AU. Harry es un pobre camarero que sueña con que un príncipe barra sus pies, Y Louis es un maleducado niño rico que desprecia todo lo que tenga que ver con el amor.
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Es una noche agradable en el pintoresco pueblo de Cheshire, el cielo es una mezcla de azul profundo y negro, estrellas parpadeantes, luces y el suave susurro del viento entre los árboles. La luna se encuentra baja, iluminando las bulliciosas calles abarrotadas de gente tratando de regresar a casa.
Un joven está tratando de maniobrarse a sí mismo alrededor de todo el mundo, comprobando frenéticamente su viejo reloj, entrecerrando los ojos y mordiendo su labio inferior. Él lleva un par de vaqueros negros desteñidos, con varios agujeros en las rodillas y en las pantorrillas, una camisa color blanquecino y un par de botas pintadas de un color marrón, rayadas y peligrosamente cerca de ser destruidas por los dedos de los pies. Una chaqueta desgastada de cuadros rojos y negros se cierne sobre su cuerpo desgarbado, casi no lo protege de la suave brisa que sopla en su dirección, haciendo que sus mejillas tomen un color rosa.
Su cabello marrón y rizado cuelga sobre sus ojos cuando mira alrededor tratando de encontrar un camino a través del mar de gente lo más rápido posible. Ve una abertura y apresuradamente se lanza a través de ella, tartamudeando una disculpa cuando pisa a alguien. Sin embargo sigue caminando; él no puede llegar tarde.
Por último, toma una bocanada de aire cuando el restaurante cinco estrellas The Ritz, que fue apodado como ''el más hermoso comedor en Europa y el hogar de la mejor cocina británica'', aparece en el paisaje y cuenta las personas haciendo cola fuera, detrás de la cuerda de terciopelo rojo cuando él se agacha por el lado del edificio.
Él entra por la puerta de atrás y se dirige a la 'sala de taquillas', se quita sus botas, gira el código de su locker y mira como el reloj verde menta abre con un pop. Deposita su abrigo y saca su uniforme cuidadosamente planchado de su percha, ni un solo pliegue a la vista. Suspira y se cambia, pasando sus manos sobre la tela suave.
Él ahora lleva una camisa blanca con botón, pantalones negros de vestir, un par de brillantes zapatos de vestir negros, un blazer negro y un par de guantes blancos. El outfit es obviamente la cosa más cara que tiene entre sus posesiones.
'' ¡Styles!'' Una fuerte voz severa dice, sacándo al joven de sus pensamientos. '' ¡Date prisa! ¡Los clientes están esperando!''
''Sí, señor'' Responde, pasando sus manos sobre su uniforme una vez más antes de dirigirse a la cocina, donde ya hay dos platos de comida en espera. Los coloca en su bandeja de plata brillante y lo eleva por encima del hombro, tal y como le habían dicho, y se dirige a la sala principal del restaurante.
''Hola, Harry'' su compañero de trabajo, Zayn Malik saluda mientras pasa de nuevo a la cocina. Harry murmura un silencioso hey, compañero y se concentra en no dejar caer la bandeja de comida estúpidamente cara. Sus ojos escanean más la lujosa habitación con asombro.
Él nunca se cansaría de ver esa sala; que es cerca de diez veces más cara que la pequeña habitación de Harry. Lámparas de cristal cuelgan majestuosamente desde el techo, remolinos de oro pintados en el techo y las paredes, grandes ventanas con vista al horizonte de Londres, todo estaba iluminado. La vista desde la pequeña ventana del piso de Harry era un callejón sucio.
Caminó hasta la mesa número 37 y trató de no rodar los ojos. La familia es los McArthies. Ricos y snob, algo que va pegado a sus culos y Harry se pregunta cómo pueden incluso sentarse. Reprime un suspiro cuando John McArthie desliza sus ojos hacia arriba y abajo de su cuerpo, con una sonrisa que se extiende a través de sus labios.