Empatía [ZhuiLing]

I

Segunda parte de la serie "Almas perdidas" (2/?)
Cada parte puede leerse independientemente de la otra.

SOLO HAY 2 PARTES DE MOMENTO.
La primera: "Si tu alma se encuentra por ahí".

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Empatía
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—¿Quieres aprender a usar empatía ? —Wei WuXian tiene que repetirlo para asegurarse de no haber oído mal. 

Jin Ling le hace un gesto para que baje la voz, están en el muelle de loto y el joven parece no querer que nadie los oiga, después de todo, tras el incidente con Jin GuangYao, estaba a solo unos días de ser reconocido como líder de la secta Jin y parecía que todos lo vigilaban de cerca. Las paredes tienen ojos y las puertas oídos.

Hoy, pasaba unos días en el muelle de loto antes de volver a la torre Koi para su ascenso, entrenaba unos últimos días con su tío Jiang Cheng cuando Wei WuXian llegó de visita bajo la excusa de querer entrenar a su sobrino también. Pero definitivamente, no se esperaba de que entre todas las personas, fuera él quien le pidiera aprender una técnica de sus artes demoníacas. Aunque ya no era mal visto, seguía siendo blanco de interminables críticas por sectas aún resentidas, después de todo, la gente jamás dejaría de hablar, aunque no sepa absolutamente nada. 

—¿Vas a enseñarme o no? —se apresura el más joven, algo frustrado. Parece que se está forzando a sí mismo a esto, y Wei WuXian sabe que debe haber una razón. 

—¿Con qué espíritu te quieres contactar? ¿Has pensado en pedirle ayuda a Sizhui? Estoy seguro que te ayudaría sin necesidad de preguntarte por qué —, señala él, las habilidades de su hijo eran buenas cuando se trataba con la comunicación con espíritus después de todo, además de que se encontraba cerca de la Zona en una cacería nocturna, por lo que no sería un problema. Sin embargo, Jin Ling frunce el ceño, haciendo un pequeño puchero.

—No puedo pedirle favores a A-Yuan todo el tiempo, pronto seré el líder de la secta Jin, solicitar ayuda de la secta Lan me haría perder cara desde un inicio—, se cruza de brazos. Wei WuXian deja pasar por ahora que al parecer ellos se llaman tan familiarmente, después de todo, Lan Sizhui era una persona que dejaría que hasta el general fantasma lo llamara así, aún sin conocer su relación con él. 

—No le estás pidiendo un compromiso político, —Suspira rendido— ¿A qué espíritu quieres convocar? —pregunta, para sopesar un poco más sobre la situación. Si Jiang Cheng lo atrapa enseñándole algo así a su sobrino, esta vez lo azotará sin piedad alguna. 

Jin Ling baja la mirada, algo reacio a contestar, pero sabe que está es su única opción para que Wei WuXian acepte ayudarle. En el último año, Jin Ling ha madurado muchísimo tras tener que comenzar a cargar con la destrozada imagen de su clan, y aunque no estaba solo en ello, simplemente era demasiado para cualquier chico de su edad. 

—Hay un espíritu en la torre Koi —comienza a hablar, apretando un poco el mango de su espada, de la espada de su padre —, siento que quiere decirme algo, porque siempre se aparece en mi habitación por las noches, pero no detecto ninguna intención maligna en él. 

Wei WuXian le cree, además de la percepción de cultivador de Jin Ling, el cascabel que siempre carga con él no permitiría que ningún ser maligno se le acercará. Él mismo lo había hecho, aún después de años, estaba seguro de que seguía protegiéndolo de cosas menores. 

—¿Trata de decirte algo? —Piensa un poco más en ello. Si tuviera que usar empatía, no quisiera exponer a Jin Ling a que algo saliera mal. Pero parecía fuera de discusión, él quería experimentarlo directamente. Es tan terco que Wei WuXian no tiene la menor duda de que si él no lo ayuda, buscará una manera más arriesgada —, bien, pero yo seré tu mediador. 

Jin Ling asiente con entusiasmo. Wei Ying no sabe qué pensar, ¿Qué clase de espíritu pasaría desapercibido en una secta llena de cultivadores, y se manifestaría a Jin Ling unos días antes de su ascenso a líder de la secta? Tenía que descartar toda posibilidad, y para ello, tenía que seguirle el juego a su sobrino. 

Jiang Cheng es perceptivo, cuando Wei WuXian dice que acompañará a Jin Rulan a la torre Koi no tiene un buen presentimiento, pero lo deja pasar porque ha decidido confiar un poco más en Wei Ying.  

Cuando llegan, Jin Ling lo guía a una habitación amplia, donde se encuentra una cama igual de grande y varias cosas que, observa, se ven de mucho valor, una puerta lleva a un pequeño armario al lado de la cama. Es un poco extraño, no parece una habitación propia de un joven. 

—Joven maestro Jin, ¿Es aquí donde el espíritu se ha presentado? —Es Lan Sizhui, hablándole con ese excesivo respeto típico de los Lan. 

—Sí —, dice con recelo —, te dije que no quería ayuda de Lan Sizhui —, esta vez se dirige a Wei WuXian, y este quiere ignorar nuevamente que frente a Shizui, Jin Ling parece perder la calidez con la que lo nombra cuando no está. Es raro, Sizhui no flaquea en su sonrisa hacía el otro y Wei WuXian no tiene intención de averiguar sobre sus problemas de adolescentes. 

—Antes de tomar una acción tan arriesgada, debería asegurarse de que es lo que quiere el espíritu, trataré de tocar Inquiry para él —, explica con suma paciencia. 

Jin Ling frunce el ceño, murmurando algo como "No es malvado, de todos modos" o algo así, como si quisiera restarle la preocupación al joven discípulo de GusuLan. 

Hay algo en la mirada de Sizhui que hace que Wei WuXian se sienta incómodo de estar ahí, o tal vez es la manera en la que las orejas de Jin Ling se tornan rojas, o el ambiente tenso entre ambos. Pero Wei Ying puede decir que definitivamente ha pasado algo. Si bien, no quiere meterse en asuntos de otros, ese ambiente lo incomodaba tanto como lo intrigaba. 

Cuando Sizhui pasa al cuarto de Jin Ling encaja perfectamente con el lugar, tal como si supiera dónde está parado, busca un lugar adecuado para acomodar su guqin entre sus piernas y alistar las tensas cuerdas. 

Sizhui mira por el rabillo del ojo al futuro líder de la secta Jin, baja sus pestañas y comienza a tocar. Extraño, Wei WuXian juraría que los dedos de A-Yuan están temblando, pero no entiende por qué.

Y de nuevo, siente que se ha perdido otros 13 años más.