Escaped...

•Un poco de investigación•

Ya os estaréis pensando cómo tenía tanto dinero para pagar cada noche del hotel. Pues después de lo que pasó en McDonalds Carla me ofreció vivir con ella y pagar las dos cada mes.
Acepté y aquí estoy en nuestra casa tumbada en el sofá aburrida mientras ella estaba con su novio (Mikey) de compras... Pobre chico.
Estaba un buen rato pensando en lo que hacer cuando me vino una idea perfecta. Subí a mi cuarto, cogí mi portátil y empecé a buscar páginas de antepasados para encontrar información sobre mi familia.
Después de unas horas de búsqueda tomé un pequeño descanso. Derrepente alguien tocó a mi puerta, la abrí y enfrente mía había un chico de unos 20 años, alto y moreno con los ojos verdes claros. El tío estaba bueno y no solo de forma normal sino, puede que sea el niño más guapo que haya visto jamás en mi vida.
Se podía distinguir su tableta de nose cuantos bajo su camiseta apretado.
Nose cuánto tiempo me quedé allí mirándole con la bocabierta pero no me importaba porque él también me estaba mirando y de forma sucia. No quería que la batalla de miradas se lleve al cabo más tiempo así que para esconder mis sentimientos instantes por ese dios, me puse borde:
- ¿Qué quieres?
- Ummmm qui...quie...quiero hablar con Taylor Kit.
- Te la presento... Hola soy ella.
- ¿Tú eres Taylor? ¿¡Hija de Sid!?
- Pues sé que me llamoTaylor pero siento decirte que no tengo ni idea de dónde provengo ni de quién. Así que creo que ya tienes tus respuestas. Gracias por visitarme, niño que no conozco. Adi... Empezé a cerrar la puerta pero por desgracia o no por desgracia lo abrió otra vez.
- ¡Espera! Conozco a tu padre y sé dónde se encuentra.
¡¿Esto iba en serio?! ¡¿Podría ser que este extranjero me reuniese con mi padre una vez por fin?! ¿Cómo puedo confiar en este chico? ¡No le conozco de nada, ni me suena su cara!
-¡¿QUÉ?! ¿Vas en serio? ¿Pero si mi padre está muerto como voy a poder verlo?
- Mira Taylor sé que ahora mismo estarás pensando que estoy loco y que no te conozco de nada y todo esto es una broma...
-Corrección, psycópata. Bueno a lo que ibas, sigue.
- Pero yo me acuerdo de ti mas que a nadie. De pequeños éramos mejores amigos y después de que te llevaron al orfanato no nos hemos vuelto a ver. Me dijeron el encargado de tu cuarto que tenias amnesia y saber eso me rompió el corazón. Éramos inseparables y no me podía imaginar viviendo en un mundo sin tí hasta que te fuistes y lo pasé fatal.
Por favor intenta recordarme para solo un segundo, intenta.
Cada día en el orfanato intentaba recordarme de algo pero nunca se me volvió la memoria. Paré de hacerlo hace un año porque por lo veía no funcionaba. Y no estaba dispuesta a volver loca otra vez por un chico que ha salido de la nada.
- Ya he intentado bastantes veces recordar e imaginar mi pasado y no funcionaba. Paré hace un año y no pienso volver a hacerme doler la cabeza sólo para un viejo amigo que ni siquiera conozco. Lo siento.
-Por lo menos déjame entrar.
-Vale, pasa.
Entramos en el salón y nos sentamos en el sofá juntos, sus ojos brillaban con una mezcla de enfado y depresión. Estaba doliendo y me dio pena.
¿Podría intentarlo otra vez solo para él? Nose...
-Vale lo intentaré.
- ¿Qué?
-He dicho que intentaré recordarte pero no prometo nada de cómo salga.
-Hecho, ¡qué bien!
Cerré los ojos y empecé con la escena de la mano sangrando e intenté identificar la cara del misterioso borroso anónimo que salía junto a mí chillando.
Apreté fuerte a los ojos intentando imaginarme alguna escena con eso ojos tan fascinantes que tenía.
Derrepente apareció algo, había expandido la escena, estaba en un bosque tumbada y llorando. Miré hacia el anónimo y su cara se aclaró bastante hasta que pude distinguir un hombre dolido con la mano sangrando dónde por ella atravesaba una bala de una pistola.
Abrí los ojos sabía que el hombre era mi padre. Con lágrimas cayendo, sin darme cuenta, por mis mejillas el niño me agarró de la cintura para ponerme sentada encima suyo abrazándome y susurrando consuelos al oído para hacerme relajar, y debo de admitir que funcionó bastante bien hasta quedarme dormida entre sus brazos encontrando sitio para acomodarme junto a su pecho.
El silenció llenó el salón.

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Lo siento por no escribir estos últimos días, la verdad es que tenía mucho sueños ir que casi son las vacaciones de Navidad y las ideas no me llegaron al cerebro. Este capítulo lo he escrito más largo que lo otros para adelantaros un poco en la historia. Espero que os haya gustado.
Besos💋erintaylorheyy💋