Séptimo Capítulo♥

64 4 0
                                    

Nos despertamos a las 5 de la mañana  ya que Lidia confundió en 6 con el 5 en el despertador.

-       Por Dios Lidia ¡¿cómo pudiste confundirte?!

-       Tranquila Brisa, míralo por el lado bueno, así tendré más tiempo para interrogarte.

-       Y yo también a ti.

-       Si pero yo lo dije primero así que yo empiezo. Veamos… ¿qué exactamente te pasa?

-       ¿No tienes hambre? Porque yo sí, y mucho.

-       Brisa, no cambies de tema.

-       No lo hago, solo digo que tengo hambre porque ¡tengo hambre! Mejor vamos a desayunar ¿sí?

-       No Brisa no evadas esta conversación. Anoche te pregunté y no quisiste contestarme así que te di tiempo hasta hoy, ahora dime.

-       ¿Necesitas saberlo?

-       Obvio, soy tu mejor amiga y me preocupo por ti. Te quiero y quiero saber qué te pasa.

Tomé un respiro profundo. Algo dentro de mí me decía que tenía que contarle todo a Lidia, se lo debía. Pero no podía, no ahora, quizá después cuando estuviera segura de que todo había acabado y no estaba en peligro. Sin embargo, tampoco podía dejarla con la preocupación.

Mentir, necesitada mentir, debía mentir.

-       Bueno, pues es que… anoche como vistes, mi mamá no estuvo aquí y…

-       No Brisa, no quiero saber que te pasó ayer, eso no me interesa. Y no es que no me interesa porque tú no me intereses, simplemente es que no puedo obligarte a contarme  todo lo que te pasa, está bien es tu vida. Quizá fue algo sin importancia.

Lidia es la mejor –me dije a mi misma- y nunca, jamás me cansaré de repetírmelo.

-       Pero Brisa, has estado rara y quiero saber qué te pasa ¿te preocupa algo? ¿algo te incomoda? Dime, por favor dime.

-       Es que… es…

-       ¿es qué o quién? ¿acaso es ese chico?

-       No, no. Es solo que he estado pensando en todo ¿sabes? Y he llegado a la conclusión de que estoy sola en el mundo.

-       No lo estás. Me tienes a mí, a tu mamá y a la Sra. Lena.

-       Lo sé, pero no es suficiente. Quiero ser alguien… normal.

-       Eres normal.

-       Si pero… sabes a lo que me refiero. Salir, tener amigos, romper una que otra regla, ir al cine, salir de compra, ir a fiestas. Me entiendes ¿verdad?

-       Si. Creo que eres perfecta tal y como eres justo ahora pero comprendo que necesitas esto y te apoyaré. Mañana te presentaré a unas amigas e iremos al cine con ellas ¿ya?

-       Preferiría que fueran personas que ninguna de las dos conociéramos, pero es bueno empezar por ahí.

-       Bueno ya me dio hambre ¿desayunamos?

-       Si –le dije y pasé un brazo a su alrededor- te quiero-.

Bajamos hasta la cocina. En la puerta del refrigerador había una nota de mi mamá:

Brisa♥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora