✨ ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ ᴜɴᴏ

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Londres / 1922

Taylor sonrió, abrazando a su bonito omega por detrás, apoyando su mentón en el hombro de él.

-No te sientas mal, mi omega. El doctor nos ha dado buenas esperanzas, pronto tendremos el cachorro que tanto deseamos-la alfa habló con dulzura.

Harry sonrió y asintió.

Habían llegado hace dos meses a Londres desde Nueva York, con la única finalidad de visitar a un doctor de fertilidad omega que prometía un tratamiento milagroso para concebir cachorros.

Desde su boda, Taylor y él habían intentado muchas veces concebir un cachorro, las muchas veces que hicieron el amor no había sucedido nada, Harry no mostraba ningún síntoma de embarazo, lo que empezó a preocuparlos.

Un método que jamás fallaba a ninguna pareja era hacerlo con ambos en celos.

Pero incluso así, después de un día de celo de la alfa y tres días del omega... Aún no había cachorro.

Tras la angustia de Harry, Taylor buscó arduamente información sobre doctores especializados en fertilidad omega que pudiera ayudarlos.

El que mejor reputación y exitosos resultados tenía era Richard Henry, pero él se encontraba en Londres, Gran Bretaña.

A Taylor no le importaba lo lejos que ese doctor se encontraba, mientras cumpliera el sueño de su omega de tener un cachorro.
Pronto armaron las maletas, la alfa pidió un tiempo en el banco de su padre donde trabajaba y tomaron el primer barco rumbo a Londres.

-Señores Swift, la cena estará servida en unos minutos, la mesa ya está puesta-la sirvienta habló desde el marco de la puerta.

-Gracias Marie, en unos segundos nos sentaremos-Harry habló amablemente.

La sirvienta asintió y desapareció.

El teléfono sonando interrumpió el tranquilo silencio de la sala.

-Yo iré-

Taylor descolgó el teléfono y habló tres veces, esperando una respuesta, pero la persona al otro lado de la línea no hablaba.
La línea se cortó y Taylor frunció el ceño.
Puso el teléfono en su base.

-Que extraño-

El omega se tenso.
Unos ojos de color zafiro vinieron a su mente al instante.

Cerró sus ojos, alucinando con el olor a café y whisky de aquel alfa, su primer amor.

-¿Pasamos al salón, mi omega?-preguntó Taylor.

Harry asintió, forzó una sonrisa y caminó rápidamente al comedor.
Aún intrigado con aquella misteriosa llamada.

-

Louis cortó la llamada luego de escuchar la fuerte voz de esa alfa.

No esperaba eso.

Deseaba que Harry, el omega que después de dos años aún no lograba olvidar, contestará con su aterciopelada voz.

Observó su reloj y se levantó de su asiento, arreglando en el proceso su chaqueta y su reloj.

Tenía una reunión importante y necesitaba mantener la mente en blanco.

-

Taylor se estaba dando un baño, Harry estaba leyendo un libro con el piyama puesto en la enorme cama de seda blanca, esperándola.

Releyó el párrafo de la página por quinta vez intentando prestarle atención, pero no podía.

 𝑩𝒓𝒆𝒂𝒌 𝒀𝒐𝒖𝒓 𝑯𝒆𝒂𝒓𝒕 / 𝑳𝒂𝒓𝒓𝒚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora