01. Picnic

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Era un día de invierno, el cielo estaba gris pues había bastantes nubes y se podía sentir el aire frío que había en la ciudad de Seúl.

Aquel sábado, Chan y Jeongin habían decidido que se juntarían por su segundo aniversario. El menor comenzó a arreglarse antes de la hora en la que Chan lo había citado.

Se duchó y al salir, colocó una toalla alrededor de su cintura mientras buscaba la ropa que usaría. Cuando decidió lo que portaría, se dirigió al tocador, cepilló su cabello, acomodándolo un poco y lo planchó. Incluso se echó un poco de aquella colonia que sabía que le encantaba a su novio.

Poco tiempo después, la puerta principal de su casa fue tocada tres veces y corrió escaleras abajo pues sabía que era su novio.

— ¡Ya me voy, mamá! — gritó mientras corría y se detuvo antes de abrir la puerta, calmando su respiración y arreglando su cabello frente al espejo de cuerpo completo que se encontraba a un lado de aquel pedazo de madera.

La señora Yang se despidió alzando la voz también para que su hijo pudiese escucharlo desde la cocina. Finalmente abrió la puerta, encontrándose con Chan, pasando su mirada por todo el cuerpo ajeno.

Jeongin no tenía idea de cómo había terminado saliendo junto a aquel hombre tan atractivo que se encontraba parado en su puerta. Chan era ése chico por el que muchas personas suspiran, que los tenía comiendo de la palma de su mano. Incluso a donde fueran, al menos había una persona que le coqueteaba o que mantenía su mirada fija en él.

Sin embargo, Jeongin había ganado la lotería. Hasta el día de hoy, no lograba entender la razón por la que el chico de cabellera rosa se encontraba saliendo con alguien como Jeongin. Aunque él jamás se consideró feo, no tenía baja autoestima pero tampoco creía que era demasiado guapo, sin embargo creía que había chicos más lindos que él con quien Chan pudiese salir.

— ¿Qué te pasa? — habló su novio en tono de burla, sacándolo de sus pensamientos — ¿Te comió la lengua el gato?

Jeongin movió la cabeza ligeramente sacudiendo esta y rodeó los ojos divertido, cerrando la puerta de su casa detrás de él — No seas bobo. Me preguntaba cómo terminé saliendo con alguien tan lindo como tú.

Chan soltó una carcajada — Eres muy bonito, cariño. Solamente pasó, además ¿cómo no enamorarme de ti si eres tan lindo?

Jeongin no supo qué decir, sintió como sus mejillas comenzaban a calentarse. Le pareció muy tierno de parte de su novio que lo consolara de ésa manera.

Chan tomó su mano, entrelazando sus dedos, comenzando a caminar hacia la parada de autobuses pues irían a un parque para tener un picnic.

Al llegar a la parada esperaron el bus que debía llevarlos a su destino, que no tardó demasiado a decir verdad, tomó unos minutos para que llegara y en seguida se subieron, pasaron las tarjetas en la máquina y se dirigieron al fondo para estar más juntos sin soltarse de las manos. El trayecto al parque no duró mucho, pues al cabo de unos minutos llegaron a su destino. Se levantaron de sus asientos y apretaron aquel botón para avisarle al chófer que debían bajar.

Tuvieron que caminar otro poco, aunque decidieron que entrarían a una tienda de conveniencia que quedaba cerca para comprar algo de comida, bebidas y un par de snacks. Cuando terminaron de comprar todo, se dirigieron al parque y se sentaron debajo de un enorme árbol que les brindaba sombra.

No había muchas personas, por lo que ambos jóvenes estaban felices debido a aquello, eso les daba más privacidad para poder estar más cerca y robarle un rápido pero tierno beso al otro sin que los molestaran.

Pronto comenzaron a comer, manteniendo una pequeña conversación de vez en cuando, soltando leves risas debido a alguna broma que hacían.

— Channie, — empezó Jeongin en voz baja, a lo que el aludido hizo un pequeño sonido con la garganta para que procediera — ¿no crees que llevamos bastante tiempo juntos?

— Es verdad, Innie — el mayor estuvo de acuerdo con su novio asintiendo, pues llevaban dos años juntos.

— ¿Y cuándo tendremos sexo? — soltó el menor, sin un pelo en la lengua.

En seguida Chan comenzó a toser exageradamente debido a la pregunta ya que no era una pregunta que esperaba que le hiciera.

Jeongin, en seguida, al ver que su novio tosía comenzó a darle pequeñas palmadas en su espalda para que se le pasara, preocupado por él.

Cuando el mayor finalmente se había recuperado, habló: — No lo sé, Innie. No creo que estés listo para eso todavía.

El menor frunció el ceño notablemente, molesto con la respuesta de su novio.

Él estaba listo para tener sexo con su novio y se lo iba a demostrar.

still a baby ✧.* chaninDonde viven las historias. Descúbrelo ahora