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Fueron cinco días de pura tortura, de preguntas que ya me tenían realmente agotada y mis padres sufriendo por mi culpa. Pero no había tomado en cuenta que el regresar al colegio luego de faltar misteriosamente cinco días iba a ser aun peor. Cuando vamos de regreso a casa luego del diagnostico poco sustancial del psiquiatra pasamos frente al colegio, justo estaban saliendo todos mis compañeros, hice lo posible para que no me pudieran ver, me lance bruscamente al piso del taxi en el que íbamos, mis padres me voltearon a mirar muy extraño, pero ni quisieron preguntar. 

Al llegar a casa mi papá rompe el silencio de el trayecto entero:

-Sobra repetirte de todo lo que estas prohibida, ¿verdad?

-Si, television limitada, ciertos canales y ciertas horas. Libros, pocos, y de temas seleccionados. Cero internet, y si lo necesito para alguna actividad del colegio, lo podré usar solo con supervision de ustedes. Cero visitas. Cero salidas. ¿por cuánto tiempo dices que esto seguirá? 

-Por los meses que quedan del año.- Responde mi mamá.

-QUE!!! pero si estamos en agosto, aun faltan cuatro meses ¿ustedes piensan que me quedare sin esas cosas por cuatro meses? ¿ustedes están locos? 

-Nosotros duramos demasiados años sin internet, para ti sera algo muy fácil. 

Terminamos de organizar todas las pijamas que tenia para cambiarme en el hospital, luego de nuestra conversación de prohibiciones no hemos hablado más. Mi hermano no me habla, siento que esta bastante triste por muchas cosas, por lo sucedido y por la energía que mis padres emanan, ya que es una muy pesada, de tristeza, sufrimiento y decepción. Ya es algo tarde, así que prefiero irme a dormir que seguir sentada en la sala mirando la pared, mañana es miércoles, lo que significa: día de estudio.

Me levanto con muy poca dificultad, ya que estaba acostumbrada a ser levantada a las 4:00 am por los llantos de los niños ingresados a el hospital. Son las 5:00 am, hora habitual en la que me levanto para poder tener tiempo de entrar a el colegio a las 6:00 am. Aun no quiero pensar en lo que podrá suceder hoy, no sé si simplemente nadie lo notara o sere el centro de atención. a las 5:30 comienza mi programa favorito: "Brandy y el señor bigotes" Me termino de arreglas mientras veo los entretenidos episodios. Al finalizar el programa se que tengo que salir corriendo ya que vamos tarde para entrar, le doy un ligero empujón a mi hermano para advertirle que ya se nos hizo tarde, el solo se limita a regalarme una pequeña mirada y se levanta de la silla del comedor y salimos en camino al colegio. Es bastante cerca, así que nos vamos caminando, dos cuadras mas adelante espero que mi hermano me diga algo, antes de que todo esto sucediera este momento del día era su favorito, ya que tenia demasiada energía y me contaba lo que soñaba la noche anterior o simplemente me platicaba de algunas ideas locas que se le venían a la cabeza. Hoy es diferente, él esta más callado que nunca, el ambiente esta pesado, el día esta gris, también lo noto mucho más frio que de costumbre. 

Al llegar al colegio mi hermano toma su camino y yo tomo el mío. Llegue tarde, como de costumbre, ya todos los alumnos están en sus respectivas aulas. Me siento en el piso frente a la puerta de mi salon, esperando a que me dejen entrar, luego de llamar a cada alumno. Luego de ciertos minutos bastantes largos  el profesor abre la puerta.

-Que gusto volver a verte  ¿cómo estas?- Yo lo ultimo que quiero ahorita es comenzar con una mala actitud, así que le respondo lo más amable que puedo.

-Muy bien ¿cómo ha estado todo? ¿me tengo de adelantar de muchas cosas?- Respondo lo más serena posible, no quiero que estas personas se enteren de lo que paso realmente. 

- Pues mira Adela, varios compañeros tuyos me contaron ciertas cosas. 

¿de verdad? esto esta lo ultimo que quería que sucediera, que se dieran cuenta. ¿pero quién? ¿y cómo? 

-¿cosas? ¿qué tipo de cosas?- respondo haciéndome la desentendida. 

-Una compañera afirma que vio tu brazo muy lastimado, y Adela, eso es algo muy grave y es preocupante. 

-Profesor, por eso fue no pude venir a clase, estuve en el hospital, pero no se preocupe, no es nada grave, ya todo se esta controlando, mi familia esta enterada de esto mismo, pero por favor, lo que si le pido es que nadie más se entere, es lo ultimo que quiero en estos momentos.- Concluyo acomodando mi maleta pesada con más de cinco cuadernos y varios libros. El profesor inhala y exhala en señal preocupante. 

-Me temo que la misma compañera que me contó esto, no solo lo hizo para mí, ya se encargo de que todo el salon se enterara. Yo creo que lo mejor que puedes hacer es no prestarles atención y seguir en lo tuyo.-Mira amigo, tus consejos no me ayudan de mucho ya que son cosas lógicas, la verdadera pregunta es: ¿ahora qué hare? estoy metida en una situación muy difícil. 


Cegada por el amor de un asesino.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora