-Está bien, déjame pensar…-Sam se pasó la mano por su pelo rizado, mientras sus ojos se fijaban en los míos de manera enigmática. De repente sonrió, enseñando sus hoyuelos- ¿La cosa más estúpida que hayas hecho nunca?
-Nada, soy un ángel.-Le contesté, haciendo un puchero. Sam rió y entornó los ojos.
-Algo habrás hecho.
Miré el suelo, pensativa. Un recuerdo pasó por mi mente, así como un leve sonrojo por mis mejillas.
-Una vez estaba en casa de mi mejor amiga, y nos estábamos pasando una pelota en su habitación. Charlotte tiene una puntería horrible, y tiró la pelota por la ventana-sonreí- Somos muy vagas y no queríamos bajar las escaleras, así que… me tiré por la ventana.
-Bromeas-Una carcajada gutural salió de la boca de Sam.
-No, te lo digo de verdad. Estaba un poco histérica, y ni me acordé de que la casa tiene dos pisos. Solo me acuerdo de ver a Charlotte a mi lado riéndose como una loca mientras yo me agarraba mi pie roto.
-¿De verdad?-Irguió una ceja.
Asentí y escondí mi cara entre las rodillas, sintiendo el calor que emitían mis mejillas.
Sam volvió a reír y acarició mi pelo.
-Te toca.
Sacudí la cabeza y le miré a los ojos.
-¿Cómo te gustaría morir?
Sam irguió las cejas y se pasó la mano por el pelo rizado.
-No me gusta pensar en la muerte, no porque tenga miedo a morir, sino porque sé que algún día simplemente pasará-Su mirada fijó la mía seriamente-Supongo que quiero morirme al lado de la persona a la que ame. Sí, seré muy afortunado si eso pasa.
Asentí, mientras Sam cogía mi mano y la acariciaba.
-Mi turno.-Dijo.- ¿Crees en el amor a primera vista?
Sonreí y me acordé del día que nos conocimos, como supe que él tenía algo y que, aunque no supiera nada sobre él, lo necesitaba.
-Creo en…creo que no, cuando conoces una persona puedes intuir si te va a gustar, o puedes tener un flechazo, pero no te enamorarás, de eso estoy segura- ¿Segura? ¿Segurísima? Resonó una voz en mi cabeza. -¿Tu qué crees?
-Yo realmente creo en el amor a primera vista. Si alguien te hace sentir vivo, da igual si lo conoces desde toda la vida, o si lo has conocido hace cinco minutos, porque las personas cambian, y eso es lo más importante-Estaba deslumbrada por esta faceta seria de Sam, él siempre era bromista y sonriente y nunca había pensado que también fuera tan sincero.-Las personas cambian, y tú puedes creer que alguien es exactamente como siempre has pensado que era, y al final resulta que no. Y eso también pasa con el amor a primera vista. Puedes pensar que no es amor, pero al final resulta que si lo es. Ah, por cierto, esto cuenta como pregunta-Añadió sonriente.
Reí ante su comentario-¡No es justo, Sam!
-Te vuelve a tocar-Dijo, riendo.
-Vale… ¿Tu primero beso?
Sam sonrió burlón.-Me haces preguntas muy difíciles, las mías son fáciles.
-Calla y contesta-Reí, haciendo que Sam mostrara una mueca divertida.
-Tendría unos doce años, y fue en el recreo de la escuela. Ni me acuerdo del nombre de la chica.
-¿No te acuerdas de tu primer beso?-Le pregunté, una mezcla entre divertida y sorprendida.
-No, la verdad es que no. ¿Tú te acuerdas del tuyo?
-Sí, tenía catorce años y el chico se llamaba Jason.-Dije avergonzada, mientras la carcajada de Sam resonaba por el salón.- Eh, no te rías. Y que sepas que esto también cuenta como una pregunta.
Sam irguió las cejas y sonrió-Bien, pues me toca.
-¿Cuál es tu mayor miedo?
-El vacío-Contesté sin pensarlo.
-¿Qué quieres decir con eso?-Sentí como sus ojos verdes me miraban, pero no levanté la cabeza.
-La solitud…Hay momentos en los que me siento vacía, en que pienso que ya no vale la pena seguir intentando rellenar los espacios, porque seguirán ahí de una manera u otra.-Sentí como las lágrimas inundaban mis ojos, y las retuve con fuerza. Nunca le había explicado a nadie como me sentía, pero con Sam había salido solo. Porque era así como me sentía. Me faltaba algo y no sabía al cierto lo que era.
-July-Sentí como un dedo suave elevaba mi barbilla para que nuestras caras se quedasen al mismo nivel.-Escúchame. No dejaré que te sientas así nunca más, no quiero que lo hagas. No quiero que vuelvas a estar triste.-Sam me miró seriamente- Me importas. Me importas mucho July. Y voy a estar aquí mientras me necesites.
Intenté sonreírle. Me cogió entre sus brazos, mientras me acunaba suavemente. Sus labios depositaron pequeños besos desde mi cuello hasta mi mejilla, y su nariz rozó la mía un segundo, antes de apartarse de mí y mirarme a los ojos.
- Voy a cerrar todos tus espacios.- Su voz suave resonó en mi cabeza y, por un momento, le creí con todas mis fuerzas.
Hey chicos, espero que os esté gustando la novela :) Muchisimas gracias a todos los que leeis, de verdad es muy importante para mi saber que os parece. La nueva portada la ha hecho @MrsHoranRiggs y me encantaaaaaa<3
Besoos
Ju