Capítulo Cuatro

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7 de Febrero del año 2020

Sonreí al ver a Vale entrar a la casa junto con Zack, quien la abrazaba de uno de sus hombros.

-¡Me quedaré a dormir!-Gritó con emoción.

-¡Vale!-Gritó Michael corriendo a abrazarla, a lo que Vale correspondió el abrazo.

-Bueno...al menos tendremos una buena compañía el día de hoy.-Pensé sonriendo.

-¿Como estás enano?-Preguntó Vale con una sonrisa mientras desordenaba los cabellos rojizos de Michael, quién solo soltó una risa infantil.

-¡Estoy bien! ¡Estoy bien!-Respondió Michael con alegría.

-¿Tu padre no llegará hoy?-Preguntó Ian con curiosidad mientras se acomodaba aquel mechón de cabello que siempre cubría su ojo izquierdo.

-Ian esta esperanzado.-Pensé con alegría.-Se nota que la quiere.-Pensé jugando con una mecha de mi cabello.

-No, pero mañana debo estar en casa.-Dijo Vale con una sonrisa.

-Eso era lo que tanto quería oír Ian.-Pensé mientras observaba la alegría en Ian.

-Pues ahora tu cuarto ya esta libre. El tercer piso ya esta listo.-Dijo Zack, a lo que Vale se emocionó con aquello.

-¡¿En serio?!-Preguntó sorprendida y con emoción.-¡¿Puedo ir a ver?!-Preguntó entusiasmada, a lo que Zack asintió.

-Vale...tan energética como siempre.-Pensé sonriendo.

Y en ese momento Vale subió corriendo las escaleras junto con Ian, quien se había ofrecido a acompañarla.

-Pensar que después de todo...al fin se pudieron hacer amigos.-Pensé alegre por Ian.

-Oye Zack.-Dijo Juliette comenzando a abrazar a Zack, cosa que lo estaba molestando, era obvio.

-Juliette esta cavando su propia tumba.-Pensé con gracia mientras veía la escena.

-Zack. Zack. Zack. ¡Zack!-Seguía insistiendole aquella pelirroja.

-¡Déjame!-Gritó Zack empujandola fuertemente y alejándola inmediatamente de su cuerpo, recibiendo una mirada de sorpresa de parte de la pelirroja.

-Era de esperarse esa reacción de Zack.-Pensé con una sonrisa mientras observaba atentamente la escena.

-Pero Zack, solo te quiero abrazar.-Dijo con una sonrisa, a lo que Zack suspiró molesto.

-Se acerca la respuesta que tanto se espera.-Canté mentalmente mientras miraba mis uñas.

-No quiero contacto físico mujer.-Dijo con ira.-Ni si te ocurra hacerlo de nuevo.-Contestó con frialdad.

-Lo sabía.-Pensé mirando a Juliette atentamente.

-Zack, que ni se te ocurra golpearla ¿Entiendes?-Dijo Leila con seriedad, cosa que molestó a Zack.

Desquicio y EgocéntriaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora