IF I FIND YOU [Completa✔️]

Capitulo 23

Todavía no estaba lista para mi cita. Acomode mi falda nuevamente. La noche anterior habiendo discutido el lugar con Jackson vía mensaje.

El cine me parecí una buena elección. Nadie nos interrumpiría esta vez.

No había vuelto hablar con Logan desde que estuve en su casa. Ambos se habían amistado a principio de la semana. Tenía mucha intriga por preguntarle cuál fue la excusa del pelinegro por su comportamiento. Aunque si me fastidiaba no haber residido una explicación de su parte cuando estaba en su cuarto. Me sorprendió el orden que vi en el lugar, estaba encontrarme con ropa por todo el suelo, y ese tipo de cosas, en cambio; las paredes azul marino oscuro combinaban a la perfección con su pequeño escritorio blanco que se encontraba bajo la ventana que daba a la calle principal, su cama hecha, una estantería con libros y cómics dentro de ella, y su decoración era sencilla, pero juvenil: Posters de banda desconocidas para mi y fotos con amigos y familia.

Tengo que dejar de pensar en Logan. No merece darle mucha mas importancia de la que se merece.

Jackson llegó mientras colocaba brillo labial en mis labios. Escuche como hablaba con mis padres en la sala.

―Lamentó que te hayan retenido.

―No hay problema, son muy agradables.

Y si tú eres el chico que me llevará a una cita por supuesto que lo serán. Veía en sus rostro lo entusiasmados con la idea que salga con él. Desde la cena en el restaurante con la familia del Castaño, Peter no paraba de decir que tendría que salir con él, y mi madre no lo contradecía.

En el camino al cine en el auto de mi cita. Nos dejamos llevar por las canciones de la radio.

―Yo invitó las palomitas―ofrece Jackson

En el cine había muchas personas a pesar de ser pasada las ocho; parejas jóvenes, ancianos o familias. Siempre me gusto que se maneja por este tipo de lugares, el olor a palomitas recién hecha será uno de mis favoritos siempre.

―Esta bien, pero debes dejarme pagar la mitad de la cena.

―Tenemos un trato―guiño el ojo.

Mientras mi cita ordenaba vuelvo a recorrer mi vista por el lugar hasta que un chico se me hace muy familiar.

―¿Ese de ahí es Logan?―pregunto una vez que Jackson está junto a mi con el balde de palomitas con extra mantequilla.

―Si, por supuesto que él―note su leve sarcasmo al decirlo―. Ven, la película está por empezar― dijo. Coloca su brazo sobre mis hombros.

Tenía que admitir que se sentía muy bien estar de esta forma con él. Su colonia llegaba con perfección a mis fosas nasales y me resultaba exquisita. Caminamos hasta la puerta de la nuestra sala mientras hablábamos de trivialidades cuando un grito nos hizo darnos vuelta.

―¡Jackie y Jackson!―saluda Logan que se encontraba con una chicas demasiado linda, pero Jackson no hizo más que mirar a Logan fijamente―. Que coincidencia encontrarlo aquí, pensé que su cita fue el viernes.

―Durante la semana te dije que saldría con Jackie el sábado―gruñe entre dientes.

―Demonios, siempre confundo los días. Por cierto, ella es mi hermosa cita de esta noche, Melissa.

―Es un placer―saluda cabizbaja.

Melissa si que era hermosa. Tenía una piel un poco bronceada que yo, un abundando cabello castaño trenzado en espiga de costado, y unos ojos verdes intenso. El tipo de chica con la que Logan saldría.

―Que bueno que los hayamos encontrado, tal vez después de la película podríamos ir comer algo todos juntos.

―Ya teníamos planes―dije―. Además no tenemos tiempo de discutir eso, la película está por comenzar.

―Nosotros también tenemos la misma función.

No quería compartir una sala con el pelinegro. Todavía no se había disculpado conmigo y que actuara de una forma tan agradable me hacia enojar. No permitiré que el me arruine mi cita,otra vez.

Entramos a la sala y la gente ya se encontraba ocupando sus asientos. No fue difíciles encontrar los nuestros, lo malo es que Logan y Melissa estaban justo detrás nosotros.

La película ya estaba por la mitad y sentí como Jackson rodeaba mis hombros lentamente, pero un balde de palomitas fue arrojado hacia nosotros desde la parte de atrás. Ambos miramos a Logan que se disculpó en susurros por sus "dedos de mantequilla".

Cuando la película terminó salimos rápido de la sala de cine. Moria de hambre, y habíamos acordado cenar antes de volver a mi casa.

―¡Oigan!, ¿Que les parece si vamos a cenar todos juntos?―pregunto Logan.

Mi mente intentaba crear una excusa, pero nada se me ocurría.

―No creo que Melissa este de acuerdo―dice Jackson.

Los tres miramos hacia la cita de Logan, quien no hablo mucho durante la película.

―Por mi, no hay problema.

Un tierno hoyuelo se marcó en su mejilla.

―Genial―dije sin ánimos.

Los cuatros empezamos a caminar en dirección en la calle principal. Muchos restaurantes tenían sus sillas vacías sobre las veredas. Luego de caminar dos calles en silencio éntralos a un restaurante con estilo de los años cincuenta.

Estábamos enfrentados; ellos por un lado y nosotros por otro. Ninguno tenía intenciones de hablar, ya que Jackson tenía la mirada fija en Logan.

―¿Qué les pareció la película?―pregunto Melissa.

La tensión se aligeró un poco mientras compartíamos nuestras distintas opiniones.

Las hamburguesas que pedimos en un principio habían desapareciado. Era el fin de la noche, y se supone que cada uno se iría con sus respectivas parejas.

Al final tendría un momento a solas con Jackson.

―Oye, Jackie ¿Quieres que te llevemos a tu casa?, nos queda de paso―informó Logan.

Voy a matarlo. ¿Qué le hice que me haga esto?

―Yo la traje, yo la llevo―el castaño entrelazó nuestras manos―. Nos vemos en la escuela.

El camino de regreso a casa cada uno fue sumergido en sus pensamientos.

―Bueno, aquí estamos.

El auto paro justo frente a mi hogar donde todas las luces ya estaban apagadas. La música de la radio seguía sonado.

¿Lo beso o espero a que él me dé algún indicio?

―Lamentó que esta noche también fuera un fracaso―se inclinó contra el volante―. De verdad, quería que la pasaras bien.

―Tranquilo, no estuvo tan mal.

―Supongo que esta debe entrar en tu lista de peores citas.

―No te creas tan importante. Debe estar en el puesto cinco―dije.

Y no mentía. Durante mi vida había tenido citas peores a estas.

―Espero poder hacer algo para mejorar la noche.

Su cara ya no estaba contra el volante. Él estaba cada vez más cerca de mi.

―Yo también espero que lo hagas―dije en voz baja.

Y de pronto, uno de los chico más lindo de la escuela estaba besándome.
El problema es que no se siente tan mágico como imagine.