Un mundo de sombras ©

Asedio, segunda parte.

Karen -Está bien.

Jeicko -Una cosa más, si encuentras cualquier arma asegúrate de recogerla.
Ya que estarás ahí, revisa todo lo que puedas y lo más mínimo que encuentres relacionado con este mundo guárdalo. Pero sin decirle nada a Matt y efectivamente sin quitarle los ojos de encima.

Karen -Aún así ten mucho cuidado por favor. Y si crees que te estás poniendo en un peligro innecesario solo escapa.

Jeicko -Descuida que no tengo planeado morir aquí sin antes ver a mi familia una vez más.

Matt -Ey, ya casi es hora de partir.

-Okay, le respondí mientras le di una mirada a Karen queriéndole decir que todo saldría bien.
Recogimos lo poco que teníamos y partimos a nuestro primer intento improvisado para salir de este mundo desesperante.

Mientras más nos acercábamos a aquella casa más escalofríos sentía, ya no sabía distinguir si era por el echo de pensar que podía morir en ese lugar o por sobrevivir y que el plan fracasara. Y definitivamente no quería ninguna de las dos, sentía como los huesos me temblaban y ese frío intenso me subía por el cuerpo.

No me atreví a decir nada para que no se preocuparan y abandonaran el plan, le di un vistazo a Karen y se veía igual de preocupada que yo, el único que mantenía su expresión imparcial era Matt, no sabía si era por haber pertenecido al ejército o porque sabía que todo saldría bien.

Pero aún así no podía estar preocupado y sobretodo asustado, nos dirigimos directamente hacia la casa evitando que una de esas cosas nos agarre desprevenidos.

Jeicko -Creó que a esta distancia estamos bien, escóndanse aquí y una vez que vean salir las sombras detrás de mi entren, no se pongan a desperdiciar tiempo.

Karen -Está bien.

Bien aquí voy; dije mientras Karen me sostuvo por el brazo y con una mirada triste me dijo: "Ten mucho cuidado por favor"

Me acerqué sin hacer ruido hasta la casa, entre lo más silencioso que pude y mientras más entraba más sangre se veía por todas partes, seguí avanzando hasta que vi un cuarto que por algún motivo estaba iluminado y atravesé de la puerta pude ver por lo menos a 6 de esas cosas, no sabía que hacer así que azote la puerta para que esas cosas reaccionaran y me siguieran.

Inmediatamente lo hice vi como esas cosas posaron sus ojos sobre mi. Unos ojos blancos como la nieve y sin vida, podía sentir que estaba viendo el interior de un cilindro recubierto con una pintura blanca y darme cuenta que en el fondo no había nada, solo un inmenso y blanco vacío.

No lo pensé dos veces para darme la vuelta y emprender la huida, una vez salí por la puerta grite; ¡son 6!
En señal de que cuando los vieran salir a todos entrarán.

Se que no podían responder ya que si lo hacían anunciarían su posición, pero quería asegurarme de que todo estuviera despejado para ellos.

Di un corto vistazo hacia atrás y pude notar que venían todos detrás de mi.
Doble en la primera esquina que apareció en frente de mi para que saliéramos del campo de visión de los demás, y así poder dejarle el camino libre a Matt y Karen. Una vez que todas las sombras doblaron detrás de mi supe que tendríamos una oportunidad.

Karen -Ya son todos, deberíamos entrar ahora.

Matt -Esperemos un poco más, quizás quede otra de esas cosas por ahí.