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129cm De Maldad

"Preocupación e invasión"

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Hace más de una semana no veía la presencia de la detestable Chae-Young

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Hace más de una semana no veía la presencia de la detestable Chae-Young.

Mina iba a la terraza inmensa de su colegio y se iba a las barandas para observar el patio detenidamente. Podía ver decenas de figuras pequeñas, pero no a la tonta Son.

No era algo que le preocupe —O quizás sí— pero le parecía demasiado raro no ver a la diminuta por esos lugares. A decir verdad, a Myoui se le hacía aburrido los días sin molestarla. Si bien tenía a otros para hacerles la vida imposible, Mina solo quería verle el rostro a la de siete años y darle algún empujón, o sacarle la lengua... ¡Quería hacerle algo!, ¡Al menos sacarle el dedo del medio! Aunque todavía no entendía el por qué deseaba hacérselo a ella solamente. Era tan raro lo que le pasaba, que no se sentía normal.

De repente, mientras miraba desde arriba el panorama, sintió cómo alguien se le sumó.

— Si no quieres que te parta la cara, apártate. — Le dijo, sabiendo perfectamente quién era.

Ho-Seok; Ese niño con una sonrisa estúpida para Mina. Sabía que era él sin ni siquiera mirarlo, porque si bien ya fue humillado por la de 129cm, es el único que se atreve a desafiarla. Y no, no a golpes, sino, invadiendo su espacio. Algo que a Myoui no le daba ni una pizca de gracia.

— ¿Qué miras?, ¿A tu próxima víctima? — Bromeó al respecto, pero la niña ni siquiera le prestó atención. — Mina, hoy te veo muy... tranquila. No escuché a nadie llorar por tu culpa.

— El que va a llorar si sigues molestando, eres tú. — Esta vez, le fulminó con la mirada. El chico solo tragó en seco, pero siguió en la misma posición. Otros ya se hubieran ido corriendo o hecho pis encima... El joven Ho-Seok era muy valiente. Aun así, Mina decidió darle una oportunidad de dejarlo intacto si tan solo él respondiera una sencilla pregunta. —: ¿Qué le pasó a la lesbiana?

— ¿Chae? Umh, no lo sé... No viene hace una semana.

— ¿Por qué?

— No lo sé. — Repitió. — ¿Por qué preguntas por ella?, ¿Ahora es tu amiga?

— No. Pero tengo ganas de molestarla.

Rió. — Los que se pelean, se aman.

¿Qué era lo que acababa de escuchar? Chasqueó la lengua y lo miró fijo. — Tienes cinco segundos para irte antes de que te golpeé por decir esa estupidez. — El joven al escuchar la amenaza, sonrió. Siguió sin moverse del lugar y acomodó sus manos en los bolsillos de su pantalón del uniforme. Al notar aquel acto, a Mina no le quedó otra que empezar el conteo. —: Uno... Dos... Tres...

— Cuatro... Cinco... — Terminó por decir.

A la chica se le agotó la paciencia, ¿Acaso se comió un payaso? Se acercó al muchachito travieso, con una mirada que a cualquiera le podría dar miedo. Agarró bruscamente del uniforme al niño y le dijo desafiante. —: Ve y pregúntales a tus amigos idiotas que es lo que pasó con la lesbiana. Si no lo haces, juro que te mataré.

— ¿Por qué tú no lo haces? — Le contestó con una sonrisa radiante, a pesar de estar en las garras del dragón. — ¿Acaso tienes vergüenza?

Se cansó. Cerró su puño y atacó en el estómago del jovencito, haciendo que este se tirara al suelo al instante ante el impacto doloroso.

Se agachó para estar a la altura de Ho-Seok, quién seguía tumbado en el suelo. — Si no quieres otro golpe, ve y hazme caso. — Le musitó. La chica rebelde al levantarse miró a su alrededores, donde tendría decenas de miradas clavadas en ella. — ¿Y ustedes qué?, ¡¿También quieren un golpe?! — Gritó, haciendo que las miradas fueran a otras direcciones.

"Tiene fiebre" Se escuchó por detrás. Carcajeó al oír esa voz chillona e irritante. Se dio vuelta, encontrándose con Sana. Ésta se acercó más a Mina. Se ve que oyó toda la conversación que tuvo con Ho-Seok. — Mi hermano fue ayer a visitarla.

— Bien. Mejor así. — Sonrió, haciendo que a Sana le salga una mueca de desagrado. — Y tú... — Señaló al niño. — La próxima que me invadas, volverás a tu hogar en silla de ruedas.

"Vamos Hobi, levántate" Escuchaba que le decía la detestable Sana al sonriente, mientras se iba marchando del lugar.

"Vamos Hobi, levántate" Escuchaba que le decía la detestable Sana al sonriente, mientras se iba marchando del lugar

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129cm De Maldad || MiChaeng [Saga: Centímetros]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora