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Frota su barriga

Faltaban tres días para la fecha más importante de sus vidas.

YoonGi siempre creyó que estarían correteando de un lado a otro, asegurándose de que todo esté perfecto, que ningún detalle faltara, incluso preocupándose por el clima, para su sorpresa no era así.

Estaba cómodamente recostado junto a JiMin, usando su brazo como una cómoda almohada y viendo cada detalle de la cálida mano a pesar de conocerla a la perfección. Su prometido no parecía incómodo ni nada, mantenía los ojos cerrados y YoonGi se preguntó si estaba dormido.

—¿Amor? —Sus dudas se despejaron al escuchar el pequeño sonido que JiMin hizo como respuesta —, nada, solo quería saber si estabas despierto.

—Creo que sería muy difícil dormir.

YoonGi dejó un pequeño beso sobre la mano ajena, sintiendo la sonrisa de JiMin ampliarse con ligereza.

—Jiminnie, ¿estás feliz?

El castaño abrió los ojos, no tardando en quitar su brazo, provocando un quejido de YoonGi, lo recompensó acomodándose a su altura y sonriendo mientras acariciaba la mejilla ajena.

—Voy a casarme con la persona que más amo en este mundo, claro que estoy feliz —YoonGi sonrió —¿Y tú?

A JiMin le pareció divertido su silencio... Los primeros minutos.

—¿YoonGi?

—Bueno...

—YoonGi... No es divertido.

El menor hizo un pequeño puchero, viendo la seriedad en la expresión de su pareja. Suspiró y acarició la mejilla ajena, sonriendo ante la calidez y suavidad que poseía.

—Eres el amor de mi vida, JiMin y me siento tan afortunado de ser la persona que escogiste, estoy mucho más que feliz, no dudes de eso.

JiMin sonrió antes de apresarlo en sus brazos, riendo al escuchar el quejido de su futuro esposo, YoonGi lo rodeó de igual manera, acariciando con tranquilidad su espalda y observando el techo de la habitación, siendo su único pensamiento que se casaría con la mejor persona que pudo conocer.

Suspiró antes de observar por la ventana, el cielo despejado y el mar daban una vista increíble de lo que era un poco de Malta, sus amigos habían dicho que salieran a disfrutar un poco de todo lo que el lugar ofrecía, pero ellos prefirieron quedarse en el hotel después del cansado viaje que tuvieron.

—Deben estar divirtiéndose —murmuró.

—¿Um?

YoonGi observó a su pareja, sonriendo antes de dar un pequeño beso sobre su cabeza.

—Los chicos, nuestros padres, Holly... Ya sabes.

—¿Quieres ir a algún lado? Podemos llamar a Jin y acompañarlo.

—No es necesario, creo que podemos hacerlo mañana.

JiMin asintió antes de volver a esconder el rostro entre la almohada y la curvatura del blanquecino cuello, disfrutando la calidez que YoonGi le ofrecía, no fue hasta unos minutos después que decidió volver a recostarse junto a él, sin apartarse mucho en realidad.

—Estoy tan cansado —se quejó, YoonGi sonrió con ligereza.

—Entonces descansa.

—No quiero.

—Entonces no te quejes.

El castaño se carcajeó, provocando una sonrisa en YoonGi.

—Amor —llamó cuando sus risas se calmaron, no tardó en recibir una pequeña respuesta —¿Sabes por qué odio dormir?

YoonGi lo pensó un poco, no se lo había planteado antes y, al no hallar una respuesta, negó.

—Porque no puedo verte.

Las imágenes más preciosas que el mundo tenía era un YoonGi totalmente nervioso y sonrojado, JiMin sabía que sin duda era de las mejores escenas.

—Eres muy cursi —fue lo que dijo, evitando su mirada —, sin duda muy cursi.

—Estoy a días de casarme, ¿Cómo quieres que esté? Y además iremos a Hawái por nuestra luna de miel, ¿No es motivo para ser la persona más cursi del planeta?

YoonGi sonrió con orgullo al escuchar Hawái, habían ahorrado mucho por eso, creía que sería como un viaje más, pero pensarlo como su luna de miel solo lo hacía más especial.

—¿Estás feliz? —YoonGi suspiró al volver a escuchar la pregunta, los últimos días habían estado llenos de ella, por parte de ambos en realidad, queriendo asegurarse que sí, lo estaban y se casarían.

—Lo estoy, no puedo creer que sea posible sentir tanta.

JiMin se inclinó hacia él, observándolo un momento y creyendo enamorarse un poco más, los preciosos ojos de YoonGi lo observaban como si fuera lo único en el mundo, como si él fuera su mundo y no estaba tan alejado de la realidad.

Fue el menor quien atrajo su rostro, uniendo sus labios en un suave beso, JiMin sonrió, alejándose y volviendo a darle pequeños besos cariñosos. Sus manos recorrieron el cuerpo ajeno hasta colar una de sus manos bajo la camisa, YoonGi suspiró al sentir la caricia que empezó a repartirse sobre su estómago.

—Es increíble que esto te relaje —murmuró JiMin, YoonGi soltó un pequeño quejido, refunfuñando ante las palabras de su prometido —, eres un mundo, Min YoonGi.

—Estoy seguro que eres quien ha descubierto todo.

El castaño sonrió, continuando con sus caricias, disfrutando ver lo relajado que YoonGi estaba por aquel momento. Él era un mundo entero, uno que se encargó de descubrir y aún así parecía que sus maravillas no acababan nunca.

—¿Ocultas más? —preguntó.

Los ojos adormilados lo observaron, JiMin los observó brillar con encanto.

—Um... Tal vez puedas averiguarlo —murmuró, acomodándose de mejor manera —, pero no te apresures, tenemos toda una vida para saberlo.

Y JiMin le dio la razón, tenía toda una vida con YoonGi.

Muy tarde, pero no podía escribir nada la última semana, así que perdón, creo que fue un bloqueo chiquito, pero lo logré uwu

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Muy tarde, pero no podía escribir nada la última semana, así que perdón, creo que fue un bloqueo chiquito, pero lo logré uwu

Ya falta muy poco para que acabe wuuuu

Anygays, espero que se estén cuidando mucho, no salgan de casita por favor.

¡Feliz día de las madres! A sus mamis o a las que son mamás, todas son maravillosas, gracias por su esfuerzo, amor y entrega <3

Intentaré publicar el siguiente capítulo pronto uwu

Los amo, gracias por todo <3

A guide from Park JiMin ﻬ [ j i m s u ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora