CAPITULO VI
¿Qué debería responder? Ella lo odiaba o por lo menos ese fue el último sentimiento que pudo reconocer al verlo. Pero si lo odiaba, ¿por qué le dolía tanto verlo así? Cerró los ojos y trató de no pensar en aquellos ojos grandes, esos ojos que en ese momento estaban brillando.
- No lo sé.
- Sé honesta, dilo de una vez. Si me romperás el corazón mejor que sea rápido y así no me haré ilusiones.¿Qué debía decir en circunstancias como esta? Era algo difícil de decidir o quizás ella se estaba confundiendo sola. Un nudo comenzó a nacer en su garganta junto con un escozor en los ojos.
- No lo sé. – Volvió a musitar. Él solo la miró y se fue de la habitación antes de decir o hacer algo de lo que luego se arrepentiría. ¿Tanto le costaba decir que lo amaba? O por lo menos que le dijera que lo odiaba, pero ella estaba cerrada, no diría nada.
- Ma...
- Nada Louis, vamos a ir a verlos para pasar navidad y tu cumpleaños juntos, sin excusas jovencito.
- Claro madre, nos vemos. – Cortó antes de que su madre pudiese seguir hablando. ¡Maldición! Sus padres tenían planeado ir a visitarlos eso arruinaría toda la semana de: "Joe y Demi". Fue enseguida donde Harry para que le advirtiera a Joe sobre la próxima llegada de los Lovato, podrían aparecer en cualquier momento.
- El plan A ha fallado, es hora del plan B. – Todos miraron a Louis y asintieron. Enseguida sacaron sus móviles y comenzaron con las llamadas, Joe y Demi tendrían su semana a solas costase lo que costase.- Demi, bebé, Lou está en el hospital. – Dramatizó Harry con una voz llorosa y convincente. Lo que hacían era cruel, hacerle creer que su hermano estaba mal, preocuparla y seguro hacerla llorar era demasiado, pero como habían dicho, ellos estarían juntos costase lo que costase. – Ven rápido a Londres, tus padres y hermanos ya están aquí, ven rápido por favor. – Cortó y miró a los chicos, se sentía mal por la mentira, pero ya estaba hecho.
Joe y Demi tomaron el primer tren que salió a Londres, ella estaba preocupada, demasiado. No podía imaginarse a su hermano mal, herido, menos aun muerto. Él era su mejor amigo, su consejero. Por otro lado Joe no se sentía muy distinto, Lou era su amigo hace ya varios años, siempre lo había ayudado, incluso luego de romperle el corazón a su hermana lo seguía ayudando.
El viaje fue rápido, silencioso y doloroso. Ambos sufrían pero ninguno de los dos era capaz de consolar al otro.
Harry había dicho que estarían en el departamento que tenía la familia Lovato de Jermyn Street así que en cuanto bajaron del tren tomaron un taxi directo al lugar indicado, solo para encontrarse con un departamento vacío y una nota."Lamento haberte asustado así Demi* pero era necesario, luego lo entenderás. No me odies por favor. Louis está bien y dice que tampoco lo odies, Nick y Kevin mandan saludos. Harry"
En menos de un segundo todo el dolor y la preocupación se transformaron en odio puro. Los mataría, volvería a Church Hill y los mataría a todos. Pedacito a pedacito. ¿Cómo podían ser tan insensibles? Tomó el papel y lo rompió para luego lanzarlo al suelo. Entró molesta sin percatarse que Joe seguía sin entender nada.
- ¡Nos engañaron! – gritó sublevada. – Esta es solo otra broma. – Se lanzó a uno de los sofás con los brazos cruzados y ceño fruncido haciendo un pequeño mohín con los labios. – Voy a comprar pasajes para volver. – Se levantó ya algo resignada y buscó la computadora, era mejor comprarlos online pues no estaba de humor como para hablar con personas, seguro que explotaría en cuanto le dijeran 'Hola'.
Joe estaba molesto, pero no sabía si era por la mala 'broma' o porque la habían hecho preocuparse y llorar en vano. Ella estaba realmente mal por una tontería. Él también los mataría en cuanto los viera, no se salvarían de esta.
- ¡Mierda! Los idiotas me congelaron las tarjetas de crédito.
- ¿Eso qué significa?
- Que a menos que tú tengas una tarjeta de crédito o dinero en efectivo, tendremos que quedarnos aquí. No tengo dinero como para comprar los pasajes de vuelta. – Cerró la laptop, ya no se veía molesta o quizás solo se estaba tratando de tranquilizar. Suspiró y lo miró. – La preocupación y el enojo me da hambre, ¿me puedes cocinar algo?- Mejor cocinemos los dos. – Le sonrió a lo que ella le devolvió el gesto. Se levantó del suelo para acompañarlo a la cocina.
- ¿Qué haremos, Chef Jonas?
- Cereales con leche. Sé que te gusta. – Buscó unos recipientes y los ingredientes. – El problema es que no podemos vivir de cereales con leche todo el tiempo que estemos aquí.
- Pues tendremos que aprender a cocinar. Hay tutoriales en internet. ¿Sabías que internet sirve para muchas cosas aparte de ver porno? – Él soltó una carcajada.
- Yo no veo porno.
- Sí claro, todos dicen lo mismo. – Rodó los ojos y fue a buscar su laptop. – Hagamos pan casero. – Tecleó un par de cosas en el buscador y luego leyó: - "Ingredientes: harina, levadura, azúcar, sal, leche, manteca vegetal".Llevaban por lo menos dos horas tratando de cocinar pero no podían. Reían por cualquier cosa, jugaban con la harina, hacían lo que fuere menos cocinar. Incluso entre risas y bromas se lanzaron miradas cómplices, sonrisas coquetas. Ya ni siquiera se acordaban de los chicos y su bromita.
- Creo que tendremos que comer cereales. – Comentó Demi que estaba sentada en una silla de la cocina. - Ya me dio sueño, buenas noches Joe. – Se acercó hasta él y le besó la mejilla. Quizás para otros no era una gran muestra de afecto pero para él significaba todo. Ellos eran amigos otra vez, o por lo menos eso era lo que ella le daba a entender. Si esto seguía así, alcanzar su perdón no sería nada difícil.
Fue hasta una de las habitaciones para descansar, había sido un día movido, quizás no estaba perdido después de todo. Se lanzó a la cama sin quitarse la ropa ni nada, simplemente se durmió.
Por otro lado Demi estaba en su cama pero no dormía, estaba soñando despierta, recordando la primera vez que había visto a Joe entrar en su casa...
"- Él es Joe Jonas, un amigo. – Lo presentó Louis sonriente junto con Kevin y Nick.
- Un gusto Joe. – Le saludó Dianna, su madre, con una sonrisa.Ellos no lo sabían pero Demi estaba allí. Se suponía que debía estar ensayando en el piano pero había escuchado voces desconocidas y había ido a espiar. Había sido una buena elección, si no hubiese sido por ello nunca lo hubiese visto. ¿Alguien podía ser tan lindo? Nunca había visto un hombre similar, bueno... la verdad apenas tenía contacto con los hombres. Esa misma noche ellos hablaron por primera vez. Había sido una conversación en torno a Louis, no tenían otro tema en común. Pero con el paso de los días y las constantes visitas del chico se hicieron amigos, nadie lo sabía y nadie debía saberlo. Era como una amistad secreta, una amistad que pronto se transformaría en amor.
- Demi. ¿Puedo hablar contigo? – Ella asintió con una sonrisa y lo acompañó a la lavandería. No solía haber mucha gente allí. – Yo me preguntaba si tú... ¿quisieras ser mi novia? – Y sonrió tímidamente."
Había sido tan lindo el principio de su relación pero tan amargo el final. Sin darse cuenta Demi estaba llorando otra vez, ese día debía estar demasiado emocional. No podía aguantar tantos sentimientos juntos así que solo lloró, debía desahogarse de alguna forma. Pero nunca pensó que sus sollozos podían ser tan altos como para que Joe los escuchara.
- ¿Qué te pasó, bebé? – Preguntó una vez frente a ella. – Ya no llores. – La abrazó y besó su mejilla. – Yo estoy aquí para cuidarte, por siempre...
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DOCE DÌAS (Editando)
FanficSinopsis ¿Puedes tropezar dos veces con la misma piedra? ¿Aún cuando esta piedra sea jodidamente sexy? Demi Lovato simplemente había seguido su vida, sin mirar atrás, sin fijarse en su gran caída. De todas formas ya se había vuelto a levantar, no ne...