kook" ¿Kook?

Repetía la palabra en su mente y ya había encontrado un vídeo perfecto.

La erección entre sus pantalones era evidente, masajeó sobre la zona mirando el vídeo, después dejó al aire su erecto miembro. Comenzaba masturbarse rápido, pasaba su mano por todo su pene y jugaba con la punta.

Miró a su lado encontrándose con el lubricante de agua. Era azul y un poco espeso.

Tomó una gran cantidad y lo pasó al frente de su entrada, su cuerpo se estremeció ante el tacto. Lo siguió haciendo y metió lentamente un dedo.

Dolía, pero era soportable.

Al no quedar satisfecho metió el segundo, ya con un ardor en su recto, los sacaba lento, y aún no sentía tanto placer.

Al meter el tercero dió un grito con un poco más de dolor,  con un brazo recargado en su cama. Gotas de sudor ya caían por su frente.

Metía y sacaba los dedos con ligera rapidez.

Ya no podía más y abrió el vibrador. Miró este y lo llenó de lubricante. Al meterlo en su pequeña entrada el dolor no cesaba, era constante, lo metía y sacaba, cerraba sus ojos con un poco de lágrimas.

Se sentía listo para prenderlo y así fue, se movía haciendo que sus nalgas lo hagan igual.

Ya lo empezaba a disfrutar, se movía tan bien ese aparatito, subió la intensidad, soltando sonoros gemidos, haciendo su cabeza hacia atrás.

Al llegar a la máxima potencia ahí estaba su próstata.

Mierda, era algo exquisito.

Le temblaban las piernas por el placer, se movía una y otra vez, chocaba con su próstata, y el comenzaba a tocar su miembro. De arriba a abajo, rápido al compás del juguete, podría jurar JungKook que era la gloria.

Se dejó caer a la cama mientras se masturbaba y sus caderas se movían buscando más, se quitó la playera, ha hacia demasiado calor. Su cabello largo y pardo goteaba sudor, mordía su labio, sus ojos se ponían en blanco al sentir de nuevo ese choque a su próstata.

— Ah~~ Ahhh, sí, s~si. ¡Ahhh!

Arqueó su espalda satisfaciendoce más rápido, su pecho subía y bajaba, era lo mejor.

Se había corrido ya. Pero aún seguía el sonido del vibrador en su cuarto. Lo quitó de su rojita entrada  y dejó aún lado.

— Mierda —seguía con la respiración agitada, con su cabellito pardo sudado, y miraba al techo—. Necesito a alguien —suspiró.

☸ 💫 ☸ 💫  ☸  💫 ☸

Hola :D.

¿Cómo están?

Muchas gracias por votar, son un amorsh 👌❤.

Bue, que tengan un muy bonis día. Los amito.

Junsu-v ➖💘

 El punto... ¿Qué? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora