VII

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12/05/2019 🗓 Cumpleaños de los mellizos Bonet.
📍Madrid

Me desperté a las once de la mañana por un grito de mi hermano desde la planta de abajo, por que sí, vivíamos en un piso con dos plantas, normalmente solos.

La historia de por qué vivimos solos en un piso tan grande es que el piso es heredado de nuestra abuela por parte de padre y javi y yo vivimos aquí mientras que nuestros padres y Belén mantienen su vida en león y Pedro un poco desperdigado por España, incluso por el mundo a veces.

Bajé desperezandome por las escaleras, con cuidado de no matarme en el intento.

- ¿Qué pasa? — dije en medio de un bostezo mientras me rascaba los ojos.—

- Joer, vaya como duermes. — dio dos toques en el sofá para que me sentara a su lado y le obedecí.— Feliz cumpleaños bella durmiente.

- Feliz cumple iceman. — le di un beso en la mejilla.— Ahora, ¿para qué me despiertas?

- Enserio, ¿por qué te gusta tanto dormir? — me encogi de hombros y esperé a que respondiera la pregunta.— Papá y mamá van a llamar ahora para felicitarnos y además te tienes que arreglar que vienen sergio y nerea a comer.

- Vaya pereza. — muy temprano para que mi cerebro procesará el tener que hacer cosas.—

Javi y yo nos complementamos muy bien, cada uno organizaba al otro en los terrenos que no sabia manejar muy bien. Por ejemplo javi siempre se encarga de que no llegue tarde a los sitios o de que no me levanté a las seis de la tarde, suena como muy niñera pero en otros aspectos la niñera soy yo completamente.

El típico tono de llamada de Skype comenzó a sonar en el salón y le di al botón de descolgar en el portátil de mi hermano que estaba sobre la mesa.

- Feliz cumpleaños mis amores. — escuché decir a nuestra madre nada más la llamada se conectó. —

- Gracias mami. — respondimos los dos a coro, lo que provocó una risa general.—

- Felicidades pesadillas. — dijo Belén, nuestra hermana pequeña.—

- Gracias belu. — era el apodo cariñoso que le habíamos puesto.—

- ¿Pedro? — javi preguntó por nuestro hermano mayor que no estaba conectado en la llamada.—

- Está en Nueva York, estará dormido, os llamará cuando se despierte supongo. — contestó nuestro padre.—

Estuvimos poniéndonos al día y hablando de distintas cosas durante aproximadamente una hora y media, hasta tuve que desayunar en videollamada.

Diez minutos después de haber colgado y que yo por lo menos hubiese subido arriba para peinarme de una manera medio decente y ponerme un chándal sonó el timbre. Supuse que eran Nerea y Sergio porque javi me avisó antes de que venían a comer.

Javi abrió la puerta porque estaba más cerca mientras que yo fui bajando las escaleras.

- Felicidades javi. — dijo sergio mientras le daba un abrazo.—

- Felicidades. — repitió nerea y le dio otro abrazo.—

Terminé de bajar las escaleras y corrí a ellos para darles un abrazo, ¿los había visto hace dos días? Sí; ¿hablábamos por whatsapp todos los días? También. Pero yo soy así.

- Felicidades a ti también enana. — me dijo sergio mientras me revolvía el pelo.—

- ¡No, que me acabo de peinar! — me quejé yo a modo de broma mientras me volvía a poner el pelo más o menos como antes.—

Rojo ; BTADonde viven las historias. Descúbrelo ahora