Parte 1: la mordida

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El policía se sentó sobre su rodilla derecha para estar a la altura de mi cara.
-Hola Leo, donde has estado durante estos cinco días?- preguntó el policía mirándome a los ojos.
Yo directamente no le contesté, para qué? Total no me va a creer.
-Leo?? No nos vas a contestar?- Me preguntó de nuevo.
Se me ocurrió mentirle, pero sabía que si en algún momento tendría que decirle la verdad, porque no ahora?
Total, solo tengo 9 años, y si no me creen no me meterán en un psiquiátrico porque "todo ha sido producto de mi imaginación".
-Vale-dije -Lo que voy ha decirles es verdad pero si no me creen es su problema, entendido?.
Se miraron entre ellos y asintieron.Cogí una de las sillas que estaban dispersas por el suelo y me senté.
-Sentaos, es una larga historia.

Yo estaba en mi lugar favorito, la pizzería Freddy's Fazbear. Tenía una característica muy singular; los camareros y los animadores eran unos robots llamados animatronics. Mi favorito se llamaba Foxy. Era un zorro pirata que siempre venia a contarnos historias, y además hacia un espectáculo muy divertido. También estaba Chica, la camarera. Era como un pato. Además también estaba Bonnie el conejo, que era azul y blanco, y Mangle, que era rosa y blanco. Siempre iba con mis amigos: Demi, mi mejor amiga que era como mi hermana, Jennifer, muy femenina, Justin, el deportista, y David, muy tímido. Siempre veíamos el espectáculo de Foxy juntos. Pero ese día, a una niña le pasó algo horrible. Pasó así:
Mama, mira a ese zorro-dijo la niña con entusiasmo.
Si si hija-dijo la madre como si no le importara demasiado. La chica subió al escenario.
Mira que risa más tonta tiene-dijo la niña.
Niña, no puedes subir ahí-dijo un guarda
No eres mi padre, no tengo porque obedecerte- replicó la niña
Señora, dígale a su hija que baje- Le advirtió el guarda
No esta molestando, si quiere jugar con el zorro, pues jugará- dijo esa mujer.
Que dientes más afilados-dijo la niña metiendo la cabeza en su boca.
Entonces Foxy cerró bruscamente la boca. Hubo sangre por todo. Su mandíbula, que era como la de un tiburón, destrozó el lóbulo frontal de la chica. Todo el mundo salió despavorido, incluso la madre. Eso es una cosa que un niño de mi edad no debía haber visto.

Five nights at Freddy's: La verdad sobre el secuestro de niñosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora