Tan sólo el plan del caos

3

Tras sorber el último trago de su refresco, Lisa atónita examinó una vez más los datos que su aparato con forma de varita le proporcionó. Acababa de salir del parque de diversiones y ya se estaba acercando a su tele-trasportador.

Una pareja de niños apareció corriendo desde direcciones opuestas hacia ella. Lisa se olvidó de lo que estaba haciendo para reprenderlos.

—¿No se supone que deberían de estar ya ahí dentro? —miró a su hija soñolienta en brazos de la niña latina— ¿Por qué no has dormido a Lulú todavía?

—Ah... me perdí en el camino de regreso.

La mujer se volvió hacia Lincoln, pero antes de que le dijese algo, él se adelantó.

—¡Yo también! Las cosas se ven muy cambiadas desde el año pasado.

—Déjense de tonterías y suban. Ya quiero irme de aquí ahora que sé lo que creó la división de realidad.

Mientras le obedecían y Ronnie Anne acostaba a Lulú en la cuna, Lincoln trató de conversar con su hermana tratando de apaciguar su carácter.

—¿En serio ya lo averiguaste? ¿Y qué fue lo que produjo eso que dijiste?

—Ustedes —cerró las puertas de la nave y tan pronto la puso en marcha. Volvió a encararlos—. Lo que me falta son los detalles, así que hablen. ¿Qué hicieron después que los dejé solos?

Rindiéndose ante un posible castigo, ambos le contaron lo que les ocurrió. Ronnie Anne se sorprendió al saber que Lincoln fue besado por su contraparte, sintiendo un conflicto al no saber si celarse, o alegrarse porque técnicamente quien lo besó fue ella. Igualmente Lincoln se sorprendió al saber que su hermana tendría algún problema serio a futuro con Ronnie Anne, mismo que su amiga del presente parecía haber arreglado.

—Ronnie Anne, ¿por qué dices que Lynn al principio hablaba raro? —Le preguntó Lincoln.

—No lo sé. Tenía sangre en la boca. Tal vez se la mordió o... ahora que lo pienso, estaba discutiendo con tu otro yo y cuando llegué él se marchaba muy molesto. ¡Tal vez le pegaste!

—Sería incapaz de pegarle en serio a cualquiera de mis hermanas, en especial a Lynn que podría hacerme puré.

—Pues ni modo que la lengua se la hayas mordido tú.

—No seas absurda. ¿Por qué mi hermana tendría su lengua en mi boca para empezar?

Nuevamente escucharon un golpe seco en uno de los compartimientos. Lulú despertó unos segundos para enseguida volver a acomodarse en su cuna para descansar. Ronnie Anne se rascó la cabeza.

—Doctora Loud, esa cosa está haciendo ruidos raros de nuevo.

—Y de nuevo les repito que lo ignoren. Prepárense, estamos por llegar a nuestro siguiente destino.

—Solo evita aterrizar encima de alguien.

El estruendo que hicieron al caer fue fuerte, aunque no tanto como la vez anterior. Los chicos hubiesen jurado haber escuchado un quejido provenir del interior del compartimiento que Lisa insistía no se trataba de nada.

Ya afuera descubrieron que era de noche y habían aterrizado justo en medio de la calle, una suerte que esta estuviera despejada.

Tras comprobar unos datos con su "destornillador sónico", Lisa movió la cabeza inconforme de lado a lado.

—Voy a serles completamente franca. Originalmente esperaba llegar esta vez más atrás en el tiempo e interrumpir cierto momento cuestionablemente fraternal entre Lynn y tú, hermano, dado que la primera vez no pude lograr nada, más allá de descubrir que ustedes dos son los responsables de mi línea alterna de tiempo de la que les diría gracias, de no ser porque a final de cuentas fue por mi intervención al llevarlos ahí la responsable de su origen... lo cual me lleva a hacer más cuestionamientos de los que tenía inicialmente con respecto a cómo funcionan en realidad las dimensiones y la predestinación de las mismas.