*poner canción* 10 de mayo de 1934, ese fue el día de mi muerte ¿iría al cielo o al infierno después de todo lo que hice? El amor no es un pecado, pero amarlo a él de la forma que lo hacía si lo fue. Mi madre siempre quiso que me casara con un hombre adinerado lleno de propiedades así como ella lo hizo con mi padre y como lo hicieron mis hermanas, pero yo no, yo me enamoré de un locutor. Café, un hermoso café, de ese color eran sus ojos, más hermosos que él café de las hojas de los árboles en otoño, su cabello era tan sedoso como los guantes de seda que yo usaba, incluso más. Usaba unos lentes que reflejaba sus hermosos ojos. Contaba unos chistes que te hacía carcajear hasta que te doliera el estómago. Hacia un platillo de jambalaya muy delicioso, jamás dejaba que cambiaras la receta de su madre . mi Alastor.....nos veremos después
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