Tsubasa le volvió a pedir disculpas al chico con el que había chocado (que luego supo que se llamaba Misaki).
─Lo lamento mucho, Misaki. No fue mi intensión chocar contigo.
─No te preocupes. ¿Quién no se ha chocado contra algo alguna vez?
─Yo me estrellé contra la casa del vecino como veinte veces cuando intenté andar en moto─ interrumpió Ishizaki, dándose palmadas en la frente, riendo.
─Jeje, a quién no le ha pasado. Por cierto, ¿por qué viniste al hospital, Tsubasa?─ le preguntó para cambiar de tema.
─Oh, bueno, es que descubrí que padezco cáncer de estómago─ dijo bajando la mirada. Aún no superaba ese hecho tan repentino.
─Uh, ¿enserio? Lo lamento mucho, enserio te lo estoy diciendo. ¿Pero sabes qué? Yo también padezco cáncer─ dijo para alegrarlo un poco.
─¿Enserio?
Taro asintió.
─Sólo que el mío es de pulmón.
─¿Y por qué tienes cáncer de pulmón?─ interrumpió Ishizaki.
─Es que yo solía fumar mucho a causa de mi depresión.
─¿Depresión?
─Exacto. Lo que pasa es que mis padres se divorciaron cuando apenas tenía seis años, y me fui con mi padre, que únicamente se dedica a pintar sus "famosos" cuadros, y por eso viajamos por todo el país: para que pueda pintar paisajes. Yo hice un montón de amigos, pero jamás he podido quedarme en el mismo lugar por más de un mes porque siempre se avecinaba otro viaje de mi padre.
─Wow, vaya historia...─ dijo Tsubasa, realmente sorprendido.
Por otra parte, Ishizaki lloraba como condenado por la historia de Taro.
─¡Tu historia me conmovió!─ abrazó a Tsubasa y lloró en su pecho, llenando su camiseta de lágrimas y algún que otro moco.
─¡No embarres de moco mi camiseta! ¡La acabo de comprar!─ lo apartó. Misaki solamente rió.
─Y a causa de que no podía estar con mis amigos, me deprimí mucho, y tuve una gran discusión con mi padre. Terminé yéndome a otra parte a conseguir un trabajo de medio tiempo para vivir yo solo, y empecé a fumar para calmar mi tristeza, pero tristemente me llevó a tener cáncer.
─Wow, amigo. Siento mucho eso─ dijo Tsubasa, apoyando una mano en el hombro del contrario.
─Descuida. Hoy vine por mi primera quimioterapia.
─¿Cuántas te tienen que dar?
─Siete.
─¡Igual que a mí!
─¿Te gustaría acompañarme a mis quimioterapias?
─¡Desde luego! Además así podrán dármelas al mismo tiempo─ dijo alegre.
─Oye, Tsubasa, realmente me caíste bien.
─A mí también me caíste bien, Misaki.
Ambos se sonrieron mutuamente.
─Awww, qué lindos─ dijo para sus adentros el de orbes azules. Entonces su estómago rugió─. ¡Oigan, tengo hambre!
─¿Quieren ir por comida china?─ sugirió Misaki.
─Sí. Tengo mucha hambre.
─Mi estómago se come a sí mismo─ se quejó Ryo.
─Deja de quejarte. Ya nos vamos.
Los tres salieron del hospital muy animados. Conocer a Taro le regresó las esperanzas a Tsubasa de poder derrotar al cáncer.

ESTÁS LEYENDO
𝗘𝗟 𝗖𝗔́𝗡𝗖𝗘𝗥 𝗡𝗢 𝗔𝗥𝗥𝗨𝗜𝗡𝗔𝗥𝗔́ 𝗡𝗨𝗘𝗦𝗧𝗥𝗢 𝗔𝗠𝗢𝗥 ❱ 𝗖𝗧 ✔
Short StoryA Tsubasa Ozora le diagnosticaron cáncer de estómago a sus veinte años a causa de su mala alimentación y por haber fumado tabaco. Su mejor amigo, Ryo Ishizaki, le dice que vaya al hospital a que le pongan quimioterapias para erradicar esa enfermedad...