Out Of The Woods (Kaylor)

Nada Salió Bien.

Hola, perdón por no haber actualizado antes, pero la verdad tuve un lapsus de ansiedad xD y bueno ya estoy aquí, para decirles que estamos en la recta final, esta por terminar el fic :P son los últimos capitulos y... Bueno espero que les guste :3 gracias por sus comentarios, me gustan sus teorias.

Sean llevo a Karlie a su auto, condujo por vecindarios que Karlie ni conocía, así que cuando llegaron a donde se escondía el hombre, se relajaron un poco.

— Dime, Sean, por favor, haré lo que me pidas – Espetó Karlie.
— ¿Dormirías conmigo una vez más?
— Sí – Aceptó – Si me das a cambio la información que necesito.
— Harías cualquier cosa por salvarla ¿cierto?
— Sí – Afirmó sin dudarlo.
— Pondrás tu vida en peligro – Sentenció Sean.
— No me importa, si ella está a salvo.
— De acuerdo, pero no me creerás.

Se acercó a ella para darle un suave beso al que Karlie no correspondió como antes lo hizo, se dejó ir sobre la ex agente, para acariciar su cuerpo, aquel hombre sentía como la chica trataba de forzarse a relajarse, pero no podía, tocarla y besarla ya no era igual, Karlie no cooperaba de la misma forma, ni lo disfrutaba, así que se dejó caer a un lado mientras la castaña lo observó confundida.

— Creí que era lo que querías – Soltó Karlie.
— Claro que lo deseo, Karlie, pero hay tantas cosas que deseo de ti que jamás tendré, como que te pongas a salvo, que me elijas a mí, que me ames a mí, que estés conmigo, que seas mi mujer ante la ley, yo deseaba llevarte al altar como un día soñaste con Mathias, yo deseé ser el hombre de tu vida, tu mundo, como te volviste el mío, y solo tengo este maldito dolor en el pecho que quema, que arde, que me consume – Sus ojos se llenaron de lágrimas – Odio ver que arriesgas todo por ella, que dejas todo por ella sin pensar en ti.
— Sean, yo...
— Está bien, está bien, yo entiendo que es lo mismo que haría por ti e incluso estoy seguro que ella haría lo mismo por ti si pudiera, o la dejaras hacerlo.
— ¿Qué es lo que desean, Sean?
— El imbécil de Gyllenhaal pensó que engañarlo sería fácil, creyó que robarle sería fácil, que no es tan listo como alardea, pero no previó que pondría a su mujer en la mira del Camaleón, se enamoró, así que no pudo ni quiso estar sin ella, no sé ni me interesa como la convenció para estar con él, pero le robó al jefe, su empresa servía para cubrir desfalcos, lavado y muchas cosas más.
— Eso lo sé ¿pero que le robo?
— Unos códigos.
— ¿Códigos? ¿De qué?
— Tiene los códigos para acceder a la base de datos de una cuenta millonaria, y a parte de los nombres de los testigos protegidos y reubicados ¿sabes que podría hacer con ello?
— Sí, lo sé ¿pero porque atacar a Taylor?
— Jake no los tiene, lo revisamos de pies a cabeza, todas sus propiedades, sus escondites, así que solo queda ella.
— Ella no lo tiene.
— Eso crees, pero sabemos que se los dio a ella, el problema es que nos complicaste el trabajo escondiéndola, su apartamento, su empresa, su caja fuerte del banco y nada, así que el jefe cree que lo trae consigo a simple vista y desapercibido, el dilema es que no encuentran a Taylor.
— ¿Quién es? – Preguntó Karlie.
— Será mejor que te alejes ahora, Karlie, sabes todo lo que no deberías y a mí me van a cortar el cuello.
— Llévame con él.
— ¿Estás loca? ¿Acaso no escuchaste lo que te dije? Jake está siendo torturado, pero se niega a hablar.
— Lo sé, les mandaron sus dedos a sus padres.
— Sí.
— ¿Y si les dices que yo lo tengo?
— No te pondré en riesgo, Karlie.
— Sean, ya me buscan por lo que sea, pero estoy en su mira.
— Quiere ofrecerte unirte a sus filas.
— ¿Por qué aceptaría eso?
— Cree que cuando lo conozcas, aceptaras.
— Sí, claro.
— Iré a ver como esta todo y regreso, por favor, Karlie, quédate aquí y no te muevas – Pidió.
— Bien.

Sean se retito, mientras Karlie repasaba lo que le acababan de decir aquel hombre, sabía que no le mentía, después de aquella enorme mentira que alejó al que pensó era el hombre de su vida, sabía que ahora no podría mentirle en nada, suspiró para tomar su móvil y llamar a su amigo.