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Capítulo 5

Mis piernas no daban más del cansancio pero si quería estar bien tenía que huir de ese psicópata.

Todo había sucedido tan rápido, comencé a preguntarme mientras corría su lo había matado, se me quedó grabada la imágen de el tirado en el suelo.

Mi objetivo era volver al hospital, fuí una imbécil al escaparme.

–¡Es la niña de ayer!– si mal no recuerdo ese era uno de los guardias de ayer.

La secretaria sin dudarlo marcó un número en el teléfono fijo
–Volvió, sí, está bien, avísale a sus padres.– de pronto le hizo una señal al guardia que gritó hace un instante el cual me esposó de inmediato, algo injusto la verdad.

–Ey ¡sueltame! Volví voluntariamente, no son necesarias las esposas.

–Solo hago mi trabajo señorita.

–Acompañen mé por aquí– la enfermera nos guió a una habitación.

–Recuestate por favor.

–Está bien...–no tenía más nada que obedecer.

–Déjenos solas por favor. –el guardia salió sin ningún problema.

–¿Me recuerdas?– me miró de pies a cabeza y se sentó al lado mío.

–Claro, me atendió ayer.–Soné como una idiota.

– Si, te haré unas preguntas, sé sincera por favor, sinó no podré ayudarte.

Me puse algo nerviosa.

–¿Dónde pasaste la noche?

Mierda, pensé.

–Yo... –no sabia que responder.

¿Cómo se supone que le diga que me violaron.

–Okey.–Anotó algo en una planilla.

–¡No lo olvidé! Tengo mis motivos para no decirte dónde estuve– me cansé de que me traten de estúpida.

–Está bien, lo siento, la ropa ¿se puede saber quién te la dió?

Me congelé.

–Tengo una mejor pregunta... ¿Y mis supuestos padres? Tengo que verlos.

–Oye, ¿cómo que "supuestos"? No los recuerdas?– sé sorprendió al parecer.

–No, no recuerdo absolutamente nada, no tengo idea ni de como me llamo, por eso volví... ¿puedo ver a mis padres por favor?– mis ojos se inundaron de lágrimas.

–Tranquila, no te alteres, ellos están en camino, mira, necesito hacerte un chequeo, nadie está enterado de tu falta de memoria. Ahora tiene sentido por qué saliste corriendo del hospital.

Quedamos en silencio cuando de pronto ellos aparecieron.

–¡Hija!– al entrar a la habitación me abrazaron.

–Nos tenías preocupados, por favor, no vuelvas a hacerlo hija! –mamá comenzó a llorar.

–Señor Kingston, ¿podemos hablar un minuto?– la enfermera me miró algo preocupada mientras salían de la habitación.

–Hija, ¿estás bien?, ¿dónde pasaste la noche?, Y... tu ropa, ¿quien te dió eso?–ella no dejaba de hacerme preguntas.

Me preguntaba cosas que hacían recordarme a todos lo que me hizo ese psicópata.

–Mamá –sollocé–Me violaron–Mis lágrimas caían en la sábana blanca de la camilla. –Lo lamento, no debí escaparme, todo esto es mi culpa.

Noté sus ojos profundamente llenos de lágrimas.

–Ay hija, nada de esto es tu culpa, tranquilizate, hay que hablar de todo esto...

–¡No puedo! Ese imbécil debe de estar buscandomé, bueno, si es que no lo maté.

–¡¿Qué?! –papá entró algo angustiado por lo que le había dicho la enfermera.

–Llama a la policía y pásame el celular.– el no comprendió pero obedeció.

–Hola, ¿en que puedo ayudarlo?

–Hola, quería informarle sobre una violación– papá de repente me miró y quedó congelado, luego de un minuto de que mamá saliera al pasillo para hablar mejor papá se acercó y comenzó a llorar. No saqué los ojos de la enfermera que me miraba algo confundida.

–Señor, si me permite iré a avisar a los guardias para que estén al pendiente de todo.
–Por favor, haga lo necesario, le pagaré.

(Horas más tarde)

_ Señorita en la ubicación que nos dió del acusado no hay nadie, hablamos con la dueña del lugar, nos describió a un muchacho que se fue hoy a la siesta de uno de los departamentos.

–¿Nos puede dar la descripción que le dió la dueña del lugar por favor?–papá estaba muy inquieto.

–Por supuesto, mide unos 1,73 metros, pelo negro, algo delgado, ojos grises.. es toda la información que nos dió– quedé congelada por milésima vez, era el sin duda.

–¡Es él! Lo recuerdo perfectamente, por favor, no lo dejen desaparecer así!

–Haremos todo lo que esté a nuestro alcance, cualquier pista que encontremos los contactaremos, con permiso– se retiraron.

–Quiero irme de aquí. Vayamos a casa.

–Espera, no tienes que alterarte, es más difícil así. Tu golpe en la cabeza... Hay que hacerte unos chequeos y es necesario también hacerte una prueba de violación sexual.– Me quedé helada.

–Tenés que ser fuerte, ¿si? Aquí estaremos para cuando salgas..– mamá logró calmarme un poco.

–Acompañenmé– seguí a la enfermera.

(...)

–Sr y Sra Kingston, tengo los resultados, hay muchos rastros de violación en su hija, también encontramos algo de semen que identifica al acosado. Con estas pruebas tienen todo el derecho de poder meter a ese hombre a la cárcel–.

–Esas si que son buenas noticias– papá sonrió al igual que mamá.
–Hay algo más .. no creo que sus reacciones sean buenas–
–Como, ¿que más hay doctora?..–
–Hay probabilidades de que su hija esté embarazada–

(.....)

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_Perdón por no estar activa, estuve muy ocupada, ahora por el tema de cuarentena subiré más contenidos._