Tʜᴇ ʟᴀᴅᴅᴇʀ ʙᴏʏ ➳ 𝗠𝗝𝗶𝗻

18

–¡Hyung! ¡Despierta, ya son las diez de la mañana!– SanHa se tiró sobre él.

MJ aún medio dormido sonrió y abrazó a su primo.

–Es demasiado temprano SanHa, duerme un poco con tu primo favorito– apretó al menor entre sus brazos.

–¡Que no! Debemos hacer las compras, hyung tonto– rió.

EunWoo entró a la habitación, viendo la graciosa escena.

–DongMin hyung, ayúdame a sacarlo de la cama.

El mayor asintió, pero lo único que hizo fue tirarse sobre ellos.

–¡Hyung! No estás ayudando– se quejó el menor mientras reía.

–Bien... ¡Hyung, levántate! Debemos hacer las compras semanales– EunWoo nalgueó al mayor.

–Está bien... Ya voy, solo denme cinco minutos.

–Solo cinco minutos– SanHa salió riendo por la puerta, y EunWoo le dió un beso en la mejilla al mayor.

–¡Ew! Ya vete– MJ pataleó y el menor solo estalló en carcajadas.

–Levántate ahora– ordenó y se fué hacia la cocina.

El día de MyungJoon comenzó tranquilo.
Desayunó cereales con leche junto a su primo y mejor amigo, se duchó y vistió para salir de compras.

Estaba felíz.

En el supermercado se encontraron con Bin, quien se sorprendió al verlos.

–¿Cariño? ¿Qué haces aquí?– como siempre, ambos se saludaron con un intercambio de saliva muy asqueroso.

–Hoy es el día de la compra semanal ¿Qué haces tú aquí? ¿Miras al chico de la caja registradora?– el pelinegro pellizcó la mejilla de su novio.

–Mh... No es mi estilo– se burló de su mayor– En realidad, JinJin hyung me mandó a comprar unos chicles, de esos que ayudan a dejar de fumar.

MJ sonrió avergonzado.
Hacía un mes de que habían jugado aquél ridículo juego, no salían, no eran novios ni nada, pero se veían en las escaleras traseras de su edificio todos los días, y aveces se besaban.

JinWoo había dejado de fumar, decía que no quería que él sintiera su gusto a cigarro, ni su olor.
Había empezado otra vez sus clases de baile, e iba al gimnasio más seguido, y Moon le había contado que todo era para mantener su físico y seguir siendo atractivo para él.
MyungJoon solo podía sentirse cada vez más enamorado de él.
JinJin realmente daba lo mejor de si... Pero aún así, ninguno daba el siguiente paso.

–Realmente le afectaste, MJ hyung– dijo MoonBin y los menores comenzaron a burlarse.

–Ya, tontos– el mayor se encontraba sonrojado.

–¿Sabes? No sé si JinJin te lo dijo, pero vamos a presentarnos con nuestra clase de baile en un evento en Itaewon... Oh mierda, me había dicho que no te lo diga– el menor tapó su boca– Dijo que estaría demasiado nervioso si vas tú.

–Oh, nervioso– se burló SanHa.

–¿Qué? No me importa, por supuesto que iré... Tonto JinWoo, no me dijo nada– se quejó con un puchero el mayor de todos.

–Bueno, pero no le digas que te lo dije yo, o va a matarme– rió MoonBin.

...

–JinWoo– sonrió mientras bajaba hasta el primer escalón de las escaleras y se sentaba junto al menor.

–Hyung, hey...– JinJin suspiró al verlo.

Su plática fue tranquila, igual que todos los días, se contaban lo que habían echo durante la mañana y la tarde, se coqueteaban un poco y luego cada uno volvía a su labor.

–¿Qué les dijo MoonBin cuando estaban en el súper?– JinWoo se oía alarmado.

–Uh... Él... Dijo que... Uhm...– MJ era malo para mentir, demasiado– Bien, me dijo que participarán en un evento... De bailarines, pero él no quería decírmelo, solo se le olvidó que no debía hacerlo.

JinWoo se había sonrojado hasta las orejas, mientras rascaba el pelo de su nuca. 

–Que vergüenza...– fue lo único que pudo decir.

–¿Vergüenza? Oye, ¿No ibas a decírmelo? Creí que serías más sincero conmigo, tonto– regañó el MJ al menor– JinWoo, se que quizás no quieras que vaya, pero si me lo permites, iré... Realmente quiero verte bailar– MyungJoon hizo un leve puchero.

El menor vió las mejillas sonrojadas del mayor. Sonrió un poco.

Se acercó lentamente hasta dejar un pequeño besito en su tierno puchero, luego mordió su labio y finalmente, lo besó.

Tomó suavemente la nuca de MyungJoon, acariciándolo.

–Joder hyung, claro que puedes ir, me pondré demasiado nervioso, pero estaré bien... Ven, quiero que me veas bailar.

MJ sonrió levemente y volvió a besar al menor.

Hablaron un poco más, se besaron otra vez y JinWoo tuvo que irse.

Mientras MyungJoon subía por el ascensor, suspiraba y sonreía, emocionado.
Estos días se sentía tan malditamente felíz.

Quizás debía pedirle a JinWoo ser su novio, oficialmente...

No era mala idea ¿Verdad?

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