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-Sr. Sr. Encontraron algo. -El oficial se acercó al jefe mostrándoles unas imágenes. Ambos salieron corriendo hasta el lugar en donde encontraron el rastro de sangre.

-Que encontraron oficial. – Pregunto el jefe al más joven.

-Al parecer es un rastro de sangre, hay una mochila y un zapato. – Termino de explicar el oficial.

Aun sin poder creer que era lo único que tenían, era como si se lo hubiera tragado la tierra o peor aún alguien se hubiera llevado el cuerpo sin dejar rastro ni testigos, dejando solo una mochila destrozada y un zapato, junto al rastro de sangre.

Tenían que encontrar más pistas o un cuerpo, no podían cerrar un caso así solo con un par de cosas, tampoco podía darle respuestas a medias a la madre del pequeño. Así que la investigación seguiría hasta que tuvieran más cosas en concreto.

***

*****

Entro en el lugar después de tener una pequeña charla con el director, le dieron una pequeña guía que consistía en el trabajo que haría el mes que estuviera supliendo a su amigo, por el permiso de maternidad que había obtenido.

Su amigo lo había recomendado y le había pedido el favor de suplirlo mientras tenía a su primer bebé. Él había aceptado para no hacerle el feo, pero en realidad él no tenía experiencia siendo un profesor de niños pequeños. Se había especializado en dar pequeños cursos a universidades y dar conferencias en diferentes empresas, pero ahora en ese momento se encontraba siguiendo al director hasta el salón en donde daría clases por los siguientes diez días hábiles (dos semanas).

No es que no le gustaran los niños, él había dicho que cuando fuera el momento adecuado se vincularía con la persona correcta y tendría todos los cachorros que quería. Es solo que a veces se fastidiaba muy rápido o se desesperaba cuando no le hacían caso.

Llegaron a una puerta, en donde yacía un nombre con la clase, esta decía "Profesor Laufeyson" "Clase 1 D", a veces le daba risa que su amigo usara su apellido de soltero, pero ahí nada podía hacer, cada persona hacía y deshacía lo que quería.

El director llamo la atención de todos los niños en la clase haciéndolos sentar y explicándoles la razón del porque esas dos semanas, antes de las vacaciones de fin de curso, tendrían un profesor sustituto. Él se limitó a escuchar lo que decía el director y durante esos cinco minutos observo a los que serían sus alumnos por unos instantes, notando muchas cosas el noventa y ocho por ciento de sus "alumnos" eran muy hiperactivos, aunque como antes lo vieron el dos por ciento era tranquilo y no se movía sin antes pensar lo que hacía. Ese dos por ciento se trataba de una sola niña, el cual se veía como si fuera un robot, sin sentimientos y sin ánimos de estar en el lugar.

Después de la pequeña presentación del director, este mismo salió dejándolo en el lugar con los pequeños monstruos que tendría que educar, se dijo. Se acercó al pizarrón colocando la fecha del día y poniendo su nombre para poder presentarse, al terminar se giró mirando a sus "alumnos" y hablándoles por primera vez.

-Mi nombre es Anthony E. Stark, seré su maestro durante las próximas dos semanas. Hasta que salgan de vacaciones, estaré suplantando al profesor Laufeyson. –Dijo en forma de saludo. Al ver que tenía todas las miradas puestas en él, prosiguió con su pequeña charla. -Su profesor me pidió que les hiciera unas pequeñas actividades, para sus calificaciones finales. Que como obvio, él pasara al director para sus boletas. Si tienen dudas de cualquier tipo este para apoyarlos en lo que sea.

Después de explicar los demás puntos que tenía, les paso unas hojas con unas actividades que él llevaba, para saber un poco más de ellos a fondo. Fue pasando lugar por lugar entregándoles la hoja de actividad. Cuando llego al lugar en donde estaba el pequeño que le había llamado la atención, se dio cuenta de tres cosas. La primera es que el cachorro no hacia contacto visual. Dos, no era una niña, sino un niño. Y tres, al tomar la hoja él temblaba muy ligeramente, como si tuviera miedo de hacer algo mal y recibir un castigo.

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