4 de abril

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Estoy confundida. Leí acerca de pactos y rituales. Al principio creí que lo estaba haciendo mal. Miles de ideas rondaron mi cabeza. Mientras esperaba respuesta de aquél a quién creí sería mi mentor me sujete a lo siguiente:
El satanismo no se trata de tratos por tu alma, ni de sacrificios animales, mucho menos humanos.
Yo sentía que estaba bien, porque la energía que me había iluminado la primera vez recorría mi cuerpo entero.
Recibí respuesta. No fue grata. Le comenté a este individuo mí incertidumbre. Me dijó que no perdía su tiempo con aficionados que se creen satanistas sólo por cargar una imagen de Baphomet, o por recitar oraciones a lucifer. Me dijó que estaba harto de personas así y que jamás guiaría a alguien como yo. Se burló de mi y sin que yo le dijera que tenía algún problema me dijó que no iba a reparar mi vida. Y que si el satanismo repudia la estupidez y la ignorancia yo era un ignorante cubierto por la estupidez.
Vaya lección que me dió. Yo no estaba buscando que nadie reparará mi vida,intenté comprender su postura, muchos deben llegar por morbo, pero yo estaba convencido que esté era mi camino.
Encontrarse con personas así es frecuente, se olvidan que Dios Padre lucifer enseña que quién busca el conocimiento que uno lleva debe encontrarlo. Y si podemos servirle compartiéndolo esto es lo que se debe hacer.
Por eso llegamos a este camino, porque estamos perdidos por la vida.
Por unos momentos fue una desepcion haberme encontrado con alguien tan grosero y egoísta. Pero no me iba a llevar a claudicar.
Encontré que la iniciación que había tenido era la correcta. Satanás no está en busca de almas torpes ni sacrificios humanos, quiere que se le sirva con devoción y respeto. Oradole, alabnadolo. Dándole nuestros talentos y servicios como este, compartiendo la mera experiencia de cómo se llega hasta sus brazos. 

EL DIARIO DE UN SATANISTADonde viven las historias. Descúbrelo ahora