There's no one quite like you, you push all my buttons down
I know life would suck without you...
Las cuatro de la mañana llega demasiado rápido. Alec había estado demasiado enojado como para descansar correctamente. Había llamado a Jace para quejarse de su situación, lo cual solo aumentó su irritación ya que Jace no hizo otra cosa más que burlarse de que al fin le haya tocado el trabajo que tanto había evitado por años.
– Estás viendo esto por el lado negativo, – le dijo Jace por el teléfono.
– ¿Hay un lado positivo? – Alec replicó, sintiéndose más irritado que nunca.
– Hey, vivirás en un penthouse por una semana, con todo pagado, con alguien a quien muchos morirían por conocer, y lo único que tienes que hacer es vigilarle. Probablemente solo es un fan loco que no consiguió entradas para su espectáculo o algo así. –
– Creo que es algo más que eso, Jace. Tengo la lista de empleados y me tomará varios días verificarlos. Y aun me faltan amigos y exes. No tengo una lista de sus relaciones pasadas, – Alec suspiró.
– Tu puedes, amigo, – Jace le dijo.
Hablaron de otras cosas antes de colgar y Alec se pusiera a empacar sus cosas. Para cuando terminó ya casi eran las once. Decidió tomarse un baño para aliviar la tensión acumulada y finalmente se fue a la cama.
Pero su cerebro no dejaba de pensar en Magnus Bane, con su camisa abierta, y la mejor de todas, Magnus Bane desnudo. Y su traicionero miembro no le ayudaba para nada.
Una hora después finalmente cerró los ojos y logró dormir, pero aun así no logró descansar.
Usualmente, Alec no soñaba, pero esa noche fue la excepción. Magnus estaba parado frente al él solo con una bata. No dijo nada, simplemente se acercó cada vez más como un león cazando a su presa, levantó su mano y acarició su mentón con un dedo, deslizando su otra mano por el cuello de Alec. Alec se sentía bajo un hechizo. Y estaba demasiado caliente. Sin una palabra, abrió la bata de edad de Magnus, revelando ese maravilloso abdomen.
Acarició su pecho, sintiendo la dorada y musculosa piel, la cual también era suave. Fue bajando más y más su mano hasta llegar al gran miembro de Magnus. De repente, Magnus se hincó y comenzó a desaprobar su pantalón. A Alec le costaba respirar, sintiendo como Magnus le bajaba los pantalones.
Su gran erección salió libre, y vio como los labios rosas de Magnus le tomaban. Alec gimió de placer sintiendo como sus piernas se debilitaban. La forma en la que su lengua lamia y su boca succionaba le estaba llevando al límite. Magnus comenzó a aumentar la velocidad, acariciando con sus manos, Alec intenta decirle que vaya más lento, no queriendo acabar tan rápido, pero siendo incapaz de formular palabra.
Cuando sintió como Magnus le tragaba hasta la garganta, Alec explotó, gritando de placer y embistiendo la boca de Magnus, llenándole su boca con su orgasmo, Magnus lo tragó todo.
Alec se despertó de golpe, sintiendo como se corría al despertar. Su pecho subía y bajaba, intentando recuperar el oxígeno por ese erótico sueño.
Habían pasado bastantes años desde la última vez que se despertó por un sueño húmedo, fantaseando con alguien y, aun así, nunca había sido tan intenso.
Después de limpiarse, volvió a acomodarse para dormir, pero no paso mucho tiempo antes de que la alarma sonara, levantándole de la cama.
Se vistió con un típico traje y cortaba, sus botas, luego fue a la cocina llenando su bote de café. Y salió de su departamento. Se estacionó en el estacionamiento del edificio de Magnus y luego sacó su maleta. El estacionamiento también contaba con varias cámaras de seguridad. Bien.
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Entre Humo y Espejos (Malec AU)
FanfictionAlec Lightwood es un guardaespaldas de la Agencia Shadowhunter. Después de años exitosos evadiendo famosos, termina trabajando para uno de los grandes, Magnus Bane, un brujo organizador de espectáculos. Cuando Magnus comienza a recibir cartas amenaz...