BAD BLOOD (Defending Jacob)

3

Después de que les dijeran a los chicos que podían irse a casa, Jacob y Athan emprendieron camino a su hogar, pero el amigo de Jacob, Derek venia con ellos ya que Jacob lo había invitado a jugar.

—¿Quién podría haberle hecho algo así?—pregunto Derek en el camino, Athan prefirió no formar parte de la conversación, aún no podía quitar de su cabeza la imagen de Ben lleno de sangre

—tal vez alguien lo atacó por ser un idiota, decidió darle su merecido—contesto Jacob sin más

Al llegar a casa, Jacob y Derek fueron a la habitación de Jacob mientras Athan se fue a la suya para hacer su tarea, tenía que distraerse con algo.

—chicos, ¿Están en casa?—pregunto su madre llegando

—estamos arriba—dijo Jacob sin dejar de jugar con su consola

Athan estaba tan concentrado en sus deberes que no escucho cuando la puerta de su cuarto fue tocada.

—Athan, te estaba llamando—dijo su padre entrando a su cuarto y el chico brincó por el susto que había tenido

—lo siento papá, estaba haciendo tarea y no preste atención—dijo el chico mientras cerraba su laptop—ni siquiera noté que ya había anochecido

—puedes venir al cuarto de Jake, tenemos que hablar con ambos—dijo su padre y Athan se levantó para ir al cuarto de a lado donde su madre ya estaba también

Los chicos se sentaron en los pequeños sillones que había frente a la televisión, y sus padres frente a ellos.

—queremos saber ¿Cómo se sienten? ¿Cómo se sienten respecto a lo de Ben?—pregunto su madre y Athan se puso algo nervioso

—estoy bien, digo, es raro pero no es como si fuéramos grandes amigos—dijo Jacob nuevamente sin una pizca de emoción

—¿Y tú Athan?—pregunto su padre al otro chico que jugaba con sus dedos

—opinó igual que Jake, es raro lo que le ocurrió pero no éramos amigos, solo tomábamos matemáticas—dijo Athan calmadamente

—¿Era simpático?—pregunto su madre

—algo, no quiero sonar cruel pero era muy arrogante, tal vez eso le gustaba a las chicas—dijo Athan

Después de esa plática, la familia Barber fue a dormir, había sido un largo día y lo único que querían hacer era descansar. En el cuarto de Athan, el chico no podía dormir, no podía borrar esas imágenes y parecía que se lo comían por dentro.

—Athan ¿Estás despierto?—dijo Jacob en voz baja mientras entraba a su cuarto

—si, no puedo dormir—dijo el otro chico mientras se sentaba en su cama—¿Y tú?

—igual, no puedo sacarme de la cabeza lo qué pasó—Jacob se sentó a lado de su hermano

—debimos de hacer algo, llamar a la policía o a papá—se culpó Athan

—no fue nuestra culpa, sólo queríamos ser buenas personas—dijo Jacob—ahora que estamos juntos en esto, no podemos dar marcha atrás

—si, lo sé—contesto Athan y Jacob saco un cuchillo de su pantalón—¿Qué demonios haces con un cuchillo?

—lo compre hace unos meses con mis ahorros—Jacob se lo paso a Athan—nunca sabes para que pueda servir

—es muy peligroso tener esto en la casa y lo sabes—le reclamo a Jacob—tendremos problemas si papá lo descubre

—no lo hará, porque ninguno de los dos le dirá—dijo Jacob—te muestro esto por qué eres en la única persona que confío plenamente, se que tú nunca me traicionarías

—claro que no, eres mi hermano—dijo Athan mirando hacia otro lado

—lo sé, pero creo que deberíamos de hacer ese lazo aún más importante—Jacob se levanto y se puso frente a Athan—hay que hacer un pacto de sangre, jurar que nunca nos traicionaremos y sea lo que sea lo pasaremos juntos

Athan dudo mucho de la propuesta de su hermano, pero al final de cuentas acepto hacerlo, ya que algo era cierto, él daría su vida por Jacob al igual que Jacob por Athan.

Jacob corto una parte de las palmas de ambos y después las juntaron quedando así sellado el pacto de hermanos que ahora tenían.