Trabajándolo

Sigue tus sueños

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Diego

"¿Te acuerdas de ese chico Tony, del que te hablé? ¿Con el que Sebastián me conectó esa noche en el bar?"

Sian había transmitido su conversación unos días después de que sucediera. Tony tiene algún tipo de negocio o algo y podría ayudar a Sian con un trabajo.

"¿Te contacto?", Pregunto.

Él asiente pero no se ve tan feliz como debería.

"¿Qué pasa? ¿No es lo que esperabas? Si no es un buen negocio, no lo aceptes, pero si crees que podría convertirse en algo bueno... "

"No... no es eso. En realidad es bastante increíble. Ganaré mucho dinero y ayudarán con la escuela. No es una garantía, pero Tony cree que tengo una buena oportunidad. Si estoy interesado, comenzaremos el proceso de la entrevista".

"¿Qué demonios, amigo? Esto es asombroso ¿Por qué te ves tan triste? ¿Estás nervioso? Sé que las cosas nuevas pueden dar miedo, pero estás locamente inteligente, Sian. Este trabajo parece una buena oportunidad".

"El trabajo está en Chicago ", responde.

Oh. Mierda. Eso cambia las cosas.

"Este hola. Al menos ya conocerás a alguien allí ", le digo. "Andres vive en Chicago, ¿verdad?"

Estoy tratando de ignorar la sensación de vacío en mi pecho, agarro mi plato y camino hacia la cocina. Esta es una buena oportunidad para Sian. Nada más importa.

"No me importa una mierda lo de Andres, Diego, y tampoco pretendo que sea lo que estás pensando". "Si consigo este trabajo, tendré que mudarme a Chicago el próximo mes ".

El próximo mes. Mierda, eso es rápido. Puse mi plato en el fregadero y él se puso a mi lado.

"No sé qué hacer". Me pone una mano en la cintura y me da la vuelta para que lo mire. Puedo ver la guerra que está librando consigo mismo claramente en su rostro. Él quiere este trabajo; lo quiere tan jodidamente mal que puede saborearlo... y también debería quererlo, pero también está preocupado por nosotros. Somos demasiado nuevos para probar algún tipo de mierda de larga distancia. Pero si somos demasiado nuevos para eso, también somos demasiado nuevos para que ponga su vida en suspenso por mí, para que deje pasar una buena oportunidad que podría ser un futuro real para él.

"Sí, lo harás", le digo. "Sabes exactamente lo que tienes que hacer".

Me molestaría si no lo hiciera. Nos molestaría. Siempre se lo cuestionaria.

"Tienes que intentarlo. Pasarás toda tu puta vida arrepintiéndote si no lo haces. Siempre te preguntarás, y yo no seré el tipo que te haga preguntarte qué pudo haber pasado".

Él mira hacia abajo, y maldita sea si el dolor que veo en el conjunto de su cuerpo, oigo en el sonido de su voz no desgarra mis entrañas.

"Si estamos destinados a ser, vamos a superar esto, Boo. Sabíamos desde el principio que solo estábamos probando las aguas, viendo lo que sucedería. Nos divertimos, nos gustamos, pero esta es tu vida. Eso es mucho más importante que un chico que conociste hace unos meses, sin importar lo bueno que soy".

No se ríe, y sabía que no lo haría. Yo tampoco tengo ganas.

"Además, sabes dónde encontrarme. No es como si nunca volvieras. Siempre tendré tiempo para relacionarme contigo".