Virtual Soul (Haikyuu!!)

II

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I want to win, but I can't see.

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Bokuto abre los ojos con la dificultad, la cabeza de las mil vueltas, se siente como la peor respuesta que alguna vez haya vivido (o le faltaba por vivir), ¿De este modo se siente cuando hay morías dentro del simulador? Había olvidado por completo como era. De repente se siente la pena por los pobres.

Logra enfocar su mirada hasta la figura similar de su compañero. Puede notarse la mirada sombría de Kuroo mirar la pantalla de su cabina. Esta vez no son ellos los que se encuentran en el podio, habían perdido. Los resultados se convirtieron en su propia táctica que solía tener, prácticamente una cucharada de su propia medicina. Caray, incluso al pensarlo sonaba tan raro. La multitudegua a los vencedores, como a las primeras veces.

- ¡Ante la sorpresa del público, los ganadores en esta ocasión son "las sombras de la luna"! —Akane presenta con entusiasmo, la pantalla enfoca a aquel par, con ese nombre inusual.

El libro de azabache es la presentación de la lucha contra Kotarou. Un lado de su imagen se puede leer su información como jugador:

Akaashi Keiji, 26 años, nivel 62: Jugador No. 1 de la División Asiática.

Claro, al derrotar a los campeones anteriores, su rango dentro del juego subió por encima de ellos, ahora, Kuroo sería el número 4, demonios, ni siquiera entra en los primeros pasos de ese modo.

Por otro lado, en la parte superior de su rostro, en el cuello alto, las raíces oscuras de su cabello. Una mirada calmada y dorada parece casi brillar aún a través de la pantalla. No parece reaccionar ante el público o regocijarse en la gloria de la victoria, más bien.

Kozume Kenma, (?) Años, nivel (?): Jugador No 2 de la División Asiática.

Aquella falta de información en la pantalla llama la atención de Kuroo, para que ocultar esa información fuera opcional, el jugador debería ser menor de edad, dios, ¡debía ser una maldita broma! ¡Ellos son menores! Su orgullo ha sido herido en gran parte.

—Lo siento hermano, hemos perdido por mi culpa, me confié demasiado—, comenta Kotarou en un tono inusualmente decaído.

Kuroo mira de reojo a su compañero, su expresión se relaja y suelta un suspiro frustrado. —Somos equipo, Bo, los dos nos confiamos demasiado —, menciona dejándose caer en el mullido asiento —, no noté la presencia del otro, en verdad, fue como si no estuviera ahí, hasta que apareció para dispararme. —intentando recordar algo que lo condujera a un indicio de los movimientos ajenos, mira sus propias manos, como si entre sus huellas se encontrará la respuesta. Pero sus huellas ni siquiera son digitalizadas en ese mundo.

—Akaashi tiene un alto nivel, lo cual le dio mucha ventaja al tener mejores objetos, quizá Kenma tenga algo que le permita ocultarse así de bien, me gustaría saber en qué nivel podré...

—Alto ahí vaquero —, repasa Tetsurou con las palmas extendidas —, no los llames por sus nombres.

— ¿Por qué no? —pregunta con genuina curiosidad, Kuroo rueda los ojos y se deja vencer, no tenía caso iniciar ese tipo de discusiones con Bokuto Kotarou. Sobre todo cuando era evidente que alguien había llamado su atención. Y no era una atención únicamente por sus habilidades, como había logrado captar en el momento en que le vio esa cara de satisfacción al pelear con el otro. Nunca entendería del todo los gustos de su amigo, sobre todo cuando su primer flechazo conocido es alguien que le dio una paliza.