Eran apenas las 5:00 am cuando escuché a mi madre detrás de la puerta, era mi primer día de clases, y por si fuera poco, ¡Era mi primer día en el país!... Soy de centroamérica pero mi padre murió hace un año y mi madre encontró un buen empleo en este país, no tengo amigos así que no fue nada duro mudarme hasta acá.
Me levanté sin querer hacerlo, entré al baño y tomé una ducha de media hora porque quería sentirme despierta para empezar como dicen "con el pie derecho"... Como era mi primer día, se me permitía ir en particular, así que cogí una sudadera, ancha y cómoda con una remera que me obsequio mi padre antes de morir, bajé al comedor, desayune junto a mi madre y ya el transporte estaba frente a nuestro departamento...
-«¡Qué empiece mi nueva aventura!» pensé antes de abrir la puerta e irme al instituto.
