Kim Doyoung: Secuestrador.

3

Johnny

Era mi dia libre. Había planeado pasarla con mis hijos, pero debido a los recientes acontecimientos, tendría que entrevistar niñeras todo el día. Yo no comprendía muy bien el problema. Mis hijos estaban relativamente bien cuidados, Jennie era un poco tímida con los extraños, pero generalmente era una dulzura.Jeno era un poco más difícil. Él era protector conmigo y con Jennie, por lo que no le agradaba mucho que cualquier otra persona formará parte de nuestra familia. Las únicas niñeras aprobaba eran lo suficiente mayores como para ser su abuela, o en todo caso que fueran chicos.

Decidí que ambos podían ayudarme a escoger su siguiente niñera. Tal vez de esa manera Jeno no haría que se fueran tan rápido. Dejarlos con una novia ya no era opción. No podía creer que estuviera tan ciego sobre Ji-eun. Debí haber confiado en Ji-hyun cuando dijo que era una perra, pero yo lo atribuí a las hormonas del embarazo.

Estaba de pie en la cocina lavando los platos del almuerzo, cuando mi teléfono sonó. Sonreí cuando vi en identificador de llamadas. Doyoung. Esto iba a ser interesante.

-¿Hola? -respondí con suavidad.

-¿Johnny? 

No era Doyoung -¿Hyuck? ¿Que va mal? -Se escuchaba asustado. 

-Estábamos construyendo la casa del árbol. Él me dijo que no jugara con la pistola, pero no hice caso. Se veía tan genial. Yo no tenia intención de disparle. Papá no es tan bueno con la sangre. Él se desmayó. No sé que hacer. Bajé la pistola de clavos, pero yo...

-Cálmate amigo. Estoy en camino -Pobre chico. Para ser honestos, yo también estaba un poco preocupado. La locura de este hombre estaba empezando a afectarme -¡Jeno! ¡Jennie! Pónganse los zapatos; tenemos que salir! 

Oyendo la urgencia de mi voz llegaron corriendo -¿Qué pasa, papá? -Jeno preguntó.

-Doyoung tuvo un pequeño accidente, así que vamos a ayudarlo -Agarré mis llaves- Vámonos.

Jeno le puso el cinturón a Jennie cuando salimos del garaje -Papá, ¿Doyoung va a estar bien?

-Estoy seguro que así será -Gracias a mis años de construcción, mi propio padre me enseño los cuidados para este tipo de lesiones. Afirmó que con Joohyuk en el equipo, necesitábamos estar preparados para cualquier cosa.

Cuando me detuve donde Doyoung, Hyuck corrió hasta el coche a mi encuentro. Tenía lagrimas en los ojos -Él no ha despertado. Tengo miedo. No era mi intención hacerle daño. 

Tomé el kit de primeros auxilios de la camioneta antes de arrodillarme delante de él y ponerle la mano en el hombro. -Voy a cuidar a Doyoung. Te prometo que estará bien -Él asintió con la cabeza, pero seguía preocupado. -¿Podrías hacerme un favor y llevar a Jeno y a Jennie a tu habitación? A Jennie tampoco le gusta la sangre  

-D-de acuerdo -asintió con la cabeza. Sonrió tristemente a mis hijos y les indico que les siguieran. Escuché que Jeno le decía que estaría bien, que yo lo arreglaría todo.

Encontré a Doyoung tirado en el suelo de la cocina. Por suerte llevaba un casco blanco, así que él no podría haberse hecho mucho daño cuando se cayó. Hice una muesca al ver la sangre de su muslo. Sabía que eso debía doler, él ya había sacado el clavo. Por lo menos no había estado utilizando los clavos grandes. Rápidamente agarré un trapo frió y comencé a secarle la cara y el cuello. Necesitaba tenerlo despierto, y entonces me fijaría en su herida.

Después de un par de minutos, parpadeó abriendo los ojos. Eran de una forma tan bonita. -Buenos días, sol -sonreí, bromeando.

-Agh -Se quejó cuando se dio cuenta que era yo -Dispárame ahora.