Capítulo VIII

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Me he dado cuenta que ya no eres tan responsable con las cosas que te gustan.

¿Qué como lo sé?

Siempre espero que llegues por la tarde a la escuela.

Pero no te he visto las últimas semanas.

Tal vez te diste cuenta de que te espío.

Y no quieres venir por mí.

Eso me mata por dentro.

Siempre veo cuando llegan tus compañeros de equipo.

Están en la escuela media hora antes de las prácticas.

Tú llegas cinco minutos antes. (Si es que llegas.)

Al principio llegabas a la misma hora que los demás.

Dos semanas después llegabas veinte minutos antes.

Dos semanas más y eran diez minutos.

Ahora son cinco, si es que llegas.

Además de llegar casi tarde (cuando llegas.)

No haces las cosas que debes.

Te vas a otro lugar con ese chico mayor.

Y se pasan haciendo estupideces.

El otro día buscaba una maestra en el salón de arte.

Y me crucé contigo.

Dijiste incoherencias y te marchaste.

Recuerdo que ese mismo día habías estado ignorándome.

Recuerdo cuanto dolió.

Recuerdo que después de encontrarme contigo nadie podía sacarme la sonrisa del rostro.

De mi, para tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora