TU CONDENA, MI DELITO

Reinicio

"Si crees que esto tendrá un final feliz, es que no has estado prestando atención"
- Ramsay Bolton

Inhala, exhala y repite.

Inhala, exhala y repite.

Inhala, exhala y repite...

El olor a incienso inundaba mis fosas nasales, el sonido del agua estimulaba mis oídos y la respiración que acompañaba a la mía me hacía sentir como en completa sintonía.

Maca y yo había decidido por fin tener esa cita de yoga y la había convencido de que mi celda era lugar ideal, mi cuerpo se sentía realmente bien y mi mente después de un par de días desde lo que pasó con Poché por primera vez se sentía tranquila.

-Namasté -dije luego de inhalar y exhalar muy profundamente dejando que mis pulmones se expandieran y de alguna manera permitiendo que mi cuerpo recibiera energía positiva.

-Namasté -repitió Maca imitándome, con eso estábamos dando por terminada nuestra sesión de yoga.

-¿y bien? -pregunté a la morena- ¿Qué opina la boxeadora del Yoga?

-opino que, si esto me ayuda a tener una cintura más ágil, te invitaré a cenar después de la pelea -sonrío poniéndose de pie.

-¿Cuándo es esa cosa? -pregunté también poniéndome de pie.

-el próximo viernes y tu vendrás conmigo -afirmó.

-Maca yo... -comencé a negarme.

-no -me interrumpió- tu vendrás conmigo y punto, somos amigas y necesito que alguien esté ahí apoyándome la chica contra la que peleo es una fiera.

-Maca tú sabes que Poché estará ahí y lo último que quiero es verla -expliqué

-Calle, de Poché me encargo yo, pero tu no puedes vivir encerrada en esta celda todo el tiempo-

-de hecho, estar encerrada en una celda todo el tiempo es el propósito de una cárcel -dije burlándome

-sabes a lo que me refiero, no se que pasó entre ustedes -comentó mientras se arreglaba la cola de su cabellera- pero sea lo que sea no lo tomes personal, Poché es así siempre.

-si, lo se -dije tratando de fingir que eso no me había dolido.

Después de un par de días me negaba a aceptar que yo solo había sido una más en su lista, pues definitivamente ella es algo mucho más especial para mí. Simplemente sonreí y asentí con la cabeza a Maca para después proponerle ir a las regaderas, en los últimos dos días Maca era la única persona con la que hablaba y pasada el tiempo, estaba deseando que Celestia no me pusiera a hacer algo con Poché porque definitivamente la mandaría a la mierda.

Apenas había visto a Pinkie Pie y a las chicas y eso, aunque me daba algo de tristeza por la rubia también me sentía aliviada pues sabia que donde estaban las ponys estaría también Poché y definitivamente no quería eso.

Al llegar a las regaderas vimos que había bastantes mujeres ahí, a pesar de estar en prisión no me acostumbraba todavía a la falta de privacidad y definitivamente no me iba a desnudar frente a todas, preferiría mil veces regresar en la madrugada a ahorita.

-hay dos libres mira -dijo Maca señalando dos espacios libres.

-no me voy a desnudar frente a todas -dije asustada.

-me vas a decir que tienes todos estos meses sin bañarte -

-siempre vengo con una custodia y hace que todas se vayan -expliqué lo que siempre pasaba en mi rutina de baño.