Vida mia, Vida nuestra

Ayuda!!!

Cómo lo haces? - Pregunté al borde del llanto solo un día, un día me quedé con los niños en día de semana, Gulf tuvo que ir a presentar unos documentos para empezar a trabajar en un colegio.
Sus años de ingeniería, servían pero, el había descubierto su pasión por la educación y yo en un día entero descubrí que no podía con mis hijos de tres años. Gulf rió divertido al verme con el mandil, la casa un completo desastre y, para rematar trataba de vestir a uno de los gemelos Win, quien corría por Dios sabe dónde, eran las tres y yo no había comido - Gulf !!- exclamé abrazándome a él y como si de magia se tratase los niños calmaron su alboroto y Win ese pequeño diablillo se dejó vestir. Saludando al unísono a su papi.

Se han portado bien? - pregunto a los niños, yo lo miré desconcertado, no, no se habían portado bien, estaba a punto de volverme loco

Si - dijeron ambos enanos me puse las manos a la cintura.

No es verdad - acuse, sentándome a modo indio, Gulf se acuclilló a nuestra altura.

Si - defendieron ambos - solo que tú no tienes paciencia - acusaron y corrieron a los brazos de Gulf quien, los recibió gustoso con una gran sonrisa en los labios.

Cómo te fue? - pregunté dándole un cálido beso.

Mejor que tú - dijo riendo le hice un puchero - me fue bien, empiezo a trabajar la próxima semana - dijo sonriendo

Yeee - le celebré abrazándolo con mis hijos - chicos abrazo a papi - dije y los niños tumbaron a Gulf empezando una guerra de cosquillas.

Salimos a comer con los niños, quienes con Gulf se portaban de una manera....

Parecen amaestrados - exclamó Kaow viendo a los niños; salimos los ocho. Kaow y Turbo se mudaron hacía más de dos meses, vivían cerca a nuestra casa, habían cumplido su sueño, abrir su propia escuela de canto y baile. - pero conmigo, sabes como sufro? - veía a su niño Tin, era el mayor de todos y el pequeño que le seguía era su hermano Noh - cuando Turbo se va es... - dijo Kaow mirando a sus hijos

Y que lo digas un solo día con mis hijos y estuve así de llorar - confesé riéndome con Kaow.

Creo que hay una conexión única y hermosa entre padres e hijos pero más con quién te llevo en su seno; mi madre tenía el poder de con solo una mirada hacerme obedecer, mientras mi padre negociaba conmigo e incluso me compraba con algún dulce, juguete o dinero.

Gulf hace lo mismo con nosotros tres, con una sola mirada deja en claro quien es el que manda en casa.

Recuerdo el primer berrinche de Zee por un cereal en el súper, Dios todos nos miraban y Gulf simplemente lo ignoró hasta que se calmó y luego se acercó a su papi

Ya me calmé - dijo el pequeño en medio de sollozos

Ahora sí nos entendemos - dijo él - y no, no voy a comprarlo - dijo - hasta que aprendas. Está claro? - el niño volvio a llorar pero asintió.

Yo por el contrario en cuanto uno de ellos lloraba haciendo una pataleta, conseguía lo que demandarán con el único fin de que no hiciesen un escándalo. Eso hasta que Gulf se harto y me quito la cartera en cada salida.

No!! Los malcrias y eso Mew Suppasit no está bien - sonreí, quería disuadirlo pero luego ví su seriedad y acepté y ahí detrás de él íbamos los chicos regañados de Gulf Kanawut.

Algo a lo que nunca me acostumbré era a ver a mis niños enfermos, aquí ambos nos desviviamos por ellos, así fue como descubrí que el hombre con gran temple a mi lado se asustaba y llegaba a estar ansioso por sus hijos y por el aprendí a controlar mi nerviosismo y ansiedad. Gulf simplemente se entregaba hasta que se recuperen, entonces lo veía sonreír.

Kaow! - llamo Turbo, a su esposo, quien me dió una mirada mientras sonreía y se dirigía a la mesa

Win vino corriendo hacía mí con una sonrisita que muy bien conocía.

Dime campeón - dije alzando a mi hijo en brazos

Papá si me compras un helado ... - ahí estaba el motivo de su sonrisa - te cuento un secreto de mi papi.... - dijo riendo. Gulf nos observaba desde la mesa con una sonrisa tierna....

Vamos cariño - estaba negociando conmigo en la noche - solo serán dos días. - Dos días claro que podía pero - antes de que inicie mi trabajo y el tuyo - exclamó mientras masajeaba mis hombros

Gulf - hablé con cierto placer que sus manos me brindaban - solo dos días - repetí

Si, solo dos días - afirmó sonriendo, sabía que había ganado

Ok, ok, ahí - dije dejándome llevar por sus manos.

Cuando lo ví irse con Turbo, por primera vez ví a mis dos angelitos como lo que eran, unos pillos, echaron a correr.

Zee!!! Win!!! - grité yendo detrás de ellos, sobreviviría aún no lo sabía, respire hondo - solo dos días, solo dos - repetía cerré la puerta era hora del desayuno de mis niños.....