UN DIA NORMAL

15 2 0
                                    

Después de tres intentos me rindo, no entiendo la tarea de inglés y ya se me hace tarde para la escuela, guardo mi libro y mis cuadernos en la mochila y me terminó de arreglar para ir a la escuela .
Tomo mi teléfono y busco el contacto de Emmanuel
+Ya me voy a la escuela
+ De acuerdo, te amo.
Me tomo un momento antes de contestar ¿Debería de seguir mintiendole ?
+ Y yo .
Me decido al fin .
Luego busco el contacto de Ian.
+Hola, Cómo estás ?.
+Bien, Y tu ?
+ Bien, ya voy para la escuela, te veré?
+ No creo, tengo clase a las 3
Una parte de mi se alivia, realmente no lo quería ver.
Veo la hora y ya son 12:30 ¡Dios! Si no me voy ahora no llegaré a tiempo para copiar la tarea.
- ¡ADIOS! - me despido de mi padre antes de salir.
- ¡Me avisas!- grita el desde su cuarto
- ¡Si!- mi padre y yo hicimos un acuerdo, yo podría ir sola a la escuela siempre y cuando le llamara cuando llegara, me parecía justo así que lo hacía .

Llegó corriendo a la escuela con 10 minutos de anticipación y se preguntarán ¿Entonces por qué corres ? Por qué, por si no lo recuerdan tenía tarea que hacer.
Llegó al salón y me siento en el piso, aún no hay nadie y el salón está cerrado, vacío, abro mi libro y me esfuerzo una vez más por entenderlo, pero, para mí fortuna empieza a llegar gente.
-Hola- saludo a Jeremy cuando aparece - ¿Hiciste la tarea ?
- Hola - responde devolviéndome el saludo y dándome un beso en la mejilla - Si
- ¿Me la pasas ?
- Si- se sienta a lado de mi y empieza a sacar los libros de su mochila.
- ¿Le entendiste ? - le cuestionó con curiosidad.
- Un poco, hubo partes a las que no.
Me dedico a copiar la tarea pero me doy cuenta de que todavía me falta, empecé a preguntar a los otros si tenían lo que me faltaba y por fortuna Samuel tenía una parte y lo demás lo consiguieron mis otros amigos .
Justo cunado termino llega German, se ve guapo aunque está todo desarreglado, él nos ve e inmediatamente se une para copiar la tarea.

Empezamos a bromear en lo que la maestra llega y sale un tema bastante curioso.
- ¿Ustedes se casarían ?- pregunta Jeremy a el grupo.
- Tal vez- dice June
- Yo si- respondo
- Yo también - me secunda Jeremy
- Yo no- responde German y en el fondo no me sorprende - es una perdida de dinero y en caso de que se divorcien el hombre pierde todo.
- Pero hay matrimonio por bienes separados - refutó yo
- Si, pero de todos modos se le tiene que dar dinero a la mujer, entonces es un pendejada.
Me quedo callada observandolo, somos tan diferentes.
No tengo más tiempo para pensar por qué en eso llega la maestra con una de sus hijas la cual lleva un yeso desde la mano hasta el codo.
- Disculpen la tardanza jóvenes, como ven tuve una situación.- todos asentimos para demostrar que no había problema.
La maestra de inglés el primer día de clases nos había dado su nombre y nos había dicho que no quería ser llamada " la maestra" o " la maestra de inglés " e irónicamente terminamos llamandole así por qué nadie recordaba su nombre.
Entramos a clase y el tiempo se nos va en Roberto haciendole la barba a la maestra ( cosa que hacía mucho Roberto con los maestros, pero no con todos le funcionaba ) y en Jeremy y yo completamente perdidos, normalmente siendo rescatados por German o June.
Después vamos a biología en dónde había una constante guerra por los lugares pues solo había cuatro disponibles de los cuales normalmente ocupabamos uno German, Jeremy y yo, quedando solo uno a disposición de los demás y le pertenecía a quien llegará antes. Durante un tiempo acercaban otro banco y lo ponían en la orilla de la mesa, estando en esta los ya antes mencionados más Samuel y Ozuna, sin embargó el maestro no estuvo de acuerdo con esto pues había mesas que tenían lugares disponibles. El mismo problema pasaba en la mesa de las básicas, ya que eran cuatro, pero Roberto se les unió de la misma manera, así que siempre había problemas en ese salón.
Ese día no alcance lugar en la mesa así que me ví obligada a sentarme con las básicas ya que por alguna extraña razón no se había sentado aquí Roberto.
- ¿Quien les parece mas guapo del salón?- pregunto Yannet
- Mmm yo diría que Roberto y Jeremy- dice June tomándome por sorpresa.
- Yo digo que Roberto y Alex - responde a su propia pregunta Yannet
- ¿Alex? - pregunto confundida
- Si, es alto, tiene lindo cabello y es inteligente, si le quitas los granos es atractivo- yo muevo la cabeza para mostrar inconformidad
- Yo diría que Roberto y German.
- ¿Por qué Jeremy? - pregunta Amanda ignorando mi comentario y refiriéndose a June.
- Es lindo - dice sonrojándose
- Está tierno- digo yo
- Yo digo que si los pusiéramos del más guapo al más feo estaría: Roberto, Jeremy, Alex y German- dice Johana
- No, yo pondría a: Roberto, German y Jeremy- digo yo
- German no es tan guapo- dice Amanda cosa que me causa mucha confusión.
- Pues Alex a mi no me parece para nada atractivo - le respondo totalmente sincera.
- Ya acabaron jóvenes - pregunta el maestro.
- Ya casi - respondo seguida de June y Yannet.
Dejamos el tema de lado y nos ponemos a copiar la hoja que nos entrego de animales marinos y mientras yo hago un esfuerzo enorme por replicarla, mis compañeras de mesa lo hacen a la perfección y hasta con color, joder, dibujar no es lo mío.
Al terminar la clase me uní otra vez a mi grupito, hoy nos tocaba historia, con uno de los maestro que más miedo me daban ¿Por qué será que la historia y yo nunca nos llevamos bien ?
Samuel se empeñaba mucho en destacar, o más bien de no destacar aquello que lo avergonzaba, en lugar de que la gente se concentrará en su estatura buscaba que se concentraran en lo inteligente que era o bien se la pasaba criticando a todos ( principalmente a los vírgenes )para desviar la atención de él, mientras que German se seguía posicionando por encima de todos.
Resulta que los días que salimos temprano German iba por su novia a la escuela y la acompañaba a su casa, gesto que me parecería lindo si no conociera a German.
En todas la clases participaba German, tenía una excelente oratoria y más de una vez nos salvó de preguntas incómodas o que no sabíamos en la mesa, éramos el equipo perfecto de una manera u otra siempre salíamos bien, teníamos el equilibrio perfecto.

Sentía que últimamente me estaba pasando de coqueta, no hacía mucho que mis senos habían crecido un poco y yo ya estaba usando blusas muy escotadas con la intención inconsciente de llamar la atención de German, a veces me cruzaba de brazos o me inclinaba sobre la mesa para que estos resaltarán, pero no me atrevía a ver si él los estaba viendo.
Solía mirarle mientras participaba en clase, fascinada por su intelecto.

Con Jeremy todo era más tranquilo nos la pasábamos riendo y haciendo bromas, en poco tiempo se convirtió en mi mejor amigo.
Salimos al pasillo después de la clase, seguimos bromeando un momento con lo chaparro de Samuel y quien estaba más grande si el o yo. Mientras hacíamos esto a unos metros de distancia paso un chavo con una chava de la mano.
-¡¿Qué onda wey ?!- saluda a German
-¡¿Que pedo?! - responde haciendole una seña. El chavo sigue caminando y German hace una cara de confusión muy graciosa.
-¿Lo conoces?- pregunto, pero me arrepiento al momento, no es de mi incumbencia.
- Ni puta idea de quién sea - responde a lo cual no puedo evitar reír.
Miro la hora y me doy cuenta de que ya es tarde para mí, veo a los demás, no les preocupa llegar tarde a su casa.
-¿Irás por tu novia hoy?- le pregunto ya que siempre que iba por ella se iba a puerta 1 conmigo.
- No, hoy no - dice sin más, asiento lentamente comprendiendo que no debo de preguntar más.
- Bueno pues ya me voy - anuncio a todos y me despido de beso en la mejilla de todos, cuando le doy el beso a German siento algo extraño en mi estómago.
De camino a la puerta 1 alcanzó a ver de lejos a Ian, un instinto repentino por no toparme con él hace que me vaya por otro camino, aún más largo.
Le he estado evitado por qué realmente creo que el que haya aceptado su propuesta solo fue un acto impulsivo y necesitado de atención. Debería hablar con él.
Cuando voy saliendo tomo mi teléfono y le marco a mi papá.
- Bueno - contesta él al otro lado de la línea.
- Hola, ya salí y estoy en la parada del trolebús, aún no lo tomo.
- A que bien, te esperamos Elli y yo, ya está hecha la comida.
- De acuedo, ya voy, bye.
-Bye.
Maldición, odiaba cuando mi padre estaba con Elli, lo convertía en su peor versión. Era una relación realmente tóxica, durante 10 años se habían peleado, separado y regresado demasiadas veces como para contarlas. También estaba el hecho de que era muy pasiva agresiva, pues a pesar de decir que me quería, constantemente estaba criticandome, diciéndome cosas como que algo no me queda cuando en realidad todos los demás concordaban en qué me queda a la perfección. A veces me sentía blanca nieves, con una madrastra que busca ser la más bella del reino por siempre, a pesar de que la joven está floreciendo.
Busco el chat de Emmanuel una vez más mientras espero el trolebús.
+Ya salí de la escuela
+ Que bien, ¿Cómo te fue ?
+Bien, normal
Cierro el chat al ver que ya llegó mi transporte, guardo mi teléfono en mi bolsillo y me subo.
Y esos eran mis días, lidiando con entender las clases, tratando de ver si podía conseguir a alguien como German, lidiar con las burlas de Samuel y también lidiando con Elli y la actitud de mi padre, y lo que más me gustaba, riendo en mi grupo por cosas sin sentido.

Mi Perfecto ClichéDonde viven las historias. Descúbrelo ahora