Capítulo 13 - Sentimientos Invisibles

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Tienes que estar bromeando.

Ese fue el primer pensamiento que entró en la cabeza de Oreki cuando Chitanda cayó sobre él. 

Ibara, ayúdame, dijo, levantando la cabeza.

"Estaba pensando."

"¿Qué?"

"Estaba pensando si tú deberías ser el que la lleve"

"Un desperdicio de energía." Terminó su frase, doblando sus brazos. "Mira, lo entiendo. Pero, estoy bastante seguro de que Chii-chan será feliz si tu la llevas."

"¡Estoy de acuerdo contigo, Mayaka!" Fukube sonrió y guiñó un pequeño guiño a Oreki. 

Suspiró. "¿Puedes al menos quitármela de encima primero?"

¿Estás disgustado por ella, Oreki?, preguntó burlonamente Ibara.

No, solo se siente incómodo, contestó mientras la miraba.

"Bien." Se bajó, una de sus manos agarrando el brazo derecho de Chitanda y su otra mano resbalando bajo su cintura. Mientras luchaba un poco, Fukube la ayudó a poner al líder inconsciente en una silla.

Ahora, es tu turno, exigió Ibara.

"¿Qué?" Oreki hizo una cara sin expresión.

"Fuku-chan y yo te ayudamos, así que ahora, deja de sentarte ahí y haz algo."

¿Cómo?

Fukube suspiró. "Houtarou, lo que está tratando de decir es que la llev-"

No.

Ibara le disparó una mirada fría. "Eres despiadado, Oreki. ¿No ves que estoy tratando de darte la oportunidad de ayudarla?"

Hubo un breve silencio después de eso. En ese momento, Ibara estaba echando humo mientras Fukube intentaba calmarla con algunas sonrisas y palabras, y Oreki, por otro lado, la miraba sin signos de reacción. 

La he ayudado muchas veces, murmuró, rompiendo el silencio. 

Ibara mordió su labio, su cara llena de gran decepción. "Eres peor de lo que esperaba, Oreki." Ella llevó a Chitanda en su espalda que estaba sentada en la silla y la sacó de la habitación, caminando por el pasillo enojado.

Los chicos se quedaron en la habitación, y Fukube miró a su amigo. "... ¿Estás bien, Houtarou?"

Estaba en silencio; no tenía ganas de decir nada. Se levantó, llevándose su bolsa. "Yo... me voy a casa."

Fukube lo miró con ojos tristes. Voy a ver si Mayaka está bien, dijo mientras veía a Oreki salir de la habitación.

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Chitanda no fue a la escuela al día siguiente. Ibara también evitó a Oreki. Fukube, bueno, estuvo tratando de animar a Ibara todo el día. 

La clase fue despedida mientras el reloj hacía tictac, y Oreki decidió ver a Chitanda en la enfermería, aunque él no quería.

"Houtarou, ¿te vas a casa?" preguntó Fukube.

"Voy a ver a Chitanda hoy." 

"¿Ha pasado algo?"

Oreki le dio una mirada. "No pasó nada. Es sólo mi propia voluntad, aunque no quiero hacerlo."

No tienes esperanza, Houtarou.

Painted With Roses (Oreki x Chitanda) (Historia de opplayerv23)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora