Un Amor Persuasivo ✦ Yoonnie/Yonnie ✦ Adaptación

Capítulo Siete

«No hay nada en la vida que no pueda arreglarse con un poco de helado»
—El Diario de Kelly

Jennie debería haberlo visto venir.

—¿Es que no escuchaste? —le dijo—. Yo trabajo todos los sábados.

—De noche. La fiesta acabará antes de las seis porque por la noche hay un concierto —añadió para convencerla—. Te aseguro que será mucho más divertido que atender mesas.

—¿Tú crees? ¿Estar de pie todo el día sirviendo helados a todo el mundo? ¿De verdad puedes asegurármelo?

Yoongi sonrió.

—Empiezas a dudarlo, se te nota en los ojos.

Era difícil no sonreír también, pero Jennie hizo un esfuerzo.

—No es cierto, pero aunque así fuera, seguiríamos teniendo un problema, no tengo la menor idea de cómo funcionan esas máquinas de helados.

—No es una nave espacial, yo te enseñaré.

El corazón le dio un vuelco. No esperaba que él fuera a ayudarla, eso sí era una tentación.

—¿Quién crees que servía el helado en la fiesta de mi sobrina mientras Ki Bum charlaba con todo el mundo?

—Si te parece tan divertido, Kelly es toda tuya —le tendió la agenda y las llaves—. Que tengas un buen día.

Eso solo hizo que Yoongi sonriera más.

—No hay duda de que Ki Bum y tú son familia.

—Encantada de conocerte, Yoongi, no olvides cerrar la puerta al salir.

—Buen intento, pero no cuela —se cruzó de brazos y se apoyó en la encimera—. Si no quieres hacerlo, tendré que esperar aquí hasta que vuelva tu abuela.

—¡Yoongi!

—O puedo enseñártelo todo ahora, podría darte una vuelta en la camioneta para que la conozcas.

—Eso es chantaje.

—Sabes conducir, ¿verdad?

Se sintió tentada a mentirle y decirle que no, pero ni siquiera tuvo tiempo en hacerlo.

—Me fijé en que tienes un bonito coche en el garaje, y dado que tu abuela no sabe conducir...

—No dije que no supiera conducir, sino que no tiene carné, pero es por culpa de las multas de velocidad. Y no es un coche bonito, es un montón de chatarra inservible, según el mecánico. Lo siento, Yoongi, pero lo que menos necesito es otro vehículo inservible.

—Kelly no es inservible.

—Para mi sí, ¿o me sugieres que me ponga a vender helados cada vez que necesite ir al supermercado?

—¿Por qué no? Yo te compraría cada vez que te viera.

Las palabras salieron de su boca antes de que pudiera evitarlo.

Había algunas mujeres de las que era mejor huir corriendo. Mujeres que aún se ruborizaban, que con solo mirarlas, uno sabía lo que estaban pensando, que aún no habían levantado un muro defensivo alrededor de su corazón. Mujeres que seguían creyendo en el amor, en el matrimonio y en la familia. Si un hombre que no creía en dichas cosas coqueteaba con esa clase de mujer, sabía el riesgo que corría.

Yoongi acababa de traspasar una línea invisible y ambos lo sabían.

Jennie aprovechó el momento para quitarse la cinta que llevaba en el pelo y volver a colocársela con un rápido movimiento. Yoongi deseó impedírselo y decirle que se lo dejara suelto.