Capítulo 5 - Aplastar una hormiga (1)

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En la mesa del comedor, el aspecto superficial era tranquilo y sereno. Sin embargo, la situación debajo de la mesa empeoraba. Lu Beifan, que estaba sentado frente a Ye Zhen, había estirado el pie hasta tocar el muslo de Ye Zhen.

Desde la perspectiva de Lu Beifan, su hermosa cuñada estaba casada con una persona en estado de coma, por lo que bien podría ser viuda. ¡Qué horrible desperdicio!

No había forma de que su hermano mayor, que había recibido ventajas injustas, mejorara. En lugar de dejar que su cuñada se desperdicie, debería probarla. De todos modos, toda la familia Lu se convertiría en suya en el futuro.

Durante los últimos días, su cuñada, antes tímida y tímida, se había transformado de repente en una dama fría y elegante. Se sintió horrible tener que reprimir sus impulsos.

Ye Zhen dejó su cucharada sopera y miró a Lu Beifan con una sonrisa. "Disculpe, mi pierna accidentalmente terminó debajo de su pie. ¿Puede por favor alejar su pie de mi muslo?"

Lu Beifan fue un ejemplo arquetípico de un idiota loco por el sexo. Ya sea por su apariencia, educación, habilidad o estado, nada de eso era presentable. Había heredado perfectamente el rasgo que definía al padre Lu, naturalmente lujurioso.

Durante los últimos días, Ye Zhen ya se había sentido lo suficientemente disgustado por los ojos brillantes de Lu Beifan. Ella había elegido ignorarlo, y él lo había tomado como una invitación a actuar peor. Incluso se atrevió a tocarla ahora debajo de la cubierta de la mesa.

Ella simplemente quería vivir una vida pacífica. Planeaba dejar en silencio a la familia Lu una vez que terminara de hacer sus arreglos. Sin embargo, no había esperado que cualquier criatura perdida la intimidara.

Justo después de que Ye Zhen dijo estas palabras, el estado de ánimo en el comedor cambió abruptamente. Se sentía como si la atmósfera anteriormente tensa hubiera tocado una línea de alta tensión. Los sirvientes parados a un lado ni siquiera se atrevieron a respirar demasiado fuerte.

Después de que la Madre Lu arrojó un cuenco y un cucharón, Lu Beifan rápidamente apartó el pie del muslo de Ye Zhen.

Lu Beifan se sacudió el cerebro y fingió estar confundido. "... Cuñada, lo siento, eso fue un accidente".

Ye Zhen sonrió. "Esta bien."

Estas personas eran la élite. Aunque nadie vio lo que había sucedido debajo de la mesa, todos habían visto tanto el comportamiento abierto y encubierto de Lu Beifan como sus miradas furiosas hacia Ye Zhen durante los últimos días. Era obvio para todos.

Lu Beifan era el hijo que tenía con su amante favorito, por lo que el padre Lu tuvo que ayudarlo a salir de esta incómoda situación.

Recogiendo una toalla que trajo un criado, miró a Lu Beifan y dijo: "Está bien, es hora de ir a la oficina".

Seguro sabiendo que tenía respaldo, Lu Beifan miró a Ye Zhen con una mirada que mostraba que estaba inmensamente satisfecho de sí mismo. Ignoró la mirada de advertencia del padre Lu como si fuera su derecho.

Ye Zhen se rió en secreto.

Aunque su hermano mayor no estaba muerto, pensó que era la única opción de la familia Lu para un sucesor. Deseaba a su cuñada y ya planeaba llevarse a la esposa de su hermano comatoso. Pero no había considerado que a la familia Lu no le faltaban descendientes. Le faltaba absolutamente la moderación. A Ye Zhen no le pareció extraño que su final fuera muy miserable.

Él era tan idiota. Ye Zhen pensó que era razonable creer que incluso si Lu Beichuan no se despertara, esta persona todavía no tendría un buen final. Una vez que apareció el protagonista masculino, esta persona estúpida podría desencadenar su propia muerte.

Lu Beifan se levantó y siguió cortésmente a Lu Shaoren cuando salieron de la casa.

Justo después de que Lu Shaoren y Lu Beifan se fueron, la Madre Lu rompió en pedazos la vajilla frente a ella y miró con resentimiento hacia la dirección de la puerta principal.

Ye Zhen permaneció sentado a la mesa del comedor. Sin inmutarse, lentamente terminó de desayunar.

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