1// 𝘕𝘶𝘦𝘷𝘢 𝘠𝘰𝘳𝘬

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Tenía miedo, todo a mi alrededor era inmenso, las calles, la saturación de gente a mi alrededor, comparado con mi pequeña ciudad donde vivía antes, Nueva York me parecía una ciudad imponente.

Estaba de vuelta.

Ahora, definitivamente, sin nadie.

Los dos primeros semestres lo había pasado con mi tía, un amor de persona que se había encargado de guiarme por este tiempo en mis estudios hacía la música y el arte pero finalmente era hora de estar completamente sola. Independiente.

Y era increíble que estuve mis primeros 9 meses aquí y no haya salido a ningún otro lado más que a tiendas departamentales y hacer las compras junto con ella, todo se lo dejaba a ella, y todo era con ella, pagos de rentas, ir por comida para la semana, lavandería, todo lo que tuviera que ver con salir de casa y compromisos externos.

Quizás estoy siendo muy histérica y debería calmarme, pero aún siento miedo por la vida adulta, sin familia y ningún conocido aquí.

Tenía miedo, sin duda, pero aquí estoy, siguiendo mis sueños.

"Ay Sora ¿Ya querías esto no? Ya querías independizarte, ahora aguántate", me dije a mí misma.

Me sentía deprimida, había llegado hace 3 días y estos tres días la había pasado tirada en esa alfombra, llorando sin parar, día y noche, tres días seguidos, mis ojos ardían y no tenía ganas ni de mirarme al espejo.

Tuve que tomar un poco de voluntad, no podía estar envuelta en depresión estas tres semanas antes de entrar a clase. Me levanté del suelo cubierto con mi alfombra suave, la que solía ser de mi tía antes de que me dejara continuar con mi vida.

Comenzaría el tercer semestre de la carrera de arte y música, a pesar de todo lo que pasaba dentro de mí había una pequeña luz, los primeros dos semestres había conocido personas, amigos con los que me llevo muy bien y estoy feliz de haberlos conocido.
Varios estaban comenzando en proyectos musicales, otros simplemente estaban estudiando y trabajando al mismo tiempo, quería verlos de nuevo, estaba de vuelta después de 2 meses de estar en casa de mis padres analizando si había sido buena decisión irme a la ciudad, después de todo sentía que ahora estar estudiando en esta Universidad no valdría la pena sin la única persona que realmente me había ayudado con este sueño.

-A la mierda todo, voy a salir.-

Me miré al espejo, era un completo y horrible desastre, llegué a Nueva York hace tres días y no había sido capaz de darme un baño, llegar al departamento completamente sola me deprimía, y más pensando que toda mi vida estaba acompañada de alguien, ya sea mis padres o los amigos que dejé allá.

Me dí un baño, busqué entre todo el closet, tomé una blusa de seda negra de tirantes, jeans altos negros con una cadena y mis Martens, despeiné un poco mi cabello lacio, apliqué corrector debajo de mis ojos, máscara de pestañas y mi labial rojo en mis labios.

-Llaves, dinero, más dinero por si acaso... Ya está.-
Salí del departamento bajando las escaleras, tenía energía y decidí adentrarme a las calles por donde vivía, algo que jamás había hecho antes porque no lo necesitaba, estaba ocupada ensayando mi música o sólo pintando.
Todo era un caos, un hermoso caos.

Era el lugar donde siempre había querido estar, donde soñaba estudiar, vivir, cómo era posible que regresara a donde antes, donde la gente tenía la mentalidad cerrada, hueca, donde criticaban mis metas, mi forma de vestir, mis gustos musicales, donde siempre tenían que callarme cuando practicaba en mi guitarra, en mi bajo o en el ukulele.
Siempre era lo mismo, la rara del puto pueblo. Estaba cansada realmente de todo eso, ahora estoy aquí, finalmente, luché tanto para esto. Después de pensarlo, sonreí sutilmente mirando hacia el frente.

𝖗𝖔𝖔𝖒 𝖔𝖓 𝖋𝖎𝖗𝖊 // Julian Casablancas [𝘌𝘥𝘪𝘵𝘢𝘯𝘥𝘰]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora